Hoy cuando estaba en el centro de la ciudad dando mis charlas sobre esa historieta de Phantom Halo cruce miradas con aquella chica con la cual me choque el otro día, debo admitir que esa mujer era muy hermosa, su mirada hizo que algunas mariposas revoloten dentro de mi estómago, esa fue la mejor sensación de mi vida y cabe recalcar que fue la primera vez en mi vida que lo senti ya que nunca me había enamorado.
Sí, no se lo que es el amor, nunca he tenido novia, amigos y al parecer todos me odiaban, mi padre era un alcohólico maltratador y mi hermano Beckett era un imbecil mujeriego que se divertía controlando y arruinando la vida de los demás. Siempre estuve esperando a esa mujer que me ame sin alternativas y este para mi en todo.
Tengo que admitir que yo no soy de llorar pero aveces no puedo aguantar y me quiebro gracias a la soledad que siento, mis cómics e historietas son lo único que tengo, no se que haría sin ellas.
(...)
- Dios! ¿Por qué es tan linda?! - exclame casi gritando por no parar de pensar en aquella chica del centro que se había quedado exclusivamente para escuchar mis relatos acerca de aquellos libros que no tenían más de 10 hojas.
No había podido dormir en toda la noche gracias a esa maldita chica entonces me dispuse a agarrar una linterna y una de esas historietas estaba dispuesto a leer cuando de repente apareció Beckett por la puerta de mi habitación, - ¿Más cómics? - murmure cuando vi que en sus brazos traiga un poco más de 5 libros pequeños.
- Samu, mira lo que conseguí para ti - hice un sonido raro, algo parecido a un ¿gemido? Ahogado por el asombro, rápidamente me senté en la cama y empecé a revisarlos todos y me sorprendi al ver que eran todos de colección y edición limitada, me pregunto donde los había conseguido y le dije - ¿Son para mi? - Eso es lo que acabo de decir - bufo él, lo mire sarcástico y luego volteé a ver el relog ¡Eran las 05:37Am de la mañana! ¿Qué hacía el llegando a esta hora? Ni bien termine de pensar en eso escuché otro ruido, la puerta se había abierto o más bien, la habían abierto.
- Samuel, Beckett! ¿Donde están mis chicos? Oh mis niños, mis pequeños bebés - escuche a papá decir y rápidamente escondí los cómics debajo de la cobija ya que el los odiaba y decía que era muy infantil al usarlos sin recordar que ellos nos han sacado adelante.
Papá entro a la habitación, mierda, estaba borracho.
- ¿Me estaban esperando? - dijo el haciendo que los dos lo miremos fijamente - Ni en toda mi put4 vida te esperaría a ti - Dijo Beckett en casi un susurro pero ese leve tono de voz fue suficiente para que papá lo escuche y se enfade - Vuelve a repetir eso Beckett - grito papá mientras Beckett salía rápidamente de mi habitación y se dirigía a la puerta, rápidamente salió de la casa y papá se retiro de mi habitación.
No cabe duda que esa mujer rubia me estaba matando, decidí salir afuera con uno de los nuevos cómics y me senté en el porché pero no podía leerlo, lo único que rondaba por mi cabeza era esa increíble mujer con la que días antes había tenido un incidente.
Quería saber más de ella ¿Donde la podría encontrar? No tenia ni idea de su nombre siquiera.
Me pare del viejo porché y decidí salir q caminar un rato, a este paso ya eran las 06:00Am y dentro de 15-20 minutos pasaría el camión de la basura.
De repente escuche una puerta abriste y gire para ver si había sido mi padre que había salido pero no, - Qué diablos a sido eso? - susurre para mí.
Volteé para todos lados pero no veía nada hasta que me centre en una bella casa de 2 pisos color gris y blanco.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Y ahí la vi.
Se veía tan bella con su cabello largo desordenado, pijama hasta con cara de adormilada se veía hermosa, ella no se percato de mi presencia pero yo admire cada detalle de su bello cuerpo, tenía cara de ángel, el ángel más bello de todo el cielo...
