Louis olfateó el aroma de la sangre en el aire.
Ni sus manos, ni sus piernas estaban atadas. Estaba acostado en una cama y tenía sangre seca en la cabeza. No recordaba haberse desmayado.
Tocó su estómago, no había sangre.
De inmediato pensó en sus hijos. Tragó saliva.
El aroma intenso a carne llegó hacia sus fosas nasales, mareándolo y aturdiéndolo.
Cuando sus pies descalzos tocaron el suelo, sintió una punzada en las plantas. Estaba muy frío.
Esos estúpidos le dejaron la puerta abierta.
Afuera se sentía caluroso. El sol estaba en su punto más caliente, en una posición que iluminaba todo el lugar. También había muchas personas alrededor. Al salir nadie lo observó, de hecho, parecía que lo ignoraban. No entendía que estaba pasando.
Alguien le había puesto una bata de seda blanca, que en ese momento estaba manchada de sangre y su enorme estómago sobresalía, pero nadie lo miraba. Se preguntó si era una pesadilla.
Louis caminó hacia un bullicio de gente, de donde venía el olor a carne. Mientras caminaba una persona lo empujó y lo golpeó en el brazo.
—Ten cuidado—se quejó. Le había dolido.
Más personas se dirigieron hacia allá, por lo que decidió avanzar. Ahí fue donde vio a Harry.
Velozmente se aproximó al círculo de gente. Un hombre estaba de espaldas frente al alfa.
—¿Quién quiere ser el siguiente en divertirse con él?—se carcajeó irónicamente—.Él gran oso solitario del bosque, el único oso que no pertenece a una manada. Él que se cree más fuerte que todos. Él que ha matado más osos que todos juntos. ¡Ja! Pero aquí lo tenemos—tomó un pedazo de carbón del asador y lo dejó caer sobre sus manos atadas.
Harry no reaccionó en absoluto. Se mantuvo sereno. Muy extrañamente calmado.
—Ha...—una mano lo tomó por detrás del cuello. Se giró de inmediato.
Qué bueno que despertaste. Apenas estamos comenzando.—agarró sus hombros y lo empujó hacia allá, justo enfrente del alfa. Antes de que cayera, lo tomó de la cadera.
—No me toques.—se removió incómodo.—¡Harry!—gritó. Iba a hincarse, pero el líder de la manada lo detuvo.
—Pequeño omega idiota—.Lo inmovilizó y tomó su rostro con ambas manos, apretándolo de la quijada—.Observa, esto es lo que le hacemos a los que nos roban comida. Esto es lo que pasa cuando matas a uno de los nuestros.
Un alfa lo golpeó en el rostro con el pedazo de carne caliente.
—¡Déjalo!—Intentó zafarse sin éxito.—¡Detente!—pataleó y agitó las manos. El alfa le dio otra patada, esta vez la sangre se desbordó de la boca de Harry.—Te dije que te detengas.—Mordió el dedo que había mordido anteriormente, pero esta vez encajó sus colmillos muy adentro, con mucha fuerza, hasta que lo rompió.
ESTÁS LEYENDO
Salta, Louis
FanfictionLouis, uno de los jóvenes con el poder de tomar una forma animal, habitante en el bosque junto a su futura manada, con unos preciosos ojos azules llenos de vida y una gran obsesión por los salmones, descubre que está embarazado un mes después de que...