XENIA
—–PHIL FODEN VEN PARA acá ya mismo.— Grite al entrar en casa y ver a Ronnie con un nuevo corte de pelo.
Esto es lo que me faltaba. Entre los dolores del embarazo y ahora Phil que no puede estarse quieto voy a explotar.
—–¿Qué pasa cari? ¿Mía ha vuelto a dar una patadita?— Puso una mano sobre mi enorme panza.
—–No, bueno no lo sé, ¿qué le has hecho en el pelo a nuestro hijo?— Le pregunté matandolo de una mirada.
—–Pues ya que he ido yo a la peluquería he pensado que también podía cortarle el pelo a Ronnie y así podemos ir iguales.— Se encogió de hombros con una sonrisa inocente.
—–Dios, Phil, tiene 4 años, deja que su pelito crezca.— Hable agarrando la mano del niño.
—–Mami... tengo hambre.— Hablo él pequeño acariciando su vientre.
—–¿No le has dado de comer?— Fulmine al inglés con la mirada.
—–Me había dicho que no tenía hambre.— Se trato de excusar.
Lo mire molesta. Deje mi bolso en la percha y camine a la cocina para preparar algo rápido. Ronnie se comió rápidamente la comida.
Rato más tarde Phil se fue a entrenar y yo me quedé sola con Ronnie.
—–¿Quieres ver una peli?— Le pregunté sonriendo.
—–No, quiero jugar al fútbol.— Hablo señalando el jardín.
Bufé un poco cansada, pero aún así decidí jugar con él. Estuvimos jugando un rato hasta que comencé a tener dolores en el vientre.
<<Ya viene>>
—–¡RONNIE LLAMA A PAPA!— Grite posando mi mano en mi vientre.
Llame a mi hermano para que viniera por mi. Ronnie se subió a la parte de atrás del auto mientras yo tardaba un poco más en subirme.