Despedida

334 39 0
                                    

"¡Dios mío izuku!" Hadou exclamaría. "¿Que ocurre? ¿Por que tanto ruido?" El niño preguntaría con dolor de cabeza luego de la noche intensa en la que estuvo involucrado. "¡Son las 10 en punto! ¡Llegaré tarde a mi vuelo!" La chica parecía estar desesperada haciendo sus maletas en tiempo récord. Izuku estaba asombrado por la velocidad de la niña, ¿Como había ordenado toda esa ropa en tan poco tiempo? Era algo que seguramente nadie sabía.

"Te llevaré hasta el aeropuerto." El chico afirmaría. La niña mientras tanto le lanzaba todas sus maletas en la cara. De algún modo sus reflejos lo ayudaron para lograr sostener todas y cada una de ellas. "¡Vamos Izuku-kun!" Nejire estaba contra el tiempo y se podía notar perfectamente en su lenguaje tan desesperado.

Ambos saldrían por la ventana de la habitación. El niño se podía ver cargado de cosas mientras Hadou sobrevolaba la ciudad rumbo al aeropuerto. Izuku tenía tantos sentimientos encontrados, de algún modo no sabía cómo expresarlos, sentía un nudo en la garganta cada que veía a la peliceleste.

"¡Son las 10:20!" Nejire exclamaría bajando de las alturas, por fin había llegado a su destino. "Izuku-Kun..." La niña susurraba el nombre de su novio. Podía ver la tristesa en sus ojos, que, en parte, denotaban toda la soledad que comenzaba a sentir. "Gracias Nejire-Chan." El chico agradecería. La niña un tanto confundida lo miraría extrañada.

"¿Por que me agradeces tontito?" Esta preguntaría sin entender el trasfondo de lo que izuku quería decir. "Mi vida, Gracias por devolvermela." El pecoso explicaría con una sonrisa que parecía desvanecerse. "Te extrañare, no voy a negartelo. Supongo que me acostumbré a todo el cariño que me dabas, ahora que ya no estarás será difícil para mí lidiar con todo." Izuku confesaba. Nejire no sabía que decir para consentir al chico que parecía desmoronarse.

"Vuélvete el héroe más fuerte del mundo. Si eso no ocurre cuando esté devuelta, entonces te daré la mayor paliza que jamás habrás recibido en tu vida. Maldita remolacha." Nejire diría al final mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. En su rostro podía verse reflejado el fiel reflejo de una niña pequeña, aquella niña que había vivido una pesadilla, aquella niña que se fue de su casa para nunca más volver, aquella niña que ahora iba en busca de un sueño...

"Te prometo que así será." El chico respondería algo cabizbajo. "Te amo Izuku Midoriya." Hadou envolveria al niño en un fuerte abrazo. "Se te está haciendo tarde..." El peliverde le recalcaria a la chica, que, con toda la disposición del mundo procedía a darle un último beso. Un beso que sería el recuerdo más vivo que tendría de el en un buen tiempo.

"Te amo Izuku. Se que lo digo muy seguido, pero no sabes lo mucho que significas para mi. Haría literalmente cualquier cosa por ti, si tú me pidieras que yo me queda..." La chica no alcanzaría a terminar de hablar debido a que el pecoso coloco su dedo índice sobre sus labios, haciéndola callar.

"Jamás te pediría algo así. No pienso interferir en tus sueños, sería demasiado egoísta de mi parte pedirte que te quedarás y renunciaras a hacer algo que te apasiona. Así que ve y conviértete en la mejor psicóloga del mundo, por que yo seré tu primer paciente." El chico bromearia un poco al final, descomprimiendo el ambiente melancólico que se hallaba en el lugar.

"Eres un tonto." Hadou comentaría con una pequeña sonrisa. "Siempre lo seré, es parte de mi." El peliverde no negaría las palabras de la peliceleste, es más, aceptaba que era tonto. "Jiji." Nejire se reiría. La chica daría un suspiro a sabiendas que ahora tenía que marcharse. "Ya es hora Izuku-kun..." Esta recalcaria con la mirada baja.

"No hace falta decirlo." Izuku respondería dándole un beso en la frente a la chica que lo atraparia en un fuerte abrazo. "Recuerda que siempre estaré para ti. No importa que tan lejos este, yo siempre estaré ahí para ti. Adiós mi pequeño héroe." La niña se despedía de su novio. El chico veía como la peliceleste se alejaba cada vez más de donde el se encontraba.

"¡Me encanto lo de anoche!" Nejire gritaria a lo lejos. El peliverde inmediatamente reaccionaria con un rubor evidente en sus mejillas. "Siempre tan directa." Izuku se reiría por las palabras de la chica, definitivamente la iba a extrañar, pero no quería ponerse triste pensando en ella, prefería mantener una sonrisa. Esa sonrisa que Hadou siempre le brindaba a todo el mundo.

"Nuestras almas están entrelazadas ¿No?" El niño se preguntaría para posteriormente sonreír. "Nejire Hadou, Eres mi más grande inspiración para convertirme en el Héroe N°1. Ya no necesito otra cosa que no sea recordar tu sonrisa para tener la motivación de volverme más fuerte. Ahora que le diré a Eri-Chan, ella te extrañara." Izuku comentaría mientras se llevaba las manos a los bolsillos.

"Ella dará todo de si para conseguir su sueño, no puedo quedarme atrás, debo hacer lo propio. No hay tiempo para ponerse triste, ¿No es así All Might?" El chico daría un suspiro para acto seguido mirar hacia el cielo. "Plus ultra..." Izuku mostraba serenidad en sus palabras, estaba determinado a conseguir sus objetivos y no tenía tiempo para lamentos, era la hora de ponerse serio.


Make SenseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora