ONLY TEARS [YOKOVINA]

CAPITULO 8

Divina observaba a su novia mientras está se sentaba en el filo de la cama noto los arañasos que ella dejó en la espalda de la pelinegra, se sonrojo ante los recuerdos, la Alfa se volteo en cuanto sintió la mirada de su novia mientras se acercaba a ella y la tomo de una mano y beso está.

-Amor debemos alistarnos para ir a la cena que tus padres organizaron - hablo la Alfa con una sonrisa y acaricio su cabello.

-Esta bien amor - asintió la Omega mientras cerraba sus ojos.

Ambas se pusieron de pie, para poder darse una ducha para que de es manera se desvíe siquiera un poco lo que ambas hicieron lo cuál sabían que tienen que tener más cuidado, después de ducharse ambas se vistieron en ese proceso la Omega vio la marca que dejo su novia, sabía perfectamente que Yoko la reclamo como su Omega.

Cuándo terminaron de vestirse salieron del departamento de la Alfa se fueron, cuando llegaron a casa de la Omega estacionaron el auto y bajaron, fueron recibidas por la madre de Divina.

La cena fue tranquila a Yoko le traía muchos recuerdos el estar de esa forma, después de todo extrañaba a su padre, después de cenar, la Alfa se retiro.

- Y bien hermana dime algo te divertíste el día de hoy? - hablo kent mientras se pasaba su mano por su mentón.

-A.......... A qué te refieres Kent - hablo Divina.

-Hermana no soy estúpido es evidente que Yoko te marco, puedo notarlo tanto por tu aroma y la marca de nota un poco en el cuello - respondió el Alfa mientras miraba seriamente a su hermana.

-Pero que...... Cómo es que .... - tartamudeo la Omega mientras miraba a su hermano.

-Divina no es malo que tengas novia y demás pero sabes perfectamente que debes cuidarte ahora más que nunca, mamá y papá están concentrados en los principales problemas que tienen ahora ahí algo de tu novia que no me termina de convencer pero ella hace un buen trabajo al cuidarte, pero quiero que sepas esto antes dentro de dos meses entraré a la academia de policía y prácticamente estaré viviendo en ese lugar y quiero asegurarme muchas cosas primero papá y mamá ya lo saben - hablo Kent mientras miraba a su hermana.

-Pero kent que pasará con lo que estás ayudando a papá - hablo Divina mientras lo miraba.

-Divina papá respeta mis desiciones no te preocupes pero hasta ese entonces solo te digo no hagas hagas tonterías hermanita - respondió kent mientras despeinaba a su hermana.

4 DIAS DESPUÉS

Yoko hablaba por celular con su padre quedando de acuerdo para poder encontrarse en una cafetería, cuando colgó suspiro era alrededor de las 8 de la noche la pelinegra tomo las llaves de su departamento y se puso un abrigo largo y sus gafas, salió de su departamento mientras caminaba encendió un cigarrillo y lo fumo de trayecto a la cafetería, cuando llegó por fin, vio que su padre aún no llego y pidió un café para ella y un late para su padre ya que era su favorito, miraba la ventana mientras tarareaba un poco, no pasó mucho cuando vio a su padre entrar y se sentó frente a ella.

-Hola papá cómo estás - saludo Yoko sonriendo.

-Como estás hija dime algo estás feliz que sucede - respondió con una sonrisa.

-Pues ya te lo conté papá - respondió la pelinegra bebiendo de su café.

-Entiendo, bueno Yoko averigüe todo lo que necesitabas con respecto a lo que pasa a la familia de tu novia y no es nada bueno, hija las personas involucradas son demasiado peligrosas creeme que lo que digo es cierto este tipo de personas hacen tratos conviertendose en socios para después estafarlos y luego matar a sus víctimas nadie está a salvo de ellos, cuando se toparon con nuestra familia logramos hacer que llegarán a estar tras las rejas pero me sorprende que los liberarán por qué todas las pruebas son claras pero tú misma sabes que con dinero todo se mueve en esta vida y ahora lo que te puedo decir es que tienes que cuidar de tu novia y su familia aremos lo posible para que vuelvan a estar tras las rejas por qué si te diste cuenta ahora de seguro están tranquilos ya que no están haciendo nada pero atacan en los momentos menos esperados no debes bajar la guardia - hablo el pelinegro.