Renacimiento de la pequeña nuera en los 80 - Parte 6

Capítulo 1160: Mundo de dos personas

"Eso es porque tengo un esposo talentoso. Si no me ayudaras, creo que no tendría estos privilegios".

Qin Xue estaba muy consciente de sus habilidades, aunque se consideraba competente aquí. Pero aún no había llegado al punto en el que podía elegir a su antojo.

En resumen, todo esto fue conseguido gracias a las habilidades de Chu Molin.

"Aunque no niego que tengo mi parte en esto, también es porque tú tienes habilidades. Después de regresar a la capital imperial, es posible que estes lejos de casa con frecuencia. Realmente no quiero que elijas el camino de ser médico militar".

Chu Molin dijo con cierta preocupación. Esta mujer parecía pequeña, pero su capacidad no debe subestimarse.

Se arrepentía un poco de haberla enviado al ejército en primer lugar.

"Quiero luchar a tu lado, quiero estar más cerca de ti". Aunque ser médico militar era el sueño de Qin Xue, la razón principal por la que ahora quería serlo era por Chu Molin.

Una pareja debe tener un lenguaje y aficiones comunes para poder estar juntos.

"Tú... ¿Qué debería hacer contigo?" Chu Molin acarició su rostro y preguntó.

"¿Qué más podemos hacer? Ensalada fría". Qin Xue sonrió coquetamente.

"Suena bien, podría disfrutar y comer hasta el final". Chu Molin no esperaba que ella dijera eso.

"Está bien, puedes comer lo que quieras, ¿quieres que te prepare un poco de vinagre?"  Qin Xue siguió el juego de Chu Molin.

"No necesito vinagre, es demasiado agrio. Mejor trae un poco de chile, picante". Chu Molin levantó una comisura de su boca, mirando a esta mujer pequeña y atrevida. Realmente sabía cómo hablar.

"Temo que te desmayes por el picante, ¿por qué no lo comemos de forma diferente?"

Qin Xue miró la sonrisa del hombre y quedó tan cautivada que casi se le salían los ojos. Maldición, era demasiado guapo, y ese hombre tan guapo era suyo, de Qin Xue.

"Entonces, hagámoslo a la manera de 'agua hirviendo', tiene un sabor único". Chu Molin pensó en la sensación de intimidad que compartieron en la piscina con Qin Xue, era realmente maravilloso.

Así que no le importaba volver a experimentar esa sensación.

"Te has vuelto malo", Qin Xue exclamó, este hombre era demasiado aterrador, le daba miedo.

"Es porque eres tú, por eso me he vuelto malo", Chu Molin pensó que si fuera demasiado serio con su esposa, probablemente aún sería un monje vegetariano.

¿No dicen que a las mujeres no les gustan los hombres buenos? Él quería ser el malo en su corazón, pero también el hombre bueno y comprensivo.

"Los hombres son todos iguales, saben cómo relacionarse con las mujeres sin necesidad de aprender". Qin Xue recordó que al principio él era una persona muy seria, pero en poco tiempo, este hombre sabía cómo coquetear con ella y la dejaba sin defensas.

"No sé cómo son los demás hombres, pero contigo no puedo resistirme, eso ya lo sabes", dijo Chu Molin.

Chu Molin no tenía interés en otras mujeres, pero extrañamente no podía resistirse a Qin Xue ni un poco, y no sabía qué decir al respecto.

"Me gusta escuchar eso", dijo Qin Xue sonriendo.

¿Qué mujer no quiere ser la única en el corazón de su amado?

Por este hombre, ella estaría dispuesta a hacer cualquier cosa, sin importar cuánto tuviera que sacrificar.

"Me alegra que te guste", Chu Molin rozó su nariz con la suya y sonrió.

"Chu Molin, si sigues así me mimaras demasiado".

Qin Xue había dicho esta frase más de una vez, pero este hombre solo la consentía aún más.

"Es mejor consentirte demasiado, así no mirarás a nadie más", la respuesta de Chu Molin era siempre la misma.

Solo quería consentir a esta mujer hasta que su corazón estuviera lleno de él, así no sería engañada por nadie más.

Si Qin Xue supiera lo que pensaba Chu Molin, definitivamente le haría saber lo que sucedería si no confiara lo suficiente en ella.