¿Y ahora qué?

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Bueno, como verán, Ripley no pudo cumplir con esta ultima parte. De hecho, se había acercado demasiado a los problemas, y nosotras, que habíamos quedado en medio del fuego cruzado, teníamos que decidir si también queríamos involucrarnos o si nos alejábamos para salvar nuestro pellejo.

-Miren chicas, todo esto que pasó, se suponía que no tenía que pasar. Yo iba a renunciar y me iba a ir de acá para siempre. Ahora me voy a tener que escapar. Ustedes son libres de volver, si lo hacen ahora, van a estar bien, si quieren pueden seguirme, pero sepan que si lo hacen, las van a perseguir a ustedes también. Elijan lo que elijan no pienso quedarme acá. Cualquier cosa que no sea irse de Nieve, no es aceptable para mi.

-Esto es demasiado - dijo Tina mientras caminaba nerviosamente de un lado hacia otro.

-Roja, sé que esto es difícil para vos, sé que toda tu vida anhelaste ser una princesa, pero te prometo que todo lo que viví en el agujero es cierto. Todo esto de las pandillas, de la segregación, todo este odio contra cualquiera que no sea una de las nuestras, no es vida, y no es lo que quiero para ustedes. Yo soy gran responsable de gran parte de eso y no hay noche en la que no deje de culparme. Sepan que esta es una decisión que va a definir sus vidas, por eso es que necesito oírlo de sus bocas, y necesito hacerlo ya, porque el reloj está corriendo. Una vez que decidan ya no va a haber vuelta atrás.

Nos quedamos pensando un rato, teníamos que tomar la decisión de nuestras vidas en unos pocos minutos. Al menos para mi fue difícil, en ese momento ser una princesa era lo más importante para mi, había sido el sueño de mi vida, y ahora que Ripley estaba fuera de la ecuación, todos los cañones apuntaban hacia mi. Pero ella siempre había sido mi modelo a seguir, un espejo en el cual reflejarme, así que seguirla, era más importante que cualquier otra cosa. Para Tina fue mucho más fácil, ella siempre había querido irse de Nieve, y esta era una gran oportunidad para hacerlo con las únicas personas con las que podía contar.

-Estoy con vos, Ripley. Con ustedes, hasta el final - respondí - Vayámonos de este lugar para siempre.

-Miren, sé que va a sonar raro viniendo de mi, porque soy la más idealista de las tres, pero esto no es tan fácil. ¿Qué vamos a hacer? - preguntó Tina, que ya había detenido su marcha - La única dirección hacia la que podemos irnos es el Oeste. Tenemos que atravesar la zona neutral, el barrio de las Panteras y el de las Coyotes.

-Eso es correcto- respondió Ripley.

-Y asumiendo que salimos ilesas de todo eso, ¿en qué vamos a dejar Nieve? Pueden pasar kilómetros hasta que encontremos civilización en el mundo gobernado por los hombres. No nos podemos ir a pie. Tardaríamos semanas, y solo tenemos días - agregué.

-Y no nos olvidemos de las Anguilas. Puede que también nos tengamos que escapar de ellas - dijo Tina.

-No lo creo. Si estoy tranquila con respecto a algo, es con eso. No van a denunciarme con las Anguilas. Si lo hacen, ellas me van a llevar de nuevo al Agujero, y asumiendo que la Abuela muera, las demás le van a pedir a la nueva Abuela mi cabeza. Hablar con las Anguilas iría en contra de eso.

-Oh, eso me tranquiliza un montón - dijo Tina sarcásticamente.

-Supongo que tenés un plan, ¿verdad? - pregunté.

-Puede que haya pensado en algo - respondió. 

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