- Puedes porfavor dejar de lado tu odio y ver mas allá, verme a mi.
- No se quien esta mas jodido soldado, tu que traicionas a tu gente, o yo olvidandome a que vine. Lo siento, pero me quitaron algo importante, debo devolverles la moneda.
- Puedes...
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Lo Cullen se despedían de sus amigos que debían regresar a sus hogares, Carlisle agradecía a todos por haberles seguido arriesgando sus vidas. Edward miraba con una sonrisa hacia su hija que se despedía de Senna y Zafrina, Jacob quien estaba mirando a Renesmee igualmente camino hacia el cobrizo ganándose a su lado viendo a la pequeña.
—Estará con nosotros por mucho tiempo ¿No?
—Si, mucho tiempo—Contesto el cobrizo viendo a su hija que les sonreia cuando miro en su dirección. Edward miro al lobo haciendo una mueca. —Me alegra que te tenga.
Jacob sonrió de lado.
—¿Te empiezo a llamar papá?
—No. Definitivamente no.
Jacob soltó una risa viendo al cobrizo negar frunciendo el ceño, Renesmee corrió hacia su padre abrazandolo al tiempo que Bella se acercaba a ellos, miro a su hija como extendio su mano en su dirección y se acerco a ella tomándola y dejándola en su mejilla. Asintió hacia su hija sonriendole dulcemente
—Si, ahora estaremos todos juntos
Contesto abrazando a su hija. Alices suspiro viendo en la dirección de ellos recordando su visión de Renesmee ya adulta con Jacob en la push y sus padres felices, Edward miro a su hermana y sonrió al ver lo que ella vio.
Edith miro a Hermes acercándose a este, El mayor le sonrió de lado viéndola.
— Gracias, por seguirme. Se que si te pido que te quedes diras que no. Pero realmente no quiero perder el contacto contigo.
Hermes rio negando, este miro algo detras de ella y luego se llevo una mano a su nuca nervioso. Edith frunció el ceño al ver su actitud.
— No quise decirtelo cuando llegamos por toda la situación, pero creo que encontre a mi pareja.— Edith fruncio el ceño, entonces el volvio a mirar detras de ella, Edith giro su rostro rápidamente viendo como Tanya sonría y bajaba la mirada.— Nunca olvidare a mi esposa y mi hija. Pero por primera ve me siento con ganas de seguir viviendo, especialmente cuando la veo.
— Y te lo mereces.
Dijo ella mirándolo con una enorme sonrisa
— Tu igual.— Hermes llevo una de sus manos a su rostro— Ambos debemos dejar de atormentándonos con los fantasmas de nuestras familias.
Edith asintió respirando hondo.
— Si.. Creo que ya es tiempo.
— Eres como una hija para mi Edith. Mi familia.
— Y tu el padre que nunca tuve. — Edith le sonrío tomando su mano que tenía en su rostro. — Gracias, por cuidarnos esa vez que llegamos a tu vida, y por haberme ayudado con los Vulturi.
