Luna los mira a ambos su corazón late con fuerza al verlo así, los niños ya se habían despertado aún se encuentran tanto padres como hijos en el medio de la sala jugando.
Los pequeños no pueden dejar de reír y gritar ellos al ver que sus dos padres juntos no podían contener su alegría, cada bebe está junto a su padre disfrutando la cercanía a ellos.
Luna se da la vuelta para hacer un aperitivo la hora de los niños para dormir ya paso ellos no querían hacerlo solo desean estar con sus padres jugando y es entendible los pobres no entendía por qué sus dos papá estaban juntos pero gracias a Dios ya todo se va a solucionar.
Con el aperitivo en mano volvió a la sala llama la atención de los cuatro, entre todos comen la pequeña meriendo luna se unió a ellos y entre los cincos pasaron todo el rato jugando.
Cuando llegó la noche Luna preparó algo muy agradable para los bebés, a estos se les dio un baño y callejón en la cama de una vez, su tarde movida y emocionante junto a sus padres los dejó agotados.
Cuando los niños se durmieron Luna baja de nuevo a la cocina y comenzó a preparar unos tacos ya la carne que es lo que más dura ya casi está solo falta terminar de picar los demás, cuando terminó prepara todo y lo deja en la mesa tapado así va rápido a darle un rico baño de pie a cabeza.
Cuando sale del baño va directo a su closet y mira su ropa —Por Dios que me pongo —sigue mirando su ropa sin saber qué hacer, sigue buscando sin ningún éxito.
Se sienta en la cama desnuda , uf8ñ
suspira y se levanta al final busco una falda blanca que llega hasta su rodillas, una blusa de tirantes blanca sin ningún diseño se mira en el espejo y confirma es sencillo y cómodo. La blusa resalta sus atributos y su cintura, la falda blanca resalta sus cadera toma un poco de la blusa y lo entra por dentro al notar que la blusa es un poco larga.
Deja su cabello rizado suelto, no se pone ni una gota de maquillaje ella no es muy fanática pero en ocasiones le gusta usarlo.
Al final sale de su habitación y baja hacia la sala dándose cuenta que los gemelos Smith ya están ahí, Paul se encuentra vestido con un pantalón blanco holgado con una camisa por igual blanca, Paulo se encuentra por igual con un pantalón holgado blanco pero con un poloche blanca.
Los tres no pudieron evitar reírse al notar que están vestidos con el mismo color.
—Vamos hice tacos con mucha carne —expresó Luna con una hermosa sonrisa.
Los gemelos confirman emocionados aman la carne o mejor dicho cualquier cosa que Luna haga de comer.
Los tres llegan al comedor y cenan animadamente entre risa y broma, Paul no pudo evitar que su corazón se llenará de alegría el día que tuvo solo podía mirar a la mujer a su lado, ella le a dado la valentía de poder estar con su familia.
Al final de la rica cena los tres van al jardín, Paulo entra de nuevo a la casa y busca una bebida específicamente vino, al volver alzó las tres copas y la botella —Un agradable momento merece un boca de vino.
Los demás se ríen, Paulo sirve el vino y toman asiento, los tres se quedan en un agradable silencio mirando el cielo nocturno llenos de estrellas.
—La noche es muy hermosa.
Ambos hombres la miraron —No más que tú —expresaron al mismo tiempo.
Luna se avergüenza —Gracias, ustedes tampoco se quedan atrás.
Los gemelos ríen, cada uno está sentado al lado de ella y toma las pequeñas manos cada uno mira lo pequeñas que son, al mismo tiempo los dos se levantan y se ponen de rodilla frente a ella.
—¿Qué hacen? El piso está sucio.
Ambos ignora el comentario, el primero en hablar es Paulo —Yo… te quiero a mi lado, eres alguien que me dio fuerza cuando estaba en los más hondo, por ti pude aprender a cuidar a mis hijos, por ti pude aprender a ser padre para ellos, sin ti no sabría que hacer —la mira con amor —Te amo Luna es posible que sea muy rápido pero mi corazón no puede evitarlo, anhela tenerte, anhela que le pongas atención.
Luna lo mira sorprendida.
El siguiente fue Paul —Paulo — mira a su hermano —, te pido disculpa la vergüenza que sentía hacia ti no me deja pensar claramente, te falle, te deje solo cuando más tenemos que estar juntos… Lo siento hermano tratare de ser una mejor persona.
Paulo solo sonríe —Eres una buena persona, solo no te vayas otra vez.
Paul confirma más tranquilo —Y tu Luna… te robaste mi corazón desde que escuché tu agradable voz cada vez que la escucho mi corazón se acelera, tus palabras de ánimo, tus conversaciones me hacía querer salir afuera y gracias por hacer eso, gracias a ti conocí a mis hijos, gracias a ti volví hacia mi hermano y gracias a ti estaré con mi familia… yo te amo eres la dueña de mi ser y alma.
—Eres nuestra —dijeron al mismo tiempo los gemelos —¿Quieres ser mi pareja?
Estos dos la tenían aturdida nunca espero tantas palabras bonitas, nunca nadie le a dicho tantas cosas tan linda, lágrimas comenzaron a bajar por sus mejillas.
—Ustedes dos son un caso, ustedes son lo que tiene en sus manos mi corazón aunque hay dos que están en primera fila —expresó con una sonrisa Luna —, esos pequeño los veo como mío a ustedes los veo como míos, yo tengo sentimiento hacia ambos desde que vine aquí solo que los escondía pensando que no me querían igual.
—Me dolía el corazón ver como Paul estaba encerrado, me prometí a mi misma sacarte de ahí, me dolía ver como Paulo se sacrificaba por sus hijos tratando de día a día de velar por ellos cuando no tenía fuerzas.
Paul baja la cabeza avergonzado, Paulo toma la mano de su hermano y la aprieta.
—No te sientas avergonzado Paul —expresó Luna —, cuando uno tiene depresión el mundo cae y se vuelve un caos con algo así no se puede jugar… tú luchaste con ella y aún lo harás aquí estoy yo y tu hermano para ayudarte a salir hacia delante.
—Ya no habrá caos en su
familia.
—Nuestras familia — se apresuran a decir los gemelos —Los niños te ven como su madre.
Luna se limpia las lágrimas aunque es el balde —Yo a ellos los veo como mis hijos.
—Entonces los tres
Velaremos por nuestra familia y si quiero estar con ustedes.
Ambos gemelos sonríen, la abrazan con fuerza agradeciendo a Dios tener a una mujer con un inmenso corazón para ellos.
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Mi Niñera +18 (Saga Agencia Intergaláctica)
RomancePara mayores de 18 años... Los gemelos Smith. Su lazo está a punto de romperse solo por la osadía de una mujer sin corazón, cuando el menor de los hermanos Smith pensó que podría respirar se equivocó. Cansado por todo, corre hacia sus amigos Lawless...