04 : cambios y más cambios

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Cambio de escuela, cambio de casa, cambio de cama, no hay espacio, todos ellos son ruidosos, debía presentarse frente a un aula completa y seguramente ser el nuevo centro de atención, ya se lo podía imaginar como el titular de los muros escolares, el chico nuevo que decidió ingresar a mitad de año que es mitad chino, no sabe hablar con desconocidos y tiene pánico cuando está frente a un grupo grande de personas.

La mejor manera de empezar un lunes.

—Papá dice si vas a desayunar aquí o llevarás una vianda a la escuela— comentó Hanbin entrando sin tocar a la habitación del menor a lo que Ricky solo contó hasta tres, encogiéndose en su sitio y sintiéndose diminuto por un momento, se estaba volviendo sensible, debía respirar profundo y tranquilizarse para no tartamudear.

—Papá m-me dio dinero para comprar el desayuno— murmuró, sus dedos enredándose con la corbata de su nuevo uniforme.

Tuvo que caminar con Hanbin hasta la escuela en un completo silencio incómodo y al llegar al gran edificio el mayor solo siguió caminando como si nada, encontrándose con los que supuso eran sus amigos, por lo menos pudo decirme a dónde ir, pensó el mitad chino apretando el borde de su suéter, asustándose cuando alguien tocó su hombro, incluso si fue con sumo cuidado.

—Disculpa... ¿Eres nuevo?— preguntó Hao sintiéndose incluso más nervioso que aquel chico bonito, ambos buscaron el nombre en el uniforme del otro sonriendo al notar que ambos eran chinos.

Quizá todo podría no ir tan mal.

—¿Estás nervioso por el primer día de Ricky en la nueva escuela?— preguntó Jiwoong terminando de lavar y organizar la cocina con ayuda de Matthew, ya todos se habían ido, Yujin estaba en el jardín de niños y Matthew también debía irse en un rato a trabajar.

—Estoy nervioso, pero sé que Gyu y Bin van a cuidar de él— el castaño solo suspiró con una sonrisa, su hijo no tuvo amigos antes, ahora tenía a Hanbin y Gyuvin, quería confiar en que también haría amigos en la nueva escuela —¿Sabes? Nunca he llegado tarde al trabajo— Comentó el menor acercándose para abrazar a Jiwoong, dejando un pequeño camino de besos desde el hombro hasta el cuello del mayor —Podría excusarme rápidamente.

—Amor, tu traje se va arruinar— Jiwoong solo se giró un poco entre los brazos de Matthew, correspondiendo sus besos y no pudiendo evitar sonreír un poco —De verdad te amo— confesó el pelinegro pensando en todo lo que Matthew había hecho por él, no solo por él, todo lo que había hecho por él y sus hijos, esa tranquilidad de saber que sus hijos lo adoraban y como el castaño cuidaba de sus pequeños e insoportables retoños... él podía darle esa seguridad a Matthew —Lo siento— murmuró distrayéndose por un momento, recibiendo esta vez un pequeño beso en la nariz y asustándose cuando el menor lo levantó del suelo en un rápido movimiento.

—Sé lo que estás pensando, yo también te amo demasiado, los amo a los tres, incluso a Gyuvin— agregó el castaño con una sonrisa, dejándose guiar escaleras arriba —Y sé que tu también nos amas, solo son ritmos diferentes, pero te prometo que el de verdad lo está intentando, si no los quisiera estaría encerrado en su habitación en el departamento y no aquí compartiendo con ustedes, solo llevemos las cosas a su ritmo ¿Sí?

—Sí— aceptó el pelinegro subiendo los brazos para que Matthew pudiera sacarle la camiseta —Es en serio, vas a arruinar tu traje —señaló recibiendo gustoso todos los pequeños besos del menor.

—Eso no es un problema, puedo quitármelo.

Llevar las cosas a su ritmo, ambos confiaban en que todo saldría bien.

꒰ა ☆ ໒꒱

El recibimiento de Ricky en la nueva escuela fue totalmente incómodo, pararse frente a una clase que lo veía descaradamente de pies a cabeza y ser murmuraban cosas entre ellos, tener que decir su nombre y de que escuela venía sin tartamudear.

padres de familia - zb1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora