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Cʜᴀɴᴇʟ Rᴏᴜx

Me había puesto una falda de tubo blanca la cual llegaba hasta mis muslos y un top de manga larga negro.
Era básico, pero estaba bien para una fiesta en una casa.

Salí de mi habitación hacia la sala donde estaba mi madre quien recién había llegado después de toda la semana fuera.

-Qué guapa estás-me dijo-. ¿Saldrás?

-Sí. Por primera vez, Amber quiere venir-mencioné.

-Me alegro-dijo-. Podéis venir aquí luego, así no tendréis una hora para llegar.

-Vale, se lo diré. Adiós, mamá.

-Adiós, preciosa. Y llévate mi coche.

Salí de la casa y fui al coche para conducir a la casa de Amber.

Una vez allí, llamé al timbre.

-Oh. Hola, Chanel-me saludó la madre de mi amiga-. Qué guapa. Amber se está terminando de arreglar.

-¿Luego puede venir a dormir a mi casa?-cuestioné-. Mi madre ha organizado un día de chicas aprovechando que mi hermano tiene un cumpleaños.

-Si estáis en tu casa a las once, sí- comentó.

-A esa hora estaremos-mentí pues la fiesta empezaba a las diez. Era imposible volver a las once.

Amber bajó las escaleras dejándose ver con un vestido corto, algo impropio de ella.

-Estás guapísima-comenté.

-Gracias. Tú lo estás aún más.

-Venga, id ya. O no tendréis tiempo de disfrutar-dijo su madre.

Ambas asentimos antes de irnos.

Subimos a mi coche y yo comencé a conducir.

-No vamos a poder disfrutar nada de la fiesta; queda media hora para las once-mencionó Amber.

-Sí que podremos-aseguré a lo que ella frunció el ceño-. Iremos a mi casa a dormir. Tu madre ya lo sabe.

Soltó un chillido de emoción.

-¡Eres la mejor!-exclamó.

-En realidad, ha sido idea de mi madre-comenté.

-Las dos sois las mejores-dijo.

Al llegar al lugar donde se celebraba la fiesta, aparqué el coche donde pude y entramos a la casa la cual estaba abierta.

Había una cantidad indecente de personas. Estaba segura de que había más gente a parte de la del instituto.

-Wow. Cuánta gente-habló Amber en mi oído pues la música estaba muy alta.

-Le van a destrozar toda la casa-mencioné.

Sin saber cómo, llegamos a una mesa en la que había diversos tipos de bebidas alcohólicas.

-Bien. ¿Quieres probar el alcohol por primera vez?-cuestioné a lo que ella asintió.

》Te recomiendo no comenzar con vodka. Yo lo hice y no acabó bien.

-Bien, pues... creo que tomaré una cerveza-comentó.

-Buena opción. Yo también tomaré una-dije.

Serví cerveza en dos vasos.

Ella tomó un poco y puso una mueca.

-Está asquerosa-dijo.

Yo solté una risa.

-Yo también dije eso y ahora me gusta-comenté.

Ella iba a hablar pero fue interrumpida.

-Hola, chicas-habló Walter.

-Hola-saludó Amber con una sonrisa boba mientras que yo solo hice un movimiento con mi cabeza.

-Oye, Amber. ¿Vienes?-le preguntó Walter.

Ella me miró y yo asentí.

-Vale-respondió-. Luego te veo, Chanel.

Ambos desaparecieron entre la gente.

Me abrí paso entre la gente para sentarme en un sofá.

Estúpido, Walter.

-¿Este es tu concepto de fiesta?-escuché una voz que reconocería al instante-. ¿Estar sentada en un sofá tú sola?

Miré a Robby quien se había tomado la libertad de sentarse a mi lado.

-¿No decías que no ibas a venir?-cuestioné.

-Dijiste que les haría un favor a todos estos idiotas-comentó-. Yo no hago favores a idiotas.

Quise soltar una risa, pero no lo hice porque se suponía que no lo soportaba.

-Bien, ¿y qué haces aquí sentado conmigo?-cuestioné.

-He venido a hacerte compañía-respondió-. El imbécil de Walter se ha llevado a Amber.

-Igual no quiero tu compañía-comenté-. Ni siquiera sabes mi nombre.

-Te llamas Chanel, como Coco Chanel-contestó-. De hecho, ahora te llamaré Coco.

-Genial-respondí sarcásticamente.

Vi cómo Trey y Cruz se sentaban en los sillones que habían al lado de en el que Robby y yo estábamos.

Ellos habían repetido unas cuantas veces y no me daban buena espina.

-Aquí estabas-mencionó Trey hacia Robby-. ¿Qué haces?

-Hacerle compañía a Coco-respondió.

Lo miré mal.

-Soy Chanel-dije.

-Ah, sí. Sé quien eres-comentó Cruz.

Puso sobre la mesa que había frente a los sillones una bolsita y sacó papel de cigarrillo.

Lo miré curiosa.

-¿Qué es?-cuestioné.

-Cannabis-respondió-. ¿Quieres?

-No-respondió Robby por mí.

Lo miré con el ceño fruncido.

-Sí que quiero-dije.

No quería, pero me daba rabia que hablara por mí.

-Toma-dijo dándome el cigarrillo que acababa de hacer junto con un mechero.

Puse el cigarrillo entre mis labios pata después encenderlo. Di una calada haciendo que tosiera pues era la primera vez que fumaba algo.

-¿Estás bien?-me preguntó Robby.

Volví a dar otra calada sin toser esta vez.
Miré a Robby y le lancé el humo en la cara.

-Toma-dije dándole el cigarro.

-¿Qué haces con él?-me preguntó Trey mirando a Robby.

-Eso mismo me pregunto yo-dije.

¿Qué hacía fumando con esos tres?

-¿Fumáis esto muy a menudo?-cuestioné.

-Es una rutina-mencionó Trey sonriendo.

Yo asentí sin saber que decir, ya me había quedado sin conversación.

-¡Chanel!-exclamó Amber con una pizca de emoción en su voz.

Se abrió paso entre la gente hasta llegar donde yo estaba.

》¡Walter y yo nos hemos besado!

-¡Qué bien!-dije sonriendo.

-Es un jodido imbécil-dijo Cruz.

Amber se percató de la presencia de los tres chicos haciendo que me mirara con el ceño fruncido. Yo alcé los hombros.

16•03•2023

ᴀ ꜰ ᴛ ᴇ ʀ  ʜ ᴏ ᴜ ʀ ꜱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora