Un Nuevo Hogar [Cancelada, pero en edición por diversión temporalmente]

13

―Más importante ¿eres el padre de esta niña? ―Koga suspiro y miro atentamente a los dos humanos, ambos de cabello negro y ojos café, de hecho se parecían un poco, aunque lo extraño era que la pequeña no olía a demonio, se supone que debería ser medio-demonio, como su tío. Pero era un simple humano.

―Es lo que acabo de decir ―le miro como si dijera lo más obvio del mundo a un tonto.

―Ya veo ―se volteó hacia el otro grupo mientras sobaba su cabeza ―parece que tu hermano te está ganando, ya hasta tiene una hija jajajaja ―se carcajeo un rato evitando pensar en la vida y familia de otro demonio, el mismo estaba igual que Inuyasha. Si la niña no tenía parte demoníaca como debería, no era su problema.

― ¡¿Eso a ti que te importa?!

―Hablando de hijos... ¿han planeado tener alguno? ―el de larga melena negra los devolvió al tema anterior con una mirada picara.

― ¡Que no somos nada! ―gruño el medio-demonio de rojo.

― ¡La que me gusta es Aome! ―el lobo también saltó.

―oh...harían una pareja divertida, es una lástima.

― ¡Para...! ―ambos chicos fueron callados por el ruido proveniente de los arbustos cercanos al gran perro y la mocosa.

―¡Hey, parece que se divierten mucho! ―la alegre voz de Naruto junto a su sonrisa saludó a todos.

― ¡Buenos días señor Naruto! ―a lo lejos Miroku junto a las demás agitaban sus manos hacia el grupo, ni de locos se quedarían cerca si pasaba algo.

― ¿vienes a robar comida tan temprano? ―la despectiva del joven mitad demonio no se hizo esperar, seguía resentido por haber perdido aquellos fideos.

―Claro que no, cuñado. ―la dichosa sonrisa no se le borraba ―solo viene a ver mis esposos e hija, además de Akamaru.

―Supongo que ya es hora de irnos ―Haku salto del árbol para después acercarse al rubio y pelirrojo ―¿quieres que le digamos algo Sesshomaru si lo vemos?

―¿Por qué tendría algo que decirle?

―Espera...eres esposo del hermano de esta bestia ¿pero también de él? ―Koga apenas procesaba su conversación.

―En realidad, los cuatro somos pareja; Sesshomaru, Naruto, Gaara y yo ―el pelinegro aclaro sus dudas.

―Tu hermano no pierde el tiempo, bestia. ―miro con burla a su "rival" y en un rápido movimiento, ya estaba frente a la chica del futuro ―Aome, casémonos.

―¡Déjala! ―Inuyasha volvió a atacarlo.

―Parece que se divierten. Bueno, vámonos de aquí ―Naruto acomodo a Gaara y escogió una dirección al azar.

―Rin, despídete de tu tío ―un poco de malicia se escapaba en la dulces palabras de Haku hacia su hija mientras la animaba.

―ah, si...¡adiós, tío! ―la pequeña incluso levanto su brazo y lo movió de lado a lado con una pequeña sonrisa.

¡Ahora incluso tenia un tío! estaba un poco feliz, su familia era más grande, aquellos pensamientos calentaron su pequeño corazón haciéndolo sentir cómodo, olvidando de momento como le había hablado el hermano menor de su padre.

Al instante el peliblanco le miro irritado pero no dijo nada, ¿acaso realmente podía cuando los padres de esa mocosa eran más fuertes que él? Chasqueo los labios y la ignoro. Por otro lado, Haku soltó una pequeña risa mientras acariciaba el cabello de su hija, molestar a su cuñado era divertido.

...

Pasaron unos días explorando, pero no esperaron encontrarse con el grupo del peliblanco tan rápido.

Y menos en una pelea...

Divisaron un pueblo a la lejanía, era obvio que había un enfrentamiento así que...¿Por qué no ir a ver? Incluso si luego se enteraron de quienes luchaban, se mantuvieron a un lado observando, a los minutos los notaron pero incluso si les pidieron ayuda, Inuyasha se negaba a dejarlos unirse.

―¿está bien dejar a mi tío y sus amigos luchar solos? ―Rin apretó la camisa de Gaara mientras se apegaba a él. Eran los únicos sobre Akamaru, sus otros padres estaban sentados sobre en césped.

―dijeron que no necesitaban ayuda, deberían ser capaces de ganar entonces ―el pelirrojo miro fijamente a su hija y después le dio unas palmaditas en la cabeza, como queriendo apaciguar sus emociones y quitar aquella expresión inquieta de su rostro.

―eso significa que ellos estarán bien ¿no? ―sus ojos brillaron ante las palabras de su papá, se sintió más tranquila.

No siendo de hablar mucho, esta vez decidió solo asentir para confirmar sus dudas.

―¡tranquila Rin, si algo pasa tu papá se hará cargo! ―Naruto llamo su atención mientras se señalaba a sí mismo ―no tengas miedo ―por supuesto, en realidad no estaba muy dispuesto a ayudarlos, pero también se los debía por los fideos instantáneos de la última vez.

―¡Si! ―respondió mas confiada, sus días junto a ellos le aseguraban con creces que el peligro no estaría sobre ella.

Sin apenas notarlo mucho, ella estaba más protegida que un shogun, con semejantes monstros a su lado, podría correr en un campo plagado de demonios y ni uno solo podría hacerle algún rasguño.

Dicho y hecho, aquel demonio herido que intentaba huir, fue intimidado por las auras de esos tres ninjas, sin dudarlo cambio de rumbo, pero su retraso le dio el tiempo suficiente a Inuyasha para matarlo tomando así el fragmento de Shikon que poseía.

―¡Inuyasha! ¿Estás bien? ―Aome corrió para llegar a donde estaba su compañero y el pedazo de Shikon que debía purificar. En cuanto el fragmento fue tomado por ella, dejo de tener ese color gris opaco para pasar aun rosa claro y reluciente.

― ¿y eso que es? ―Haku miro el pequeño trozo que parecía cristal con un poco de curiosidad, mientras se acercaba a ellos.

―que te importa.

―¡Inuyasha! ―Aome lo reprendió por su rudeza.

―¡pero es verdad! ¡Esto no tiene nada que ver con ellos!

―¿es así? Entonces no importa ―sacudió su mano haciendo ondear la manga de su yukata, lo había obtenido hace poco, no pudo resistirse a la calidad de la tela y el diseño.

Su expresión indiferente los tomo por sorpresa, creyeron que su curiosidad duraría más tiempo. Sin mencionar, que parecían no identificar lo que era la perla de Shikon, era algo raro.

―ya que no hay nada más, nos vemos ― con una sonrisa no muy expresiva, se despidió de ellos inclinando un poco la cabeza más que nada por educación, mientras regresaba con su grupo el viento hizo ondear su cabello desacomodándolo un poco.

En ese instante, el grito de un halcón resonó en el cielo a medida veían un pequeño punto acercarse con rapidez, para finalmente aterrizar aun lado de Naruto; quien desato un pequeño papel de la pata del halcón. Rápidamente Haku se acomodó a un lado del rubio, e incluso Gaara tomo a Rin en brazos y bajo de Akamaru para ver qué mensaje había llegado.

―parece que ya dejaron al pájaro en casa y están cerca de nosotros―comentó cerrando la nota mientras miraba a los demás, deteniéndose en la más pequeña ― ¿lista para volver a viajar con los abuelos, Rin?

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Nota: no se si seguir esta pobre historia que he dejado abandonada por tanto tiempo.