Can't help Falling In Love - jaeyong

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Taeyong pov

Afortunadamente logré conseguir el acta de matrimonio donde pude conseguir el número de Yoonoh.

Me era tan urgente arreglar todo esto que básicamente le supliqué por mensaje que nos viéramos en un restaurante no tan conocido para cuidar y evitar que gente conocida me vea con otro hombre.

Ya estaba sentado en la mesa y mi corazón latía a mil por hora. Realmente no sabía a quién estaba esperando y eso me estaba matando.

¿Qué si este tipo decide no llegar y mantenerme atado a él para siempre?
Oh, no. De solo pensarlo sentía que mi estómago se revolvía, ya que eso arruinaría la vida que Doyoung y yo hemos planificado desde que teníamos 17 años.

Seguía esperando hasta que un chico apuesto de cabellera castaña y vestimenta informal se acercó. Sentí que me iba a ahogar con el agua que estaba bebiendo. Ése chico era simplemente... Hermoso.

-¿Lee Taeyong?- Preguntó.
-Entonces tú eres Jung Yoonoh- le extendí mi mano y lo invité a sentarse.
-Un gusto, Jung Yoonoh-
-No tienes que llamarme así, Jaehyun está bien.- me interrumpió.
-Está bien, Jaehyun. Necesitamos hablar.- me incliné sobre la mesa mientras le extendía el acta de matrimonio.
-Dejame ver.- Estiró su mano para tomar el papel y comenzar a leer.
-Está bien, esto es legitimo.- levantó la cabeza del documento y agregó con una dulce voz y una pequeña sonrisa. -De verdad eres mi esposo... No puedo creer que estoy casado.- soltó con gracia.

-¡Hey! ¿Por qué lo dices tan feliz?-
Le dije comenzando a enojarme.
-Bueno, nunca imaginé casarme y de pronto...- otra sonrisa escapó de él.
-Pero esto está muy mal, ¡necesitamos separarnos ya!- le respondí con una sonrisa forzada y obvia desesperación.
-¿Separarnos ya? Esa fue una relación muy rápida.- entre cerró los ojos.
-¿Qué pasaría si... No quiero?
¿Qué pasaría si quiero que sigamos casados? - preguntó con sorna.
-¿Qué pasaría si te golpeo la cara?-
Respondí ya irritado con los dedos masajeando las sienes.
-Uhh, violento... Me gusta.- respondió guiñando el ojo.

Mi cara golpeó la mesa en desesperación. No podía estar pasando.

-Tranquilo, tranquilo. Solo bromeaba.
Podemos ir a la corte y decir que estábamos borrachos esa noche.-

-No, no podemos. Estoy muy ocupado con las labores de mi boda que será a inicios del próximo año y toda la familia de mi prometido son abogados al igual que él. No puedo permitir que se enteren de esto.

-Woah, ¿en qué tipo de relación te encuentras?- preguntó con una expresión difícil de descifrar.
-Se supone que son una pareja, no deberían ocultarse cosas así ¡y ni siquiera están casados aún!
Mis padres me enseñaron que la honestidad es la mejor política.- cruzó los brazos sobre la mesa mientras se reclinabla hacia mí.
- Lo sé, pero eso será más tarde.
No pienso decepcionarlo ahora.- le contesté apenado.
-Entonces... ¿Qué pasó esa noche?- le pregunté.
-¿En verdad no recuerdas nada?-
Negué con la cabeza.

-Esto sucedió en la fiesta de Mark y Donghyuck. Ambos estábamos disfrutando de la fiesta, bebiendo más de lo necesario, y ya que tus amigos te dejaron, decidí quedarme contigo.  Mis amigos que porciento, fueron los encargados de casar a Mark y Donghyuck, se unieron a nosotros cuando el lugar estaba básicamente vacío.
Dijimos que estábamos totalmente enamorados del otro y pedimos que nos casaran también, entonces firmamos unos papeles y...-
-¿Entonces qué?- pregunté nervioso con pequeños flashbacks de esa noche.
-Puedes besar al novio.-
Respondió Jaehyun.