VII

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Cuando despertaron al día siguiente, la situación no parecía tan difícil. Las sábanas que habían elegido para su habitación eran especialmente suaves, la habitación era cálida y cada uno podía sentir con claridad la piel del otro. Recién despiertos, sin maquillaje, sin estilistas que arreglaran su imagen, parecían no tener fama, ser dos chicos más de los tantos chicos enamorados que había en el país. Xiao Zhan le dio un beso en el pecho a Yibo.

—Nunca te lo dije, pero creo que tienes el mejor cuerpo que he visto en mi vida.

Yibo lo miró con una sonrisa muy amplia.

—Es porque —continuó Xiao Zhan— tu cuerpo se ve delicado y hermoso, y fuerte al mismo tiempo. Es una combinación difícil de lograr.

—Zhan Ge, yo creo que eres el hombre más guapo del mundo —respondió Yibo.

—¿Qué? Tú eres más guapo —respondió instintivamente Xiao Zhan, mientras lo abrazaba—. Recuerdo que una vez una presentadora de televisión te dijo que cualquier hombre podría enamorarse de ti. Me causó gracia que no dijo "cualquier mujer", sino "cualquier hombre".

—¿Cuándo fue eso?

—Cuando tenías el pelo rubio.

Yibo había pasado por una serie de colores de cabello hasta hace un par de años.

—Pfff. Cuando tenía diecisiete años. Eso fue hace mucho.

—Pero sigues siendo guapo. Muy guapo, Bo Di.

Yibo rodeó la cintura de Xiao Zhan con las manos.

—¿Ah, sí? —le susurró.

—Sí —respondió Xiao Zhan en voz baja.

Yibo pegó las caderas de Xiao Zhan a las suyas. Le hundió los dedos en la piel y le estaba besando el cuello cuando ambos escucharon que uno de los celulares estaba sonando.

—Diablos —dijo Yibo. Despareció y volvió con los dos celulares. Le lanzó el suyo a Xiao Zhan—. Llama a tu equipo.

Se fue a otra habitación a contestarle a su mánager.

—¿Cómo van las cosas?

—Bueno, era de esperar que tus fans se dividieran.

—Claro.

—Lo que no era predecible es la cantidad de antifans que están tratando de aprovecharse de la situación. La situación está bastante mal. Van especialmente... bueno, van especialmente en contra de Xiao Zhan.

—Porque es más famoso.

—Sí. Hay muchas celebridades que quieren desplazarlo para ocupar su lugar.

—¿Cómo crees que estarán las cosas en unos... cinco días?

—¿En cinco días? Más o menos igual. ¿Por qué preguntas eso?

—Quiero que permanezcamos aquí el tiempo suficiente para que pase lo peor y no tengamos que verlo.

—Entonces ve pensando en por lo menos una semana, o dos. ¿Quieres que te vaya avisando si pasa algo malo?

—Llámame una vez al día. No quiero estar pensando cada treinta minutos que mi vida se está yendo por el caño.

—¿Todo bien con ustedes?

—Lo quiero, y él me quiere. Todavía no empezamos a pelearnos por este asunto.

—Qué bueno. Te llamo mañana. Pero si pasa algo urgente tendré que llamarte a cualquier hora.

—Está bien.

Cuando regresó a la habitación, Xiao Zhan se estaba vistiendo. Se veía tranquilo.

Cuando no te tenía [Yizhan/Zhanyi] (TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora