6

1K 41 7
                                    

-¡PARA!

Al segundo, Deku había frenado su carrera y lentamente abrió los ojos, que se encontraron con una mirada seria y penetrante. 

Izuku cambió al instante el punto de mira al encontrarse con los ojos de Todoroki, y cuando se atrevió a subir la cabeza, no miró Shoto, sino a la mesa en la que reposaban los vasitos.

"Debo de estar mal de la cabeza" Pensó. Dejando que su cuerpo actuara y su mente descansar, dio una zancada y cogió un vasito con licor que se bebió de un trago. Notó enseguida que entorpecía los sentidos, logrando el efecto deseado. Mina le gritaba cosas inaudibles cuando Deku se encaminó hacia su destino, pero, para sorpresa de todos, no era su silla, sino la de Kacchan.

·

·

·

·

Desde que conocía al cenizo, Izuku siempre lo había admirado, incluso idolatrado, llegó a obsesionarse con él por un tiempo, y después de tantos años le hacía feliz que Kacchan le hubiese pedido perdón. Siempre había tenido las ideas muy emborronadas acerca de él, y esa pequeña charla que habían tenido le aclaró por completo las ideas. No idolatraba a Kacchan, lo amaba.

Izuku se dirijo hacia la silla del cenizo y sacudió la cabeza un poco. Ya no había marcha atrás. Todos estaban en silencio, espectantes, y era la primera vez que Kacchan no preveía los movimientos del contrario. El peliverde alzó una pierna y se sentó encima de Kacchan, y sin pensárselo dos veces le besó apasionadamente. Nadie movió un musculo porque pensaban que Katsuki haría estallar a Deku, pero cuando sus brazos lo rodearon con suavidad y le devolvió el beso todos estallaron en gritos y aplausos, algunos hasta se levantaron y gritaron "¡Viva los novios, joder!", entre ellos, Kaminari con lágrimas en sus ojos.

Todos les preguntaron acerca de eso y les ayudaron a descubrir un poco más acerca de su reciente relación. Había gente que incluso llegó a preguntar si había pagado a Shinso para que le controlara la mente, pero Katsuki intervenía y decía que todo era intencionado, aunque improvisado. Los únicos de la clase que sabían que se habían reconciliado eran el Bakusquad y el grupo de amigos de Deku. Ambos grupos tomaron la noticia bien, pero dos de los amigos de Deku parecían molestos: Uraraka y Todoroki.

-¡Todoroki! ¿Te lo estás pasan...?

El peliverde se interrumpió a sí mismo cuando Todoroki lo miró con furia. O tal vez rabia, o impotencia. No tenía ni idea, pero esa mirada le asustaba.

-Sabes, no te preocupes... Voy con Kacchan.-Aquello pareció enfurecerlo aún más y se notó claramente que su pelo ardía, al igual que el de su padre.

-Sí, claro. Vete con tu querido novio "El rey Bombardero Explosivo". Te estará echando de menos.

Deku acababa de descubrir aquella faceta de Todoroki, una molesta, desafiante y encolerizada faceta. Parecía Kacchan en versión relajado.

-Lo siento, no quería molestarte...-Se disculpó. No sabía que había hecho para que Todoroki se molestase de esa manera con él, así que fue con Kacchan olvidando por completo aquella respuesta insolente del chico y centrándose en su pareja. 

Izuku descubrió lo cariñoso que podía ser Kacchan y que si se relajaba era un novio ideal. En un momento, Kacchan conversaba alegremente con Kirishima y Kaminari, y su brazo lo rodeaba por los hombros. El peliverde lo miaraba desde abajo, y se dijo para sí mismo que parecía un ángel. De vez en cuando, Katsuki le cogía de la cintura (le agarraba) y le dejaba un ligero beso que siempre era muy bien recibido por el peliverde. Cuando se acabó la fiesta, Kacchan y Deku regresaron junto a Kirishima y Kaminari

-Oye-Intervino Kirishima-¿No creéis que os estáis pasando un poco con lo de noviecitos?-Soltó cuando les vio agarrados de la mano. Y es que se estuvieron dirijiendo miraditas todo el camino.

