Cantaban en la sala a todo pulmón, se habían tomado un descanso para tomar un té y escuchar música. Sus voces se fundían creando una melodía casi perfecta, casi imperturbable. Tomas tomó su mano girándolo sobre sus pies y atrapándolo entre sus brazos. Fue ahí, al chocar las narices cuando ambos cesaron de cantar, solo miraban sus ojos y escuchaban sus respiraciones. Rodrigo entre cerró los ojos confundido y Tomas sonrió.
_¡Me hiciste perder!_ Reprochó, soltándose del agarre.
_Vos dejaste de cantar porque quisiste_ Se defendió mientras se sentaba en el sillón. Rodrigo frunció el ceño y se paró en frente de él.
_Se dice permiso_ Dijo, apuntándole con el dedo_ Si en tu cueva no te enseñan modales lo lamento, pero acá tenes que pedir permiso para sentarse_Tomas revoleó los ojos y lo tomó de la cintura.
_Permiso_ Susurró, apretando el agarre.
_¡Pero si ya te sentaste!_ Gruñó. Tomas soltó una risita picara.
_No lo decía por eso _ Dijo sonriente y acto seguido sentó a Rodrigo encima de él. Este abrió los ojos como dos platos gigantes.
_¿Qué estás haciendo?_ Musitó nervioso. Si alguno de sus roomies llegaban a verlo así con Tomas iba a ser completamente bochornoso. Él sonrió, malditos él y su sonrisa, pensó Rodrigo mientras sentía como Tomas tomaba su rostro con ambas manos y depositaba un suave beso en sus labios, luego lo soltó. Rodrigo se bajó de él aún con el ceño fruncido, sentándose a su lado.
_Que aburrido que sos _ Musitó. Rodrigo lo miró con el ceño fruncido _ ¿No podes no estar nervioso siempre por si alguien nos vé? Es tu maldita casa.
_Es lo mismo acá o allá_ Susurró, mirando hacia todos lados _ Vivo con otras personas, no puedo estar exhibiéndome en el living_ El revoleó los ojos y apoyó su mano en la pierna del ojiverde. Rodrigo levantó una ceja y se acercó a su oído _ Te conozco ¿Qué estas haciendo?_ Susurró. Tomas mordió su labio y comenzó a deslizar sus dedos hasta llegar a la entre pierna del mas bajo con una mirada desafiante.
_Solo quiero tocarte. Si no queres... _ Se acercó rosando sus labios y ese perfume tan extasiante comenzó a cegarlo _ Te prometo que me comporto _ Su mirada estaba clavada en la de Rodrigo esperando una respuesta, mientras acariciaba a penas la tela de su pantalón. Suspiró, sin decir nada. Él sonrió, supongo que entendió que a veces no eran necesarias las palabras porque los ojos de Rodrigo se lo pedían a gritos, subió su mano hasta el botón de su pantalón, liberándolo y lentamente introdujo la mano en él. Rodrigo cerró los ojos, dejándose llevar mientras su mano se movía en su erección, empapándolo de deseo, la respiración comenzaba a elevarse en ambos, él apoyó sus labios en el cuello de Rodrigo haciendo círculos con su lengua mientras elevaba el ritmo de su mano. Ahogando gemidos, el ojiverde llevó su mano hacia el pantalón del otro para acariciar su erección por encima de la tela, con presión _ Como me gustaría hacerte mío _ Susurró.
_¿Otra vez?_ Dijo Rodrigo, sorprendido de que se sintiera como él, parecía no ser suficiente, siempre necesitaban más.
_ Muchísimas veces más_ Afirmó y comenzó a besarlo frenéticamente. Pero en ese instante unos pasos se escucharon acercándose a la sala, ambos sacaron sus manos y se colocaron una almohada encima. Aquí no paso nada señores, nada de nada.
_ Eh carre, no sabía que tenías visitas _ Dijo Amir, uno de los roomies de Rodrigo.
Rodrigo se encogió de hombros mientras este los observaba confundido_ Pensaba que Robleis te..._ El ojiverde frunció el ceño, Tomas sabía que Amir quería decir "Pensé que te caía mal" pero no lo dijo, solo bajó la mirada y se rascó la nuca_ Bueno, voy a comprar para cenar ¿Te quedas?._De una_ Respondió Tomas. Rodrigo le dirigió una mirada asesina. El corazón le latía tanto que parecía que en cualquier momento saldría volando.
