planes

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Hanbin dio una nueva vuelta por la cocina pensando en cómo acercarse a Matthew, debía salir y aunque su padre le había dado un poco de dinero aún así necesitaba un poco más para poder comprarle algo a su cita.

Porque sí, tenía una cita.

Una cita con el chico más precioso de todos, que incluso siendo un poco más alto que él se hacía pequeñito cuando lo abrazaba, y que en realidad también era el mejor amigo de su hermano menor, pero de momento solo querían conocerse y está sería su primera cita con Hao.

—¿Vas a salir?— preguntó Matthew observando cómo Hanbin estaba bien vestido y peinado, Jiwoong ya le había comentado que el chico tenía planes para ese día, pero aún así decidió preguntar, tenían todo listo y Gyuvin estaba por llegar para quedarse con Yujin y que ellos pudieran ir al tribunal.

—Sip, iré a una feria, con un amigo— Hanbin estaba que le saldría humo de las orejas, su rostro estaba también un poco rojo de solo pensar en pedirle dinero a Matthew, definitivamente no podía hacerlo.

—¿Tienes dinero para ir?— Matthew se cruzó de brazos con una sonrisa, ya imaginando por dónde iba la charla —Seguramente verás muchas cosas lindas, quizá también comida deliciosa— el castaño buscó algo de efectivo en su billetera, era una cantidad, considerable, de hecho un poco más de lo que Hanbin podría necesitar para su cita, aún así el pelinegro sólo lo tomó con una gran sonrisa avergonzada.

Hao dio una quinta vuelta por su habitación mientras veía la hora en su celular, demonios, demonios, demonios, demonios, demonios, demonios, estaba demasiado nervioso, no podía creerlo, tenía una cita, Hanbin lo había invitado a una cita, no a dar una vuelta, no a comer un helado, lo había invitado a una CITA.

Estuvo toda la mañana dando vueltas pensando en que colocarse y ahora daba vueltas pensando que hacer con su cabello, este estaba un poco largo ¿Debía utilizar un gorro? ¿Gafas? ¿Pinzas para el cabello?

"Estoy afuera"

El chino casi dejó caer su celular cuando recibió aquel mensaje, dejando su cabello como estaba y colocándose rápidamente un collar de caricias felices y cuentas de colores.

—Hola.

—Hola.

¿Las primeras citas eran así? Se preguntó el chino observando a Hanbin con una pequeña sonrisa tímida, el pelinegro se sentía igual de nervioso pero aún así tuvo mucha más valentía que Hao, tomando la mano del menor con una sonrisa.

—Habrá una feria en el parque que está cerca del centro comercial, pensé que sería lindo ir— ellos empezaron a caminar aún tomados de la mano, Hanbin notando cómo las orejas de Hao se volvían rojas —Te ves realmente lindo hoy— comentó el pelinegro haciendo que Hao se sonrojara por completo.

—Supongo que podemos ir ahí, aunque no tengo mucho dinero— el chino se atrevió a reforzar el agarre se sus manos, entrelazando sus dedos por completo y diciéndose que él también quería aquello —Tu también te ves realmente bien hoy.

El camino hasta la feria fue cómodo y agradable, ellos podían charlar de cualquier cosa, no tenían demasiados gustos en común pero Hao realmente adoraba cómo Hanbin lo mantenía a su lado cuando habían muchas personas, la feria estaba adornada con muchas flores y puestos de madera, habían demasiados detalles lindos artesanales y al entrar les colocaron un brazalete, Hao tomó una foto de sus manos entrelazadas y Hanbin decidió tomar una foto del menor junto a unos girasoles gigantes.

—Oh, mira eso, a Ricky realmente le gustarían— el chino se distrajo con un puesto de pequeños cuadros de flores, eligiendo uno cuando Hanbin dijo que podían llevarlo.

Ellos se mantuvieron tomados de la mano debido a toda la gente que caminaba por ahí, comieron helados y un montón de chucherías y Hanbin también compró algunas cosas para ambos, como un juego de estos llaveros de pareja súper cursis pero que aún así ambos amaron y decidieron colgar en sus celulares.

—Ricky va a notarlo— comentó entre risas Hao, tomando asiento en una banca libre cerca de donde estaban.

—Quizá deberíamos decirle.

—Quizá después.

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padres de familia - zb1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora