❤Pequeño muffin❤

2.

(Canción: haunted-beyonce)

era viernes, estaba aburrido y solo en casa.

Se me ocurrió llamar a mi novio, el era todo para mi. Aunque es mayor que yo somos muy parecidos.

*ding, dong* sono el timbre

Baje y abrí la puerta, recibiendo a hector con un enorme abrazo.

como estas pequeño?- pregunto Hector.

-aburrido bebé-conteste.

Y si vamos a tu habitación?, sera divertido- dijo con su típica sonrisa.

No dude en subir un escalón, antes de entrar me cargo en sus brazos Apoyándome en la puerta. Sabia lo que seguía, tendríamos nuestra primera vez.

Mi primera vez.

Abrí la puerta tropesando con todo mientras el seguía besando mis labios.

Me recostó en la amplia cama quitando cada una de mis prendas hasta quedar desnudo ante sus ojos -eres hermoso- dijo.

Empezó a recorrer con su lengua todo mi abdomen hasta llegar a mi miembro rodeándolo con su humeda lengua.

-ah..hhh- salio de mi boca.

-tramquilo pequeño- dijo con su voz ronca- todo saldrá bien.

Empezó a chupar mi pene, se sentía tan bien era algo inexplicable. Yo evitaba gemir mordiendo mi labio inferior pero me era imposible la excitación era demaciada.

-Para ya-a o terminare en tu boca- dije entre un gemido.

-termina para mi pequeño- dijo

Sentí como las piernas se endurecian indicando que ya terminaria. Y así fue termine en su boca.

Subió hasta mi boca para darme un beso feroz, sentía mi cabeza en otro lugar ni siquiera escuche cuando advirtió que empesaria a prepararme.

Metió un dedo a su boca y después lo introdujo en mi recto, sentía dolor y placer.

Después fueron dos, y después tres esto era lo mejor.

Sacó los tres dedos cuando deje salir un gran gemido

-listo pequeño?

-sólo metelo- dije con desespero.

-mierda no traego condon- dijo preocupado

-SOLO METELA- grite con desespero, quería sentirlo dentro de mi.

Pociciono la punta en mi entrada, y empezó a meterlo lentamente dentro de mi.

Era tan doloroso pero placentero a la vez.

Un gemido salio de mi boca, haciendo que Hector se ecxitara mas.

-gime para mi pequeño- deci con la voz mas ronca de lo normal- vamos bebé.

Gemido tras gemido, estocada tras estocada y el sonido de el viento chillando sonaban en la habitacion.

Una ultima estocada en el punto exacto hizo terminar a los dos.

-estuviste genial- dijo saliendo de mi y recostandose.

No conteste, solo podía pensar en lo maravilloso que se sentía hacer el amor, con el amor de mi vida.