Terminó la clase, me mantuve sentado en posición de descanso, ignorando a todo aquel que se me acercará para hablar de mi nota.
— ¡¡¡Hey Keith!!! —escuché una voz familiar a lo lejos.
— ¿Mm? —levanté la cabeza notando que se trataba de Ash, un buen amigo mío que se acercó a mí.— Hola Ash, ¿como andas?
— Todo bien, ¿y tú? Te vez horriblemente cansado. —me dió una palmada en la espalda.
— Si, no me preguntes de mi día por favor. Me tiene harto. —respondí con fastidio.
— No iba a preguntar. —carcajeó un poco— Bueno, te daré una propuesta, si no quieres está bien, pero con esa cara deberías aceptarla. —volvió a reir.
— ¿Cuál?
Los chicos y yo vamos a jugar baloncesto. ¿Quieres venir con nosotros? —me preguntó muy emocionado.
Antes de contestarle, solté un suspiro. No quería jugar pero tenía que liberar el estrés que cargaba en mi interior.
— Esta bien. —me levanté algo desanimado.
Ash: — Excelente, sabía que no dirías que no. —dijo emocionado.
Me llevó a la cancha con nuestro equipo con los que siempre jugaba, lo había dejado por cuestiones de tiempo y que mis horarios no coincidían con el de ellos por las clases avanzadas, pero me alegró verlos de nuevo y saber que se mantuvieron juntos.
Saludé a los chicos quienes estaban impresionados de verme. Me felicitaron por mi promedio, algunos venían con palmadas en la espalda y otros dándose cuenta del esfuerzo que le ponía al estudio, felicitandome por no haber sido en vano haberlos abandonado.
La felicidad no duró mucho debido a que el equipo rival ya querían comenzar y sólo se burlaban de nosotros, así que me dirigí a los vestidores para cambiarme a una ropa más cómoda, guardé lo demás en un casillero y apenas salí me choque con alguien.
— Disculpa.
— ¿Keith?
— ¿Owen? ¿Qué haces aquí? —pregunté asombrado y extrañado.
— Hola Keith, no esperaba verte aquí. Me invitaron a jugar, iba a cambiarme también, con esta ropa no puedo hacer mucho. —dijo sonriente, su sonrisa siempre me dejaba encandilado.
— Ya veo, ¿para quienes vas a jugar? ¿Para Alex o para Ash? —pregunté intrigado de su respuesta.
— No sé quienes son. —me miró confundido.
Noté que era la primera vez que lo invitaban a jugar, ni siquiera sabía el nombre de su lider.
— Ash es uno rubio.... —le contesté.
— No, era tipo peli rojo..... algo negro.
— Ese es Andy......
— ..... ¿Andy? ¿En serio? —soltó unas risas.
— Le gusta que le llamen de otra forma, pero se me olvidó su apodo. —respondí con una sonrisa también.
— Es que se vé como alguien un tanto "respetable" y que se llame Andy..... No me lo esperaba.
— Nunca lo había notado, se pintó el pelo para verse más "maduro" también, por eso es raro.
— Joder, con razón me dijo que lo llame como Hanz...... un nombre raro pero se le oye algo mejor.
— Increíble. Bueno, esa es la mentalidad de tu equipo. Él es la mano derecha de su lider que es Álex.
— Mentalidad de mi equipo....... Es horrible. —volvió a reír— No me extrañaría si perdemos.
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Owen y los 7 Prisioneros
RandomUn grupo de amigos de la universidad pasan sus vidas con normalidad en una pequeña ciudad donde ocurre una serie de "desapariciones" que la policía camufla con desertores de dicha ciudad debido a las pocas oportunidades que ofrece. Con el pasar de...