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Definitivamente HeeSeung no estaba soñando y eso lo confirmó cuando se pellizcó la palma de su mano dos veces, pero no podía creer que a dos metros de distancia se encontraba aquel chico que había visto en la tienda de manualidades, retirando su m...

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Definitivamente HeeSeung no estaba soñando y eso lo confirmó cuando se pellizcó la palma de su mano dos veces, pero no podía creer que a dos metros de distancia se encontraba aquel chico que había visto en la tienda de manualidades, retirando su mochila y el saco escolar que anteriormente portaba como parte de su uniforme.

En ningún momento fue capaz de posar sus ojos en otro lado que no fuera el muchacho que seguía de perfíl y no supo qué hacer cuando el pelinegro finalmente dirigió su vista a la estancia donde conectó miradas con él. Ambos se reconocieron al instante.

Dejando sus cosas en una banca de la recepción, SuNoo caminó hacia la estancia sin despegar los ojos del chico al que se dirigía, y así, finalmente estuvieron frente a frente

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Dejando sus cosas en una banca de la recepción, SuNoo caminó hacia la estancia sin despegar los ojos del chico al que se dirigía, y así, finalmente estuvieron frente a frente.

-Tú... Nos encontramos en la tienda de manualidades- el castaño no tenía ni idea de cómo había hecho para hablar sin rodeos.

-S-sí... Perdón por irme rápido aquella vez, es una fortuna verte de nuevo- le respondió Kim.

-Lo mismo digo... Me hubiera gustado haberme podido presentar al menos.

El menor sonrió y logró provocar una reconfortante sensación en el interior del chico contrario, eran como las mariposas en el estómago, era más que obvio que ésto podría tratarse de una especie de amor a primera vista si así podía llamarse.

-Soy HeeSeung, Lee HeeSeung- el pelinegro estuvo por responder pero al voltear a su izquierda vió al mayordomo acercándose a él.

-Joven Sun- en un rápido movimiento, el chico avanzó mientras interrumpió al señor.

-¿Nos permites un momento?- pidió Woo llevando al mayordomo algo lejos de ahí.

-Lo estaba buscando, veo que ya conoció a HeeSeung- inició hablando.

-¿Qué hace aquí?- cuestionó al percatarse de que seguían en su casa. -Es mi sobrino- Sun quedó más sorprendido. -Creo entender que se estaban conociendo ¿O es que le molesta su presencia?

-¡No, para nada!- exclamó. -Es decir... Me está cayendo muy bien, es agradable.

Después de una corta conversación, el chico le pidió a "BamBam" que trajera dos vasos de agua a lo que él aceptó sin molestia. Fue entonces que el menor regresó a donde estaba Lee.

-Entonces... Lee HeeSeung- el nombrado asintió. -En sí, nací en Japon, mi padre es de ahí, pero mi madre si es coreana, por eso el apellido - explicó mientras la persona frente suyo asentía lentamente.

-Entonces... ¿Podría saber cuál es tu nombre?- SuNoo quedó en blanco ante la pregunta

Él no sabe quién soy...

Como ya sabíamos, el pelinegro había tenido dificultades para encontrar a gente que no se aprovechara de él y era algo que ya había quedado en el pasado, pero por alguna extraña razón la sensación de volver a vivir esa experiencia se planteó en su mente nuevamente y por eso mismo aceptó la idea que había llegado a su cabeza.

-Me llamo... ¡SungHoon! Sí, Kim SungHoon- asintió tratando de sonar convincente.

-Es un placer conocerte finalmente, SungHoon, perdona mi curiosidad pero ¿Por qué estás aquí?

Es cierto... Estaban en la casa presidencial. -Yo... ¡Trabajo aquí! Lavo los platos y... así- el rubio formó una perfecta 'o' con sus labios, totalmente convencido del cuento de SuNoo.

HeeSeung vió a su tío con los vasos de agua a lo que el pelinegro fue a recibir las bebidas, el rubio creyó que su tío se había percatado de que podría estar sediento al igual que su acompañante.

Mientras tanto, SuNoo le dió la espalda al chico y nuevamente alejó al mayordomo un poco de ahí, el adulto de cabello negro lo miró con curiosidad, lo había escuchado seguramente.

-BamBam, tú y yo somos amigos ¿Cierto?- el adulto asintió. -Y los amigos se cuidan la espalda- volvió a asentir dudoso. -Entonces, por favor, sígueme la corriente- le miró con ojos suplicantes.

-Si usted lo dice, jo- fue interrumpido otra vez. -Y ya te dije que puedes decirme SuNoo con toda confianza- le sonrió el menor.

-¿No sería SungHoon?- Kim se percató del nombre. -¡Sí, eso!- respondió.

 -¡Sí, eso!- respondió

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*°• ᴘʀᴇᴛᴛʏ - ᴊᴀʏᴡᴏɴ •°*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora