-Prólogo-

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Antes de nada quiero decir que es la primera vez que escribo algo aquí así que lo haré mal xd. Haré lo mejor que pueda.

-¡Katsuki!-Izuku Midoriya gritaba el nombre de Katsuki Bakugo.

-¡Deja de seguirme! ¿Qué pretendes?

-¡Quiero ver que hace tu don, Katsu! ¡Me han dicho que es genial!-Bakugo se paró en seco. 

Viró su cabeza y dijo burlonamente:

-¿Ah, sí?- Había picardía en su mirada. Sonrío y terminó de girar su cuerpo.-¿Quieres verlo?- Midoriya asintió enérgicamente ante las palabras del alfa. A los cuatro años, el don de Bakugo era muy poderoso ya de por sí. A Midoriya siempre le había fascinado todo en Bakugo. Era un chico seguro de sí mismo, con un carácter fuerte y algo enfadica, implacable y, lo que más le entusiasmaba al peliverde, siempre ganaba.

Bakugo se acercó a él. Quedó muy poca distancia entre Midoriya y la pared.

-Observa- Ordenó Bakugo. Puso su mano derecha al lado de la cara de Midoriya, y de su mano salió un sudor extraño, que el cenizo hizo explotar. Midoriya se sobresaltó con la explosión, y Bakugo simplemente sonrió con malicia.-¿Quieres que pruebe contigo, Deku?-A Midoriya le cambió la expresión al oír ese mote. ¿Deku? ¿Quería decir "pelele"? A Midoriya se le cristalizaron los ojos y empezó a llorar en silencio. Alzó la mirada y obervó la mano que el chico sotenía a la altura del hombro. Se le había formado una pequeña ampolla entre el dedo índice y el corazón.

-¿E-Estás b-b-bien, Kats?- Dijo en un susurro casi inaudible, pero Katsuki lo escuchó perfectamente, ya que estaban a muy poca distancia.

-¿¡CÓMO QUE SI ESTOY BIEN!?- A pesar de su edad, Katsuki tenía la voz muy alta, y algo más grave de lo normal.-¿¡ACASO VES QUE ME HAYA HECHO DAÑO!?.

Izuku negó levemente con la cabeza. Ahora llorando desconsoladamente, salió corriendo para llegar a los brazos de su madre.

Katsuki se frotó la nariz despacio.

"¿En qué estará pensando?" Se preguntó. La ampolla le dolía, pero estaba bien. No sabía por qué aquel chaval seguía yendo detrás de él, cuando le había dado señales claras de que lo quería lejos de su vista. Estaba enojado, pero sentía su aroma salir descontroladamente, hasta que la vainilla algo quemada inundó el callejón en el que pocos segundos antes se había encontrado con Deku.

Se conocían desde mucho tiempo atrás, y a Katsuki nunca le había caído bien Deku. O eso pensaba. En al rincón donde había estado acorralado Deku, quedó un leve aroma a césped recién cortado, casi imposible de oler, pero Katsuki lo percibió.


HASTA AQUÍ EL PRIMER CAPÍTULOO (bueno, el prólogo). No sé qué días voy a poder publicar, pero haré lo que pueda. 

Gracias por comenzar a leer esta tontería jajaja.

Soy todo tuyo -Bakudeku-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora