La siguiente estación... [Yuuji Itadori x T/N]

Sospecha - | - Capitulo 17

Llegan a la guarida donde Gojo los deja ya que tenía trabajo pendiente en la institución, con tu compañero pelirrosado están tan cansados que intercambian miradas expresando su cansancio y sus ganas de dirigirse a la habitación, pero antes de hacerlo lo detienes.

— No te preocupes -te dispones a hablar- Puedo dormir en el sofá, tú ve.

— ¡De ninguna manera! Deja que yo duermo aquí -toma de tus hombros empujándote hacia la habitación- Tomarás un resfriado.

— Pero tu también... -tocas tu barbilla para dispoernte a pensar- Qué tal si... ¿Dormimos juntos?

— N-no sería una mala idea -sus palabras se lo notaban nerviosas a lo que le diriges una mirada confundida pidiéndole una respuesta- N-no, nada.

-Al instante entiendes de porqué provenía esos nervios- Perdon... juro que la próxima iré sola al colegio.

— No es ninguna molestia para mi -da suaves palmadas sobre tu espalda- Vamos, que hace frío aquí fuera.

Se adentran a la habitación, la cama consistía de una almohada grande y una frazada, pensaste que pasarían frío por lo que sugeriste que se den un baño antes de introducirse debajo de las sábanas. Fuiste la primera en tomar una ducha, la verdad no pensaste mucho cuando lo dijiste, pero una vez que abriste el agua, salió helada, te arrepentiste al instante de lo sugerido pero conforme pasaban los minutos el agua comenzaba a ambientarse a la calidez corporal.

Terminaste de asearte y dejaste la ducha encendida para que itadori se incorpore con mayor rapidez. Tomaste la única toalla que se encontraba en el pequeño cuarto, con la cual utilizaste para absorber la humedad del cuerpo después del aseo. Volviste a colocarte la misma ropa de antes, ya que no tenías con qué otra muda cambiarte, pero, dejaste la chaqueta tirada en el suelo por accidente.

-abriste la puerta para indicarle al de cabellos claros que podría entrar pero al no escucharte lo llamaste- ¡Itadori, ya puedes entrar! -de pronto aparece el de ojos castaños frente tuyo sin la sudadera, por lo que rápidamente tapas de cara por la vergüenza que recorría cada uno de tus nervios- C-con permiso -lo único que escuchas como respuesta son unas risueñas risas-

Vas a la cama y dejas caer todo tu peso sobre ella, pensando en la espléndida figura de tu compañero que nunca (ademas de la vez que fue poseído por sukuna) pudiste observar. De pronto una eléctrica corriente recorre toda tu espina dorsal, indicando el frío que yacía en el lugar, piensas en ponerte la chaqueta que traías puesta, pero recuerdas que la dejaste en el suelo del baño, la verdad pudiste esperar a que tu compañero salga, pero el frío amenazaba con cambiar tu temperatura corporal. Tocaste la puerta dos veces para escuchar la verificación de tu entrada, pero en el instante que pisas esa habitación tu amigo pregunta.

— ¿Que sucede? -asoma su cabeza por la cortina-

— Olvide mi chaqueta y muero de frío -te agachas para agarrarla, mientras esquivabas todo contacto visual con el pelirosado ya que sabias que se encontraba desnudo y pensar en eso te avergonzaba-

— Pero no te preocupes, en el sillón hay un bolso donde Gojo-sensei trajo algunas de mis ropas. Ahí encontrarás algún suéter limpio y si quieres colócate alguna remera -exclama- Por cierto, ¿me lo traes?

— Claro, muchas gracias -sientes como algo cae en tu cabello y te aproximas a tocarlo- ¡Oye! No me tires espuma. Me voy a vengar -itadori ríe a carcajadas por su pequeña "broma"-

Vas al salón donde encuentras dicho bolso y sacas una remera y un suéter. Pero también decides sacar algún pantalón que tenga para ajustar en la parte la cintura ya que toda tu ropa se encontraba cubierta de tierra y polvo. Te vuelves a dirigir al baño donde se encontraba el más alto, para entregarle su bolso.