EL CORAJE (Libro IV)

CAPITULO 6

Seokjin sintió que Taehyung dejó de luchar cuando el hombre cayó al suelo. Le dolía el corazón por el dolor que Taehyung estaba sufriendo. Deseaba poder arreglarlo y hacerlo todo mejor. Por desgracia, sabía que todavía no había acabado. Tenían mucho trabajo que hacer antes de que Taehyung estuviera listo para el mundo.

—¿Estás preparado para dejar de luchar contra mi Taehyung? —Su voz, aunque profunda, era clara. Quería que Taehyung supiera que tenía una opción en las cosas, pero también quería que el hombre se diera cuenta de quien estaba al mando entre ellos dos. No podía dejar que su voz se suavizara hacia Taehyung hasta que el hombre aceptara su dominio.

—Sí.

—Entonces deberías levantarte. —Seokjin se levantó y extendió su mano.—Mi mano está justo delante de ti, solo a unas pulgadas de tu rostro. Todo lo que tienes que hacer es alcanzarla y cogerla.

Taehyung se tensó por un momento luego vacilante extendió la mano hasta que sus manos se tocaron. Seokjin gentilmente levantó a Taehyung luego se acercó para bajarle la camiseta a Taehyung, mantuvo su otra mano conectada a la de Taehyung.

—¿Por qué? —Susurró Taehyung en un susurro roto. —¿Por qué estás haciendo esto?

Seokjin podía contestar la pregunta de Taehyung, pero no creía que estuviera listo para la respuesta. Pasarían semanas hasta que Taehyung estuviera listo. En su lugar, Seokjin empezó a llevar a Taehyung hacia el baño. Quería quitarle el fuerte olor a desinfectante del hospital al hombre. También pensó que Taehyung podría necesitar algún cuidado gentil justo ahora. Seokjin llevó a Taehyung al baño luego se giró para encender la ducha. Cuando volvió, Taehyung estaba temblando. Seokjin hizo una mueca y atrajo a Taehyung contra él. Colocó su barbilla encima de la cabeza de Taehyung mientras el hombre se acurrucaba contra él.

—Va a estar bien amor, —susurró Seokjin encima de la cabezade Taehyung—. Lo prometo.

—No puedes prometer eso.

—Puedo prometer lo que quiera.

Taehyung rio mientras ladeaba la cabeza. Los grandes ojos de Taehyung habían palidecido por el accidente. Hacía que Taehyung se viera más exótico pero Seokjin no podía evitar preguntarse si siempre estarían así o si se volverían a oscurecer a su color normal.

—Vamos a limpiarte, —dijo Seokjin mientras bajaba los pantalones de Taehyung hasta sus pies luego alzó cada pie y se los sacó. Los tiró en el cesto de la ropa para lavarlos luego. Tenía algo mucho mejor para que llevara Taehyung. Seokjin rápidamente se quitó su ropa, sonriendo cuando se dio cuenta de que su cuerpo estaba reaccionando a la cercanía de Taehyung. Su polla estaba interesada, a media hasta y amenazando con endurecerse el resto del camino. Agarró las manos de Taehyung y lo llevó hacia la ducha.

—Pie arriba Taehyung, hay un filo en el borde de la ducha.

—Lo recuerdo.

Taehyung caminó con cuidado, alzando el pie muy arriba mientras pasaba el borde de la ducha. Seokjin lo entró en la ducha un poco más luego lo dirigió bajo el caliente chorro de agua. Rápidamente agarró la esponja del estante junto a la ducha y entró en la ducha, cerrando la puerta tras él. Seokjin observó a Taehyung enjabonarse bajo el agua. Las marcas de la espalda estaban curándose bien, había ligeras cicatrices pero nada muy visible. Seokjin habría estado enfadado si las antiguas indiscreciones de Taehyung hubieran dañado su preciosa piel canela. Y Taehyung realmente tenía una hermosa piel, esa era una de las tantas cosas que fascinaba a Seokjin del hombre. Seokjin podría realmente ver cada músculo tensarse cuando Taehyung se movía. Seokjin sintió que Taehyung se tensaba bajo su mano cuando empezó a lavarle el cuerpo.