EL PACTO

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CHAPER ONE ᵃᵘᵗᵒʳ ᵇʸˡᵉʳˢ

La atmósfera en el gran salón del palacio real era de actividad frenética mientras los sirvientes corrían de un lado a otro, preparándose para la visita de su Majestad Real, la Reina Jocelyn IV Byers de Astoria, y su pequeño hijo el príncipe William

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La atmósfera en el gran salón del palacio real era de actividad frenética mientras los sirvientes corrían de un lado a otro, preparándose para la visita de su Majestad Real, la Reina Jocelyn IV Byers de Astoria, y su pequeño hijo el príncipe William.

En medio del bullicio, el joven príncipe de Eldoria se encontraba de pie, con una expresión de descontento en su rostro. Michael Wheeler, un pequeño príncipe de apenas once años, se retorcía incómodo mientras su hermana mayor, ajustaba el cuello de su camisa de encaje.

— No deseo asistir.

— Debes hacerlo.- su hermana le dirigió una mirada exasperada mientras alisaba con esmero el cuello de su camisa.

Michael bufó en respuesta, mirando por el gran espejo frente de él, con desdén su chaqueta de terciopelo azul oscuro estaba adornada con botones dorados relucientes, y unas charreteras finamente bordadas descansaban sobre sus hombros. Podía jurar que nunca antes había estado tan arreglado, y la sensación de incomodidad le resultaba abrumadora.

Con apenas once años de edad, es un niño travieso y juguetón, más interesado en explorar los terrenos del palacio que en participar en los eventos formales. Pero esta vez, su madre había insistido en que se vistiera adecuadamente para la ocasión, lo que implicaba vestir un traje que le ajustaba incómodamente el cuello. 

—¿Acaso no quieres causar una impresión favorable en tu prometido?

El pequeño chasqueó la lengua, el brillo en sus ojos también le recordó el propósito no oficial de la visita del príncipe. Estaban comprometidos, o lo estarían cuando llegara el momento, y tuvo que sacrificar todo su verano para tratar de mantener feliz al chico. ¡Qué fastidio!

—No, no deseo hacerlo .-refunfuñó el niño— ¡No quiero contraer matrimonio!

—No será en este momento, Michael .-respondió Nancy con paciencia.

—¡Soy un guerrero! ¡Los guerreros no tienen esposos! .-exclamó con vehemencia, mientras Nancy continuaba peinando su cabello con calma, sin prestarle demasiada atención—. ¡No quiero casarme!

— Michael, en el momento en que alcances la madurez, será el momento propicio para tu matrimonio.- suspiró Nancy, manteniendo su tono sereno —. Los guerreros pueden tomar esposos; algunos ya tienen consorte, y la mayoría engendran hijos.

— ¡No deseo engendrar descendencia alguna!

— No los tendrás .-murmuró Nancy con suavidad—. Apacigua tu espíritu, Michael. No quiero que cometas ningún acto inapropiado con él.

—No puedo prometer tal cosa .-replicó él, apenas audible.— ¿Que tal si es de aspecto desagradable? No estoy dispuesto a unirme en matrimonio con alguien cuya apariencia sea desfavorable a los ojos.

PRÍNCIPE GUERRERO  ♖  bylerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora