Pov Jimin
8:09AM
Al día siguiente me desperté, lo primero que vi fue a Jungkook dormir. El se veía tan tierno, sonreí por ello. Dejé un beso en su frente. Me levanté y me vestí en silencio con cuidado de que no se despertara y me fui de allí.
Me encontré con varios sirvientes, los cuales algunos murmuraban a mis espaldas, viendo la marca que tenía en mi cuello, hecho por Jungkook.
Cuando fui a la cocina, recibí una llamada. La acepté. Aquél celular era el que yo usaba de incógnito por si acaso Jungkook me revisaba el móvil para que el no me descubriera. Me sorprendió recibir una llamada en aquél celular.
-¿Si?.-Pregunté.
-Soy Jin...-Dijo el, parecía muy serio.-Ven a donde ya sabes.
Antes de que pudiera contestar, colgó.
Mi corazón latía deprisa.
Tomé un vasito de leche y me fui sin más a prepararme. Me puse un uniforme, y también unos zapatos. Me sentía nervioso, hacía ya tiempo que no había pasado ninguna información, me iban a despedir.
No te hagas la víctima, Jimin, sabes bien que quieres estar con elSuspiré, mirándome al espejo del coche.
Agaché mi cabeza con una mano apoyada en el volante. La sangre corría por mis venas de manera rápida, empecé a conducir. Sentía la sensación de que me perseguían, pero no era nada.
O eso creía.
Llegué a aquél lugar abandonado a las afueras de la ciudad de Seúl.
Había estacionado mi auto en donde siempre, cubriéndolo con una larga y fina tela.
Miré a mi alrededor, entré a aquél lugar.
Allí había el extraño ambiente que el de siempre, el olor a antiguo, la sensación de que era allí un lugar terrible en verdad.
Cuando entré, vi varias antiguedades de todo tipo, y también a Jin sentado en un taburete, también vi a Wonyoung, quien estaba con unos informes en su mano.
Otros guardias estaban allí en el fondo de la sala, usando sus comandos y estando atentos por si alguien más venía para así proteger la zona. Miré a Jin, notaba en aquél momento varias miradas en mi, muchas de desprecio.
-¿Pasa algo?.-Pregunté, Jin esbozó media sonrisa, llamó a Jennie, quien se acercó a nosotros algo insegura.
-¿Que qué pasa?.-Preguntó Jin, sarcástico, se acercó a mi, agarró el cuello de mi chaqueta.-Osea que esa cosa que tienes en el cuello es obra de Jeon, lo estás disfrutando, sin duda.
Lo empujé bruscamente, separándolo de mi.
Wonyoung y otro chico más me apuntaron con sus armas.
El ambiente estaba tenso.
-Tranquilos, no me hará nada.-Dijo el mirándolos, para luego mirarme a mi.-Dime, Jimin, ¿por qué han asesinado a Hoseok?
Me sorprendí por aquello.
Sentí mi sangre congelarse por un instante.
-¿Qué?.-Pregunté confuso sin entender.
-No te hagas el que no sabes.-Intervino Wonyoung, se acercó a mi, con el arma aún en sus manos y apuntándome a la cabeza.-Eres un traidor, Jimin.
-Yo que tú bajaría el arma.-Interrumpió Jennie, ella apuntaba a Wonyoung, amenazante.-Ahora.
-¿Enserio lo apoyas?.-Preguntó.-Por su culpa hay más de miles personas muertas.
Agarré el brazo de Wonyoung, aprovechando de que estuviera distraída. Quité el arma que ella llevaba, doblándole un poco el brazo. Rápidamente apunté a Jin.
-Escucha, no es mi culpa.-Dije alzando la voz, uno de los guardias se quiso acercar a mi para detenerme pero Jin lo detuvo, alzando la mano.-Es verdad, yo estoy enamorado del señor Jeon.
Wonyoung se cruzó de brazos.
-No es ningún delito.-Dije, sentí un nudo en la garganta, tenía ganas de llorar, mis ojos estaban llorosos.-No es ningún delito enamorarse.
Joder, ¿por qué no lo entendían?
-No nos has dado pruebas, Jimin.-Dijo Jin, serio, iba a decir el algo más pero lo interrumpí.
-El es inocente.-Interrumpí.-El es bueno.
De repente, los guardias que antes estaban vigilando la zona, habían desaparecido.
Me di cuenta de ello, pero traté de esconderlo.
¿Acaso Jungkook estaba aquí?
Wonyoung rió.
-La verdad es que eres un idiota.-Dijo ella.-¿Cómo te atreves a defender a un asesino?
-¿Llego en mal momento?.-Dijo una voz ronca, pero familiar, lo miré, era Jungkook, el sostenía un arma en sus manos.
Jin se quedó petrificado, Jennie, que estaba cerca de una de las ventanas, fue agarrada por el cuello por una chica pelinegra, con piel pálida, sin embargo aquello era extraño, no le sujetaba con la misma fuerza que los demás sujetaban a sus rehenes. Entraron varias personas las cuales reconocí, eran parte del clan o grupo de Jungkook.
Iba a haber una masacre.
Vi que Jungkook desvió su mirada hacia mi. Una lágrima cayó de uno de mis ojitos, se me partía el alma. El me había descubierto.
-Lisa, llama a los Min.-Ordenó Jungkook, mirando a la chica que agarraba a Jennie por detrás, para luego volver a mirar a Jin.-¿Quieres algo? dímelo a mi y no a mi chico.
Jin no se atrevió a responder, Wonyoung se puso por medio, iba a decir algo pero, Jungkook agarró la cabeza de la chica con ambas manos, y giró su cabeza de manera brusca, desnucándola, rompiéndo su cuello, quitándole la vida. Cayó al suelo, Jungkook ni siquiera la miró. Agarró del cuello a Jin.
-¡Porfavor, no!.-Dije, guardando mi pistola en uno de mis bolsillos, abrazando a Jungkook por detrás.
-Mark, llévate a Jimin a donde te dije.-Ordenó sin apartar la mirada, sin embargo me aferré más fuerte a el.
Cuando Mark me iba a agarrar, le pegué un codazo en el estómago, me puse entre Jungkook y Jin, agarré del cuello de su camisa a Jungkook.
-Sólo vámonos, porfavor.-Pedí casi suplicando, su mirada era diferente, fría, seria.-Porfavor Jungkook vámonos.
Noté cómo su mandíbula se tensó, apretando un poco sus dientes.
Era como si todo se hubiera detenido, como si el tiempo no cesase.
El pelinegro agarró mi brazo, salimos de allí, no sin antes Jungkook decirle a Mark que el señor Min se ocupara de todo. Nos metimos en la furgoneta suya, el me miró. Estábamos en la parte trasera del vehículo.
-Jungkook...-Quise explicarle todo, decirle lo sucedido, pero no paraba de llorar, Jungkook acarició con una mano mi mejilla.-Lo siento, lo siento tanto....
-Tranquilo.-Susurró el, cerca mía y de mis labios.-Yo también te mentí después de todo.
Nos abrazamos uno al otro.
Me escondí en su cuello. De repente una chica entró a la furgoneta con otra chica. Era Jennie, y aquella chica que se llamaba Lisa.
-¿Dónde vamos, mi señor?.-Preguntó Lisa, sentándose en el asiento de conductor.-Espero que no te importe que haya traido a Jennie.Jennie me miró, luego miró a Lisa con complicidad.
-A la ciudad.-Contestó Jungkook.-Usaremos el primer avión que se diriga a Japón.
Lisa asintió, comenzó a conducir.-¿Q-Qué hace Jennie aqui?.-Pregunté, mirando a Lisa.
-Todos podemos enamorarnos, ¿no?.-Dijo ella con una sonrisita dibujada en su rostro.
Jungkook me miró.
Yo lo miré a el.
Estaba confuso.
-Jungkook, ¿qué será de nosotros?.-Pregunté mirándolo preocupado.
El soltó un suspiro.
-Cogeremos el primer avión a Japón, allí estaremos a salvo.-Me dijo el, seguro de si mismo.-Nadie ni nada me separará de ti.
Sonreí un poco por ello a pesar de las lágrimas que caían sobre mis mejillas.
-Te quiero.-Dije bajito, cerca de sus labios, el sonrió.
-Nunca te dejaré solo.-Me dijo el.-De repente alguien disparó a la parte de atrás del coche, Jungkook me abrazó, protegiéndome, lo miré asustado, abrazándolo, hubo otro disparo, rompiendo el pequeño cristal de la parte de atrás de la furgoneta, nos echamos al suelo Jungkook y yo, el encima mía, protegiéndome.-Mierda.
-¡Agárrense bien!.-Gritó Lisa, pude ver a Jennie agarrando una pistola.
-Es...es Taehyung.-Dijo Jennie, giró su cabeza hacia mi.-El...quiere venganza.
-Jimin quédate aquí no te muevas.-Pidió Jungkook poniendo sus manos en mis mejillas.-Escóndete.
Dejó un beso en mi frente, agarró un arma bastante grande, era más larga que una pistola.
Se asomó por uno de los cristales, comenzaron a dispararse uno al otro.
Tenía miedo. Agarré una escopeta, me puse en el otro extremo de la ventana pequeña a disparar.
Jungkook me miró.
-No te iba a dejar solo en esto.-Dije, el esbozó media sonrisa.
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Fin del capítulo.
Espero que les haya gustado bastante, el fin se acerca JAJAJA.
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Detective
FanfictionJeon Jungkook, el famoso asesino en serie y Jimin, un detective principiante que deberá de infiltrarse y seducir al alfa para obtener información y pruebas para detenerlo.