ᴀ ꜰ ᴛ ᴇ ʀ ʜ ᴏ ᴜ ʀ ꜱ

~48~

Cʜᴀɴᴇʟ Rᴏᴜx

Era algo tarde y estaba a punto de irme a dormir, pero escuché mi teléfono sonar.

-¿Qué pasa, Sam?-le pregunté.

-Ven a Reseda. Es una emergencia-dijo antes de colgar.

Fruncí el ceño y me levanté para vestirme.

Me puse algo cómodo y después tan solo cepillé mi cabello dejándolo suelto.

Salí de mi casa para ir a mi coche y conducir hacia mi destino.
Al llegar a Reseda, concretamente a la entrada de donde Miguel y el Johnny residían.
En la entrada del lugar, me encontré con Eli y Demetri.

-Hola, chicos—les dije.

-¿También te ha llamado Sam?-cuestionó Eli mientras entrábamos.

-Sí. ¿Y esa emergencia?-cuestionó Demetri cuando llegamos donde Miguel y Robby estaban.

—¿Por qué debía traer mis cosas?—preguntó Demrtri.

-Tampoco sabemos más-respondió Miguel-. Nos ha citado Sam.

-Al menos contigo habla. A mí no me contesta...-mencionó Robby.

-¿Tory?-cuestionó Eli.

Miré hacia donde él lo hacía.

-¿Qué...? ¿Qué pasa?-cuestionó Miguel-. Hola.

-¿Qué te ha pasado en la mano?-le pregunté.

-Un accidente entrenando-mencionó ella-. No es nada.

Fruncí el ceño.

-Podemos demostrar que Silver atacó a Stingray-informó Sam.

-Si fue en el antiguo dojo, ya habían cámaras instaladas-dijo Tory.

-Estará todo grabado-continuó Miguel.

-No, lo vaciaron todo-dijo Robby.

-Puede que dé igual-mencionó Demetri-. Los sistemas de TechDown almacenan las imágenes en un servidor. Cuando Silver se fue de allí se llevaría todo el sistema.

-Creo que sí-respondió Tory-. Hay un servidor en su despacho del dojo principal.

-Si accedemos encontraremos el vídeo-agregó Eli-. Y podríamos subirlo a su canal de YouTube.

-Llamad a los demás-dijo Sam-. Decidles que acabaremos con Cobra Kai. Esta noche.

Caminamos hacia los coches.

[...]

Llegamos al dojo principal de Cobra Kai para esperar a que el resto llegara.

—Si es el sistema de alarma del otro dojo, podré hackearlo—informó Robby.

—Suena como si lo hubieras hecho antes—dijo Demetri.

—El kárate no fue mi primera afición, antes me salté alguna ley—respondió Robby.

—O podríamos pasar mi tarjeta—agregó Tory—. Para que los que estemos con la condicional no la incumplamos.

—¿Qué pasa, tíos?—saludó Eli chocando la mano con Chris.

—Hola. Perdón por el retraso—se disculpó—. A alguien le ha costado espabilar.

—Es que no son horas—dijo Mitch.

Sonreí divertida.

》¿Qué hace ella aquí?

—Está de nuestro lado—respondí.

—O por lo menos en lo que vamos a hacer—continuó Sam.

—¿Qué vamos a hacer?—cuestionó Mitch—. Los mensajes decían que acabaríamos con Cobra Kai, pero ¿cómo?

—Les enseñaremos quién es su sensei—respondió Miguel.

—Hay pruebas de que Silver cometió un delito—continué.

—Subiremos al despacho de Silver. Quedaos abajo vigilando—dijo Sam.

[...]

Una vez en el despacho de Silver, Demetri comenzó a hacer cosas con el ordenador que yo no entendía muy bien.

—Vale... El ataque a Stingray fue la mañana después del baile—mencionó Demetri.

—No me lo creo—dijo Tory—. Vamos a acabar con Silver.

—Sí—respondió Robby—. ¿Qué puede salir mal?

—Vale. Lo tengo—informó Demetri.

Todos nos acercamos un poco más para ver el video.

—¿Quieres ser un Cobra Kai?—cuestionaba Silver en el vídeo—. Quieres ser un Cobra Kai, ¿no?

El vídeo se trabó haciendo que no pudiéramos ver más.

—¡Mierda!—exclamó Demetri.

—¿Qué pasa?—cuestioné.

—¡No hay más! ¡Han borrado el resto!—respondió Demetri.

—Silver ha cubierto sus pruebas—mencionó Robby.

—Pues claro—dijo Sam.

—Vale, ¿y ahora qué?—cuestionó Miguel.

—Creo que podría haber otro vídeo—mencionó Tory.

—¿Sabes la fecha y la hora?—cuestionó Eli.

Tory la escribió en el ordenador para que posteriormente Eli se pusiera a escribir más cosas.

—Vale, creo que lo tengo—mencionó—. ¿Es este?

—Sí, es ese—afirmó Tory.

—¡Chicos!—se escuchó que nos llamaban.

De un momento a otro se escuchó algo de barullo.

—Vosotros quedaos aquí—les dije a Eli y a Demetri—. Necesitamos ese vídeo.

Bajamos al otro piso encontrándonos con los Cobra Kai.

Kenny golpeó a Anthony tirándolo al suelo.

—¿Ahora estás con ellos?—le preguntó Devon a Tory.

—Sabíais lo que pasaría si él y sus amigos volvían a pisar este dojo—dijo Kenny.

—¿Cómo se han enterado?—cuestioné.

—No lo sé—respondió Miguel.

Los Cobras soltaron una risa.

—Mitch, ven. Tu sitio está con nosotros—habló Kyler.

El aludido caminó hasta ponerse de lado de los Cobra Kai.
Desabrochó su sudadera dejando ver como debajo llevaba una camiseta de Cobra Kai.

—¿Alientopolla, cómo has podido?—cuestionó Bert.

—Pues no sé, ¿quizá porque ellos no me llaman Alientopolla?—respondió—. Estáis todos empeñados en acabar con Cobra Kai. Y yo ni siquiera quería dejarlo.

》Mirad eso: tienen comida, batidos, artículos personalizados... Nuestro dojo no tiene ni techo. ¡Ni chicas! Sin ofender—se disculpó mirándonos a Sam y a mí.

—Venga, Alientopolla, calla—lo interrumpió Kyler—. Tenemos una traidora y vosotros también, así que empate. ¿Peleamos ya o qué?

—No soy una traidora—dijo Tory—. Pero no acepto a Silver. Y vosotros tampoco deberíais.

—Silver nos mintió—continuó Robby—. A todos.

—¿A todos?—cuestionó Kenny acercándose—. ¿Cómo que a todos? A mí el que me ha engañado eres tú.

—Robby tiene razón. No peleémos—dijo Miguel poniéndose en medio.

Kenny se giró un momento.

—Claro que sí—dijo Kenny antes de soltarle un puñetazo a Miguel.

Boom. La pelea ya había empezado, y más rápido que incluso en el instituto.

21•05•2023