Heart To Heart

Capítulo 5: Siempre es sobre ti

Apenas sonó la última campana del día, no dudó en correr hacia el gimnasio y tratar de encontrar a su entrenador. Sabía que posiblemente había golpeado accidentalmente a una, dos o hasta a tres personas en su camino pero eso no la detuvo.

Quería hacerlo, quería demostrar cuán arrepentida estaba.

Pero al mismo tiempo el corazón le latía en un ritmo que no era normal y no estaba tan segura de su decisión.

Contó silenciosamente hasta diez e intentó tranquilizarse.

— Hola, entrenador. — Abrió lentamente la puerta y se preparó mentalmente para lo que sea que estuviese a punto de pasar. Descubrió al hombre lanzando algunos balones de baloncesto al aro y tragó saliva fuertemente.

—Hola, Jennie — Casi que de inmediato, detuvo su acción y se acercó a donde la menor estaba.

— Entrenador, antes de empezar con esto, sólo quiero pedirte disculpas, yo ya hablé con mis compañeras de equipo... está todo aclarado entre nosotras pero quería pedir disculpas por el problema entre Wendy y yo, en verdad lamento haberte faltado el respeto, jamás pretendí hacerlo.

— Sí te entiendo Jennie y sé que muy posiblemente no tenías esas intenciones, pero hay algo que tú también tienes que entender y es que lo que ocurrió ayer va más allá de incorrecto. No sé cuál fue la razón, no sé cómo empezó o qué causó que fuese un problema tan grande, pero sé que no vale la pena como para que termine en esto, para que ustedes se hagan daño como compañeras de equipo, no lo vale. Jennie yo puedo comprender que hayan confrontamientos con una chica de otro equipo o hasta con un árbitro... ¿Pero dañar a alguien de tu mismo equipo, Jennie? Diferencias siempre van a haber, pero se hablan, no se arreglan a golpes, es por eso que me decepciona mucho esta situación. — Después de todo sabía que no podía contradecirlo, estaba en lo correcto. La impotencia la llenaba nuevamente y sólo esperaba a que su entrenador terminara de hablar para salir corriendo de allí, se sentía demasiado avergonzada. — Sin embargo tengo que agradecerte. — Ella dirigió su mirada rápidamente al hombre apenas escuchó esas palabras. — Gracias por aceptar tu error y por armarte de valor para venir aquí, eso es algo que aprecio. También aprecio mucho que hayas hablado con tus compañeras, eso demuestra lo mucho que valoras al equipo y por eso sé que realmente estás arrepentida de todo lo que pasó, eso también es lo que ocasiona que esté en una situción algo incómoda, quizás esto simplemente nunca había pasado y creí que no iba a pasar; me equivoqué. — Algo perdida, asintió. — Debo admitir que agradezco que estés aquí porque después de mandarte ese mensaje, algo en mi cabeza dejó de hacer click y me sentí mal, no me gustaba la idea de que las cosas terminaran así. No quiero que algo como esto vuelva a ocurrir, de lo contrario, ni siquiera tendremos esta charla de nuevo ¿Comprendido?

— Comprendido, entrenador. No volverá a pasar.

— Bien, descansa y guarda energía para el Viernes, cuídate.

— Igualmente, adiós. — Sonrió ligeramente y apenas volteó se alejó tan rápido como pudo. No tenía intenciones de recordar lo que acababa de pasar, no tenía intenciones de sentirse mal, con el día anterior ya había sido suficiente.

Sólo tenía intenciones de alejarse de la escuela por esa tarde.

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— Pero Jennie. — Intentó hablar el rubio quien venía siguiendo a su amiga por toda la escuela.

— Cállate mil años, Namjoon. — Optó por decir ella antes de dar media vuelta y seguir caminando.

Tenía un café helado en su mano derecha que acababa de comprar minutos antes de llegar a la escuela y estaba haciendo un espectacular esfuerzo al contenerse de lanzarselo a su amigo.