Al otro día me desperte mal, pensando en Matt y en que su auto que le costo tanto conseguir se había arruinado por culpa de un tarado que no sabía manejar, mi mamá me preparo un desayuno especial para levantarme el animo y cuando estaba a punto de salir tocaron bocina, era Matt en taxi, ya que el tenía que ir a hablar con el que lo choco y yo tenía que ir a la entrevista el me acercaba al lugar y yo iba caminando.
El taxi y Matt me dejaron a unas 15 cuadras antes y Matt se dirigió a su charla, yo tarde unos 30 minutos en llegar, porque hice un poco de tiempo, al llegar me dijeron que el jefe estaba con alguien asi que tuve que esperar como 15 minutos, mientras tanto yo maldecía al idiota que estaba tanto tiempo adentro del despacho del jefe, hasta que escuche que se abría la puerta del deapacho, mire hacia alla y vi a Matt saliendo de esa puerta, lo detuve y le dije: ¿Que haces aca? El me respondio lo que yo no queria escuchar osea: Vine a hablar con el que nos choco.
Hablamos un par de palabras mas hasta que me llamaron, yo entre y apenas el jefe me vio dijo:
EL MUNDO ES UN PAÑUELO, esto te tiene que dejar una leccion que es: nunca agredas verbalmente a alguien que te choca en la calle.
Yo lo miraba con cara de asesina porque sinceramente quería irme a la mierda pero seguí escuchando.
El dijo: Estas contratada, yo obiamente le dije que no aceptaba el puesto y que tenía un mejor trabajo en el que me pagarían mas dinero que en este, el me ofrecio el triple del dinero ofrecido y ahi ya no pude decir que no, era una oportunidad para comprar mi auto y rapido, asi que lamentablemente tuve que aceptar la oferta.
El me dijo que comenzaba mañana, yo lo mire con cara de desagrado, el me dijo que se llamaba Andrew, me di la vuelta y me retire, sin saludarlo.
ESTÁS LEYENDO
Nunca te enamores de tu jefe
RomanceMaia es una chica de 19 años, ella ya termino el ciclo superior de la escuela y ahora debe buscar un trabajo, por fortuna lo consigue, su trabajo: secretaria en una empresa que fabrica puertas, la parte favorita de su trabajo: ver a su jefe todos lo...