Píldoras felices//Traducción. Dramione

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Recuerden que este FF está traducido con Google, por lo que la redacción no es congruente en algunos casos, así como su coherencia. Las palabras o párrafos que originalmente están en cursiva, no lo están aquí. Leer con cuidado para detectar la diferencia. 

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Es la vieja cuestión del tiempo lo que mantiene la sangre de Hermione bombeando por sus venas.

¿Cuándo tiene más significado el tiempo?

La respuesta de Hermione: cuando la Muerte finalmente la alcanza. Cuando el frío agarre de los dedos desgarbados de la Muerte se apodera de una persona y la arranca sin piedad. Sí. Es entonces cuando el tiempo de repente se vuelve más vital que el oxígeno mismo. Es el beso siniestro de la Muerte, el inevitable final de la vida tal como uno la conoce, lo que obliga al tiempo a detenerse, acelerarse, fluctuar. Oscila como un péndulo en el espacio exterior, controlando la tierra de abajo como su creador.

Es curioso que parezca crear pero al mismo tiempo destruir. Anomalías como esta no vienen a menudo.

La muerte saluda a los Slytherins, Hermione y Harry en la oficina de su refugio seguro, el club que es Amortentia, y todo lo que existe en sus mentes tensas es terminar con todo esto de una vez por todas. Asegurarse de que la Muerte no les quite a nadie más.

Hermione prometió una vez protegerlos a todos. Mantener esa promesa sigue siendo una prioridad.

"Probablemente ya se hayan ido", murmura Theo, su voz golpeando el suelo. "Rose y Aberfield".

"¿Qué hacemos?" Daphne pregunta, girando sobre su hombro para mirar a Theo mientras mantiene su consolador agarre en los brazos de Blaise. "No podemos dejar que se salgan con la suya".

"No lo harán", dice Draco, el tono de su voz denota su preparación para luchar. "Vamos a encontrarlos, y obtendrán exactamente lo que les espera".

"Tiene razón", agrega Hermione, inclinando la cabeza hacia arriba y alcanzando los ojos de Draco, ojos que están llenos hasta el borde de venganza. "No van a salirse con la suya".

"Ya nos han quitado a la gente", dice Adrian en un susurro, pero al mismo tiempo se desborda de rabia. Saca la cabeza del pecho de Harry y mira al grupo. "Nuestros padres, Graham, y ahora Titus. Si toman a una persona más, la mano de Adrian se aprieta defensivamente alrededor del bíceps de Harry, sus dedos se curvan en tentación posesiva, "entonces ayúdame, iré a los confines de la tierra para encontrarlos y matarlos yo mismo. Con mis malditas manos".

"No nos están quitando a nadie más", afirma Hermione, dejando el lado de Draco y agachándose ante Adrian. Ella mira a Harry brevemente antes de extender cautelosamente su mano hacia adelante y pasar sus dedos por las mejillas húmedas de Adrian. Sus lágrimas aún están frescas y tibias al tacto: ella siente su dolor en esas gotas de dolor, y esa es una razón más para que ella haga esta promesa una vez más: "Adrian, lo prometo. Los metí a todos en este lío, y juro que voy a sacar a todos vivos. Lo juro".

Los brillantes ojos de jade de Adrian miran hacia arriba y alcanzan los de ella, y él mira a Hermione por lo que se siente como una eternidad. Su corazón late contra su caja torácica mientras su respuesta se cierne como una nube de tormenta justo antes del aguacero.

"Deja de hacer promesas que no puedes cumplir".

La forma en que Adrian dice que la rompe. Cada onza de fuerza dentro de ella comienza a disiparse en la nada. Todo está en la cadencia de su entrega, el agotamiento en sus ojos.

"Has dicho eso mismo antes", continúa Adrian, sacudiendo la cabeza, "pero aquí estamos. Tito está muerto, y él era tan parte de este grupo como cualquier otra persona aquí. Era familia".