📜 Capítulo 25 📜

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No era mentira que Leona no tenía entre sus personas favoritas a ese muchacho siendo que ante su presencia pareció que su animal interior le llegó el instinto de atacar a una presa vulnerable, ya que siendo tan perezoso como lo conocía, junto con Ruggie se levantó para gruñirle haciendo que...¿"Tánatos" lo habían llamado? Retrocediera dos pasos ya sea por el asusto del gruñido o por sentir la amenaza.

De cualquier forma, el ambiente hostil ya estaba puesto sobre la mesa, y no es que Maryoku tuviera muchas ganas de ponerse de intermediario entre ellos, en cambio, los dejó sacar su hostilidad antes de él mismo tomar la palabra.

–¿Qué hace el cuernudo aquí?–Leona casi que le rugió, en un reclamo, a Serafín.

–¿Estás pensando en sacarnos información?–hasta Ruggie le frunció el ceño–profesor Serafín, usted sabe cómo es este tipo

–Tan problemático como lo han sido ustedes, lo sé perfectamente–dijo Serafín pareciendo más bien hacerse de la vista gorda–más sin embargo, creo que merece una oportunidad de explicarse

–Es así...bien, tienes cinco minutos para eso–dijo Maryoku cruzando los brazos mientras afilaba la mirada hacia el de ojos amarillos–explícame solo una cosa, ¿por qué estabas en mi sueño la última vez?

–¿Estaba en tu sueño?–le preguntó Francy mirándolo con confusión.

–Imagino que tiene algo como telepatía onírica, esa clase de habilidad permite ver los sueños de otros–dijo Maryoku sin extenderse en explicaciones.

–Oh~ eso explica el por qué se sentían pesados los sueños contigo aquí, ¿no es así?–dijo Leona como en una gracia que terminó en amenaza.

–Eh...les prometo que no fue mi intención molestarlos con eso...–dijo Tánatos tratando de pensar en una forma en que le pudieran creer–yo...a mí me gusta ver los sueños de otras personas, ¡no estaba tratando de sacar información ni nada así!

–¿Y te tendríamos que creer porque...?–preguntó Serafín como el primero en ponerlo en duda.

–¿Usted no iba a dejarme explicarme?–preguntó Tánatos recordándole sus propias palabras.

–Lo haría, pero la explicación debía de ser lo suficientemente creíble–dijo Serafín como si eso estuviera demás el decirlo.

Dejó a Tánatos en una nada absoluta cuando le aclaró ese punto, y entre las miradas juzgadoras de todos los presentes probablemente le removieron algo de sentimiento que le hizo bajar la cabeza con una expresión melancólica hasta que su pollito, que había estado en su cabeza todo este tiempo, se dejó caer hasta su hombro y le dió suaves piquitos en una de sus mejillas, devolviéndole aunque sea un cuarto de la sonrisa que había mostrado cuando llegó al dormitorio.

Tuvieron que pasar unos segundos más para que se decidiera a hablar, y aún cuando lo hizo, mantuvo una posición poco o nada segura ante ellos, llevando una mano a su brazo contrario, como una forma de simbólicamente darse fuerza antes de tener que hablar con sinceridad de lo que de verdad estaba haciendo escondiéndose entre los sueños de otras personas.

–No sé cómo relacionarme con las personas, ¿está bien?–dijo Tánatos mostrándose algo apenado de tener que hablar de eso–por eso me oculto entre sus sueños, es la única manera en la que puedo acercarme

–Eso es una descripción de lo que haces bastante adorable cuando una más acertada podría ser "espió lo que los demás sueñan"–dijo Maryoku tomándose de una forma más realista esa explicación.

Twisted Wonderland [ Fanfic AU ] 📜 El Mercader del Mar Profundo 📜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora