La Cuarta Biblioteca

P r u e b a

Lena: No puedo creer lo infantiles que son todos ustedes— apretaba su tabique nasal con frustración.

Axel: Le he dicho que no me toque, cojudo— pateó la silla ubicada a su lado izquierdo —Me das asco.

Víctor: El sentimiento es mutuo, gil.

Carlos: Cierren el pico, pendejos.

Peter: Aunque, no todos participamos en la pelea.

Gigi: Niños— Layla limpiaba sus heridas —Me estás lastimando.

Layla: ¿Y que quieres que haga? Tienes un enorme rasguño en tu cara, realmente te diste garra peleando.

Gigi: Y gane— orgullosa.

Summer: Ja, si como mucho se podria decir que fue empate.

Víctor: Sum tiene razón, te dieron una tremenda piña.

Gigi: No les pedí su opinión.

Camerón: Vos sos demasiado infantil.

Emma: Wey, cálmate— intentaba vendar el dedo de Tauro.

Thalía: La concha de la lora, me duele mucho— sopló su herida —No vuelvo a cortar un queso en la vida.

Avril: No puedo creer que no traje leche— comía su cereal —Aun así, están deliciosos.

Luke: Ñaña, ¿ya podemos irnos?

Lena: No— molesta, golpeo la mesa con su puño —Ya hemos tenido suficiente con sus estúpidos pleitos, y al parecer, no somos lo únicos que hemos tenido suficiente de ustedes.

Gigi: ¿Qué quieres decir?

Gabriel: Recientemente, han aparecido puertas en la Biblioteca que se conectan con algunos humanos— se reclinó en su asiento —Al principio creímos que eran portales al azar, pero, contando cada una de las puertas que aparecieron y, los desastres naturales que han aparecido sin la intervención de los Signos; es muy evidente lo que está ocurriendo.

Carlos: Deja los rodeos culeros, se concretó, ¿qué chingados sucede?

Lena: Las constelaciones han elegido posibles nuevos usuarios del Zodiaco.

Todos: ¿¡Qué!?

Gabriel: Según la información que acabamos de recibir, los de arriba acaban de enviar un ultimátum— giraba en su silla reclinable —Si vuelven a causar más problemas a partir de ahora, todos perderán su estatus.

Camerón: Gran cosa— se cruzó de brazos —Solo debemos volver a separarnos y ya está.

Gabriel: Si fuera tan fácil, no sería un castigo— burlón.

Summer: ¿Qué chuchas podría ser peor que ser destituidos?

Lena: Se supone que todos ustedes son un equipo, por eso se llama la orden de los doce— suspiró —Tienen que aprender a convivir juntos en armonía, es por eso que...

Gabriel: Van a vivir juntos.

Gigi: Estamos tan, pero tan muertos.

Emma: Ya valimos madres— resignada —Fueron años muy culeros, pero aprecié los momentos en que no los vi.

Víctor: Sos un sorete Gabriel, ¿cómo vas a permitir que los de arriba tiren tantos años de trabajo al pedo?

Thalia: No seas boludo, Virgo. No podes darte por vencidos tan rápido.