Todos se quedaron serios por un momento, pero después de unos instantes todos estallaron en carcajadas, menos Izuku. Katsuki le miró y apretó con leve fuerza su mano.

-Tienes que aprender como funciona el Bakusquad, nerd.-Dijo suavemente Kacchan. 

Izuku soltó una leve risita. Se sentía descolocado, pero no fuera de lugar. Kirishima era muy bruto, pero era una maravilla de persona. Kaminari parecía tonto, pero después de todas esas estúpidas bromas había un caracter muy parecido al de Midoriya. Ya conocía a Ashido, una chica energética que siempre sonreía, y Deku le tenía mucho afecto. Con Sero no había coincidido mucho, pero si lo intentaba quizá podría trabar una buena amistad con él, desde luego no parecía mala persona.

·

·

·

·

·

·

Los meses pasaban y la relación de Izuku y Kacchan iba viento en popa. Kacchan le había regalado un anillo con una línea verde en el medio por su cumpleaños a Deku, que agradeció con un apasionado beso. 

Era la primera vez que Katsuki se acordaba de su cumpleaños. Realmente siempre se acordó, pero nunca fue por razones bastante obvias. Si iba a su cumpleaños, saldría su lado impotente, cosa que no quería en ese momento, pero descubrió que ese lado suyo le había traído más beneficios que otra cosa. Izuku solo le traía cosas buenas, nunca peleaban, y en los entrenamientos ambos mejoraron enormemente a pesar de ser ya los mejores de la clase. En su aniversario, el ocho de Abril, le regaló un colgante a juego con el anillo, esta vez con una decoración naranja. Un día, Kacchan y Eijiro caminaban de camino a la escuela y el pelirrojo hizo un comentario que un año antes habría causado una visita a la enfermería.

-Sabes, estoy muy contento de tu relación con Deku. Mi probabilidad de morir al día se ha reducido de un 99% a un... 60% más o menos.-Después de auqello soltó una carcajada y el cenizo sonrío de medio lado. 

Todo en su vida había dado un giro de 360 grados, ahora tenía un novio maravilloso, unos amigos que podían bromear a sus anchas sin miedo a ser asesinados y sus notas iban solo hacia arriba. Incluso su madre se había alegrado por él. 

-Sabes, te pareces más a tu padre de lo que pensaba.-Soltó Mitsuki un día que habían invitado a Izuku a comer ramen.

-¿Qué dices?-Preguntó Kacchan, desconcertado. Si su madre se había hartado de decir algo era que se parecía muchísimo a ella, tanto en carácter como en personalidad.

-Ujum-Asintió la ceniza-, desde que este señorito llegó a tu vida eres más blando.-Izuku se asustó un poco pensado que no agradaba a Mitsuki, pero tragó saliva y esperó a que continuara- Y eso me gusta. Hijo me ha ido muy mal en la vida por el caracter de mierda que tenemos. Sigue así. Hay que ser duro en la vida, pero a veces hace falta ser un poco Masaru, ¿verdad, cariño?

-Sí.-Se limitó a decir Masaru.-Yo amo a tu madre, pero a veces sois un poco explosivos...

-Bueno, supongo que es una forma de darme la razón así que no me quejaré.- A Izuku se le escapó una sonrisita. A pesar de ser... Bueno, la familia Bakugo, todos se respetaban y se amaban entre ellos. Cuando Katsuki les contó que estaba saliendo con el peliverde, la familia aceptó a Izuku con los brazos abiertos, y todos los meses le invitaban a cenar ramen. A veces katsudon. Kacchan sabía que era la debilidad de Izuku, así que solo tenía que decirle que le compraría katsudon para que fuese con él de compras o a entrenar.

La vida de Izuku y la de Kacchan era perfecta. Nada podía salir mal. Los dos eran felices y les gustaba su situación. Pero por culpa de una chica de pelo castaño y un mitad mitad, todo se torcería.

Soy todo tuyo -Bakudeku-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora