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"¿Qué te ha parecido el show hasta ahora?" Inquirió Lucy Gray luego de un par de segundos en silencio.

Coriolanus estuvo a punto de responderle, cuando un fuerte sonido los sobresaltó a ambos. Se separaron un poco el uno del otro al ver a un hombre ingresando a la pequeña habitación, azotando la puerta detrás de él.

"Lucy Gray, volvemos a salir en cinco minutos." Dijo el chico castaño, Coryo pudo reconocerlo como el pianista de la banda. Este se acercó a Lucy Gray parándose a un lado de ella, examinando con su mirada a Coriolanus y a Sejanus, quién dormía en el sillón a su lado. "¿Está todo bien aquí?"

Ella tenía las mejillas rojas y parecía algo nerviosa de repente. "Si, si. No te preocupes, ve con el resto, yo los alcanzo en un minuto." Intentó tranquilizarlo con una sonrisa.

Coriolanus no conocía a este chico de nada, sin embargo este parecía disgustado con su presencia sin ningún motivo, mirándolo de mala manera. "No tardes." Le dijo a Lucy Gray en un tono demandante, y si más, salió de la sala azotando la puerta nuevamente.

Para Coryo las primeras impresiones siempre fueron determinantes al momento de decidir si una persona le agradaba o no, y podía decir con certeza que este chico le daba mala espina.

"¿Qué fue todo eso?" Le preguntó a Lucy Gray.

"Oh, es solo Billy siendo Billy." Dijo ella restándole importancia y volviendo a acercarse a él. "Es como un hermano mayor para mi, tiende a ser algo sobre protector a veces." Ella pasó su mano suavemente por el hombro de Coryo. "No quiero hablar de él ahora, no respondiste mi pregunta antes ¿qué te ha parecido el show?"

El repentino cambio de conversación le pareció extraño, pero Coryo no quizo insistir, sabía que no tenían mucho tiempo y el toque de Lucy Gray en su brazo estaba ocupando la mayor parte de su atención.

"Increíble, de hecho nunca había escuchado de ustedes pero..."

"¿Nunca, en serio?" Fue interrumpido por ella, quien más que sorprendida parecía indignada ante su confesión.

"Nop, pero me parecieron geniales, quisiera escuchar más de ti... De tu banda, quiero decir." Se aclaró la garganta sintiéndose extrañamente nervioso, algo impropio de él.

Al instante retractó sus palabras cuando la vio voltear y alejarse de él. ¿Había dicho algo malo? No lo entendía. Lucy Gray empezó a rebuscar entre unos cajones, y la confusión de Coriolanus aumentó cuando ella volvió a pararse en frente de él extendiendo un sobre en su dirección.

"Son entradas a nuestro show de mañana en el club de Pluribus, para ti y tu amigo." Dijo apuntando a Sejanus, quién seguía dormido. "Bueno, si es que él despierta."

Coryo tomó el sobre en sus manos, sonriendo ante el comentario de la chica. "Muchas gracias, no tenías..."

Ella volvió a interrumpirlo, acercándose peligrosamente a él "Claro que sí, necesitas aprender sobre buena música." Dijo, jugueteando con la rosa que hace unos minutos él le había dado "Además, es una buena excusa para volver a vernos."

Coriolanus estaba acostumbrado a llevar el control en este tipo de situaciones. Era bastante confiado al momento de hablar con alguna chica pero con Lucy Gray se sentía diferente, ella parecía llevar el control por ella misma, lo cual debía admitir, era bastante atractivo.

The ballad of what would have happenedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora