I'll be what you made me be (Allxtakemichi)

Capitulo 3

[NO CORREGIDO]

Hanagaki oficialmente, había iniciado su primer día de clases, esperaba fuera de el aula de su clase, algo nervioso, por tener que pararse frente a todos en aquella clase, cuando escuchó ser llamado, se armó de valor, abriendo la puerta de aquella escandalosa aula, que en cuánto observaron al príncipe, quedaron en completó silencio.

Aún nervioso, caminó hasta llegar a un lado de su profesor, el cuál lo presentaba, sin mencionar su puesto en la jerarquía, cosa que lo alivio, aún con todo y su reciente presentación, esperaba que no muchos conocieran su apariencia. Y así era, nadie pensaba en ese momento que él era el príncipe, lo único que pasaba por la cabeza de gran parte de sus compañeros, era la hermosa apariencia de aquel chico.

Uno que otro, chicos y chicas por igual, se sentían flechados por el menor, algunos otros no tardaron en empezar a envidiar a Hanagaki y aún más, porque parecía ser especialmente tallado al nivel de la perfección.

- Cómo saben todos, una de las reglas de está escuela es "tú posición no importa, aquí estamos para aprender, no para mandar" así que reciban lo como uno más e integrenlo - Takemichi se sintió tan feliz de que por primera vez, su título como príncipe, no fuera lo más importante de su persona y fuera tratado como todos. Pero pronto se daría cuenta, que las cosas no son como aparentan.

Fue asignado a un lugar, hasta la parte de atrás, el único vacío y que se encontraba a lado de un chico, que sin vergüenza se encontraba, aparentemente dormido, recargado en aquella mesa de madera tipo escritorio.

—¡Joven Keisuke!— El maestro comenzó a llamar a aquel estudiante "Keisuke" Takemichi lo sentía familiar y tras varios llamados y ninguna respuesta, el profesor se acercó, dándose cuenta que esté ardía en fiebre y entonces Hanagaki entendió, otro protagonista y ahora mismo sería llevado a la enfermería y ahí conocería a Hinata.

Aunque esa fiebre, al tardar tanto en tratarse, le haría tener fuertes episodios de migraña en el futuro, pero no debía entrometerse o eso creyó, hasta que de repente, ya se encontraba en la enfermería con aquel chico tendido en la cama, por órdenes de su profesor, debía cuidarlo, hasta que la enfermera llegará.

Algo nervioso de que en cualquier momento Hinata debía llegar, colocaba una toalla con agua fría, en la frente de Keisuke, o más conocido como Baji. El chico, hijo de la duquesa vampiro, que a pesar de su intimidante nombre, era querida en muchos lugares, por su amabilidad y vocación de enseñar a niños de barrios bajos, teniendo a su hijo, en una escuela prestigiosa, velando por su gran futuro.

Mientras colocaba la toallita en su frente, fue casi imposible, no detenerme a ver su rostro, y como era de esperarse, el chico era bastante atractivo. Y con toda la razón, todos los chicos y más los protagonistas de está historia, eran jodidamente guapos... Incluso, aunque le molestará admitirlo, todos los que había conocido, harta el día de hoy, superaban por mucho sus expectativas, eran realmente atractivos.

Y con eso en mente, Takemichi aún concentrado, viendo con detenimiento, las facciones de Baji, sintió su corazón detenerse, cuando vió a este, abrir poco a poco los ojos, claramente desubicado.

— Por favor... Por favor— Escuchaba la débil voz de Keisuke hablarle y una mano, tomar su brazo, sin ejercer fuerza, no sabía si por lo débil que estaba Keisuke o porque no planeaba dañarle, lo que no entendía era que es lo que le pedía.

— Sangre.

Takemichi palidecio, había olvidado algo de la novela quizá, haciendo memoria empezó a recordar que Hinata y Baji, no eran simple casualidad.

— Lo siento, yo-... alguien más vendrá a ayudarte— fue abruptamente cortado, por un Baji agitado y con una mueca de súplica en su rostro, aquella imágen debía ser un delito, para cualquiera que la viera, incluyendo a Takemichi. Esté mismo chico que ahora le pedía ayuda, era el mismo que ayudaría a matarlo en un futuro.