_ Saca plata de la caja_ Dijo, viendo como su amigo afirmaba y se marchaba. Luego de unos segundos de silencio Rodrigo lo miró_ Si amir nos veía te juro que te mataba _ Afirmó, algo ansioso. Tomas tomó su rostro con ambas manos.
_Pero no nos vió tranquilo_ Susurró, besando su mejilla ¿Por qué estaba siendo tan dulce con el? Se miraron un instante tensos y bajaron las miradas_ Entonces me voy _ Dijo girando, siempre tenes que arruinar todo Tomas, se reprochó. Pero el tomó su mano, paralizándolo.
_ Dijiste que te ibas a quedar a cenar_ Dijo, tímidamente. Tomas levantó una ceja.
_ Pensé que no querías, pusiste una cara recién _ Dijo, Rodrigo bajó la mirada.
_¿Vos realmente pensas que vas a dejarme así?_ Tomas sonrió de costado mirando los ojos profundos de Rodrigo que tomó la mano de Tomas para dirigirla hacia su pantalón haciéndolo sentir su erección aún presente.
_ Carre ¿Me estas hablando enserio?_ Dijo, con los ojos confundidos. Rodrigo asintió_ Pero ¿Y si Amir vuelve?_ Carre negó con la cabeza.
_ Después de comer, en mi habitación... le digo que te vas a quedar porque... que se yo, vemos_ Dijo de corrido, sin respirar entre palabras.
_ ¿Tengo que esperar hasta la cena?_ Preguntó, atrayendolo hacia él y mordiendo su labio inferior. Rodrigo sonrió ante su desesperación.
_ Es que no pinta que Amir vuelva y encuentre mi habitación con llave _ Susurró, apretando su espalda.
_Ya sé, pero te deseo ahora_ Susurró, mientras acariciaba su cuello con la lengua. Rodrigo acarició su espalda lentamente y se alejaron. Lo mejor era retomar sus obligaciones y esperar a que anocheciera, no había razón para estar tan desesperados. Se sentaron en el sillón cuando Tomas recibió un mensaje.
Roier: Tomi... Si aún no te fuiste ¿Podríamos vernos un segundo?
Tomas suspiró mirando a Rodrigo, este tenía las mejillas encendidas mientras ojeaba su celular... ¿Debería ir? o ¿Debería quedarse con él simplemente e ignorar a Roier? No, él sabía muy bien que quería que Roier fuera su novio desde que tenía uso de razón, lo más coherente era correr a sus brazos total luego podía subir y seguir lo que habían empezado con Carrera pero, por alguna razón su completud le rogaba que se quedara con Rodrigo todo el tiempo, así que guardó el celular y en la noche, cuando salió del baño e ingresó a la habitación supo que había tomado la decisión correcta. Rodrigo tenía el torso desnudo y unos boxers negros pequeños que apretaban sus muslos. Se relamió los labios y tomó su cintura entre sus brazos para recorrer cada centímetro de su piel con sus labios.
_ Roier vino y preguntó por vos hace un rato, me dijo Amir _ Susurró él. Tomas frenó para observarlo, el sonrió de costado.
_Me escribió para que nos vieramos antes de cenar _ Confesó. Rodrigo frunció el ceño confundido.
_¿Y por qué estás acá?_ Dijo. Tomas se rascó la cabeza sin saber cuál era la respuesta correcta_ Tomi... ¿No dijiste que querías estar con el?
_ Quiero estar con el. Pero ahora quiero estar acá, con vos _ Susurró. Rodrigo levantó una ceja.
_No te estarás enamorando de mí ¿No?_ Dijo moviéndose de forma sensual. Tomas revoleó los ojos y lo apoyó contra la mesita de luz mientras besaba su cuello _ Vos sabes que si Ivan me llega a decir de vernos, no lo dudaría _ Afirmó, con la respiración entre cortada. Tomas recorrió con su lengua hasta su mentón sin prestarle atención y llevó sus manos hasta sus caderas ejerciendo presión _ Por que...
_ Shhh callate la boca_ Dijo, callándolo con un beso, mientras bajaba su boxer de un solo intento y llevaba su mano hacia el agujero de Rodrigo, para estirarlo para él. El gimió contra sus labios, olvidándose del idiota de Ivan.

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Now or never- Rodritom
Fiksyen PeminatRodrigo Carrera y Tomás Arbillaga (Robleis) se llevan mal, se detestan, se odian. No tienen absolutamente nada en común aparte del mundo del stream lo que hace que no se den cuenta de la atracción que sienten el uno por el otro hasta ese día en el q...