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"El secreto que guardare por siempre"

Cuanto tiempo me llevaría pensando en el por que de romper mi relación con Saúl, menos de dos segundos, de eso estoy segura, y cuanto tiempo me llevaría pensar el por que no hacerlo, fácil, ya estaba mas que claro, que realmente no quiero nada mas que amistad con el.

Me siento pésima persona por no corresponderle a alguien que según él a su manera me ha demostrado "amor", pero esta mas claro que el agua que eso es una vil mentira.

Ya estaba casi apunto de terminar la clase y sonara el timbre, por cierta razón estoy nerviosa, y se que se me dificultará lo demasiado para romper con Saúl, muy poco hablamos y las miradas entre nosotros son escasas.

Y taran!, El timbre sonó.

Y como regularmente, todos salen como una bomba que estalla, todos fuera del salón en menos de un minuto, a excepción mía, que por lo regular tardo horas en salir, voy con la más mínima lentitud que puedo, sobre todo hoy que mis nervios me impiden hacer las cosas a mi velocidad normal.

Antes de salir miro hacia la puerta del salón, y ubicó a cierta persona la cual buscaría pero al mismo tiempo no deseaba hacerlo.

- Saúl!, Hola

Camine un poco a la puerta para poder alcanzar su caminar.

El camino hacia mi para no hacerme cansar o por puro caballerismo, realmente no lo se, al estar frente a el, solo tomo entre sus brazos mi cintura acercándome a el.

Se inclinó para darme un beso en la mejilla.

- hola cariño

CARIÑO!, Enserio?
Cada vez estaba mas nerviosa, el jamás me llamaba así y rara vez me buscaba para estar conmigo por lo menos la mitad de lo que dura el receso.

- ham Saúl, me gustaría hablar contigo.

- claro cariño, de que ?

- bueno podríamos bajar a comer y luego buscar un lugar privado para hablar

- oh claro

Me dio un beso en la frente y puso su brazo izquierdo sobre mis hombros y como "novia" que soy de el entrelace mis dedos con los suyo de la mano que colgaba de mi hombro. Bajamos las escaleras y cada quien con su moto lo que quería.

Después de un rato de caminar por la escuela, nos fuimos a una banca la que llaman "la banca del amor", idiotas los que piensan eso, y si lo hacen dejaría de serlo .

- bueno cariño, de que querías hablar

Dijo mirándome y con su dedo pulgar quito residuos de comida que se encontraban cerca de mi boca.

- gracias, bueno... Espero esto no lo tomes a mal pero..

Y genial interrumpida por sus amigos.
Platico con ellos un rato, y de vez en cuando decían algún algo de nuestra relación o de mi.
Por dios, que creían que después de que termine con Saúl andaré con alguno de ellos, puff en sus maldito e imposibles sueños.

Y así se fue el tiempo en donde podríamos estar, y yo ya no aguantaba las ganas de decirle, quería hacerlo de una vez por todas.

Enojada me levante cuando sonó el timbre y subí al salón de clases si dirigir una palabra a los que me hablaban y a Saúl.

Entre al salón y me senté en asiento indignada.

Y ahí sentada lo había pensado, si el no me hacia caso haría lo que fuera para dejárselo en claro.
Saque mi libreta y un plumón negro permanente, la única forma de desaparecer el papel era rompiendo o borrando la frase con correctos liquido.