Owen y los 7 Prisioneros

CAPÍTULO 1 Preocupaciones

Andábamos en la universidad, acabábamos de tener un examen globalizado, estuvo complicado, pero logré tener una nota perfecta.

— ¡¡Hola!! ¿Qué tal te fue en los exámenes? A mi me fue fatal. —se quejó mi amiga Lana.

— Tranquila, también me fue horrible en esto, no entendí mucho los temas. —le dió una sonrisa falsa mi amigo Sam.

— ¿Te imaginas que Keith haya reprobado? Eso sería impresionante.

— ¿Tú crees?

— Si eso llegara a pasar el profesor debería volver a repetir el exámen. —agregó burlescamente.

— No cuentes con eso. —carcajeó un poco sin un tipo de esperanza.

Escuchaba a ambos hablando en el pasillo, así que me acerqué y los tomé del hombro.

— Oigan par de dos, ¿qué hablan de mí? —pregunté algo burlesco e intimidante.

— ¡¡¡Keith!!! —Lana se abalanzó hacía mí dándome un fuerte abrazo, sacandome todo el aire— ¿Qué tal te fue? ¿Todo bien? —preguntó la pelinegra con sus grandes ojos color miel y brillantes mirándome fijamente a espera de mi respuesta.

— No me mires así, me pones nervioso. —le reclamé logrando soltarme del abrazo y alejándome un poco de ella— Y sobre el examen.......podría decirse que si. —le mostré mi examen a ambos quienes se morían de la intriga— No es la gran cosa.

— ¡¡¡¿¿¿CÓMO PUEDES DECIR QUE NO ES GRAN COSA???!!! ¡¡¡¿UN 100?!!! ¡¡¿POR QUÉ NO PUEDO TENER TU INTELIGENCIA?!! —se quejó la peli negra empezando a llorar falsamente.

— No estés inventando, ¿en serio no estás emocionado? La mayoría reprobamos esa prueba.....y era importante. —se quejó el castaño, no podía culparlo, se preparó mucho para aun así reprobarlo.

— Pues sí, pero ya saben que solo saco esto para contentar a mi hermana, así qu- —fuí interrumpido.

— Sí, y para restregárnoslo en la cara. —mencionó mi amiga quien no podía creer mi reacción.

— Por supuesto. —dí una sonrisa con tono burlesco y directo.

Seguimos caminando por los pasillos, está vez la preocupación era la posición en la que podían quedar. Mientras más alto el número, más mal te había ido.

— No quiero ni ver las calificaciones finales cuando las cuelguen, terminaré en la posición 55 o 60 si sigo así. —mi amigo estaba algo desmotivado.

— Voy a quedar de 100 para arriba y ¿todavía te quejas? —Lana le hiso un puchero a Sam.

— Chicos, hay que seguir adelante y...... de verdad les deseo suerte para el siguiente, sigan esforzándose. —traté de animarlos un poco.

Todavía me faltaba una clase para poder irme a casa, así que me desvié y me despedí de ambos para dirigirme a dicha clase. Tomaba clases avanzadas, según los profesores me ayudaría a avanzar más rápido de año.

— ¡¡¡Hey!!! —una voz algo conocida hiso que me detuviera.

— ¿¿hm??

— Hey Keith, ¿cómo te fue en el examen?

— Normal —puse un tono serio, puesto que la persona en frente de mí me caía pesado.

— ¿Puedo preguntar cuál fué tu calificación?

— 100 puntos. —le respondí.

— puf, nota perfecta como siempre. No se cómo mierda lo haces, aunque se nota que no tienes nada de vida a parte de estudiar. —burló un poco—¿Y qué pasa con esos ánimos? Eres el mejor, nos pateaste a todos. ¿No deberías estar felíz?