Bury a friend | Sweet Home

La mejor arma

Mientras todos votaban me dirigí a una esquina y allí me empecé a abanicar con un papel de revista que había encontrado antes. Hyun-su se acercó a mi.

-¿Qué has votado?.- Me pregunto en voz baja.

-Que te quedes. Es obvio. No te podía dejar morir.

-Pero soy un monstruo.

-Claro que no. No lo eres.

-Pero tal vez pronto lo sea.

-Entonces te matare, como te prometi.- Me miró con los ojos muy abiertos.

-¿Lo..lo harás?

-No sería capaz. Solo bromeo.- Sonreí.

Puse mi atención en la votación de nuevo. Eun-hyuk lo ponía todo en una pizarra.

-Ocho votos a favor y siete en contra.- Anunció el chico.- Si uno de los dos últimos votos es a favor, lo echamos.

-Hay siete personas en contra, ¿es que estáis locos?.- Ese señor volvió a protestar.

-En contra. Ocho a ocho.

-Joder. ¿Estas en contra? .- Le preguntó a su mujer.

-¿Qué? Yo no.- Dijo ella con miedo.

-Tendríamos que echar a los que estén de su parte. Sois unos desgraciados.

-Oiga no me grite.- Dijo Ji-soo de brazos cruzados.

-Eso señor, sus años le están haciendo mal...

-Aun no lo sabemos.- Me corto Eun-hyuk.- Este último voto determinará el resultado.

Hyun-su ya había salido de la habitación. Miraba expectante el papel. Una cruz sobre un círculo.

-Nulo.

-No me lo puedo creer. Oye, tu. Trae aquí a ese cabron.- Señaló a uno de los hombres de la sala.- ¡Venga! Hay que deshacerse de él.

-Usted sí que es un cabrón. Pare de faltar el respeto.- Me acerqué a él. Era más alta pero aun así me sentí un poco indefensa.

-Extranjera malcriada. Solo eres una idota. No eres nadie para hablarme así.

-Señor ¿porque no se relaja?. Puedo notar las venas de su cuello.

-Serás cabrona...- Se acercó a mí para golpearme, de nuevo, pero Eun-hyuk lo detuvo.

-¿No estás de acuerdo con la votación?.

-¡Pues claro que no! No es un asesinato. Asesinato es matar aun humano, el es un puñetero monstruo.- Grito derribando la mesa.

De repente la nariz del señor comenzó a sangrar. Así como lo hizo la de Hyun-su. Se estaba transformando en un monstruo.

-Dios mio esta sangrando.

Mientras todos los miraban con terror, en mi boca se formó una sonrisa involuntaria. Obtuvo su merecido, si soy honesta. Mientras intentaba marchar por la puerta choco con mi compañero.

-Mas vale que luche.- Dijo con una mirada fría.

-¿Qué?...

-Si no quiere que el monstruo le devore.

-Hijo de puta.- Hyun-su solo miro a otro lado.

-¿Yo tengo derecho a voto?.- Mire a Eun-hyuk rogando por que dijera que sí. Agarro un papel con un círculo.- Si hecho esto nos vamos los dos ¿no?.- Pose mis ojos en el, pero solo me miro por un segundo y volvio a mirrar el papel.- ¿Es asi?.- Sus ojos e volvieron negros, de nuevo. El señor que seguía sangrando, cayó al suelo, sin consciencia.