Noa
28 de mayo, 2018
ANTOINE SE HABÍA ENTERADO de que era el padre de Ezra en un descuido de mi hermana. Mis nervios recorrían todo mi cuerpo mientras Ezra dormía tranquilamente en el sofá.
—–Lo siento de verdad Noa, iba muy estresada.— Se lamento mi hermana mirándome.
—–No importa, de cualquier manera se iba a acabar enterando.— Hable tratando de regular mis nervios.
Varios golpes en la puerta se hicieron presentes alertándonos a mi hermana y a mi.
—–¡ABRE LA PUERTA NOA!— El grito de Antoine se hizo presente en varios segundos.
—–Vete por la puerta de atrás, voy a hablar con él.— Hable caminando hacia la entrada.
Cuando vi que mi hermana ya no estaba abrí la puerta dejando pasar a un furioso Griezmann.
—–¡¿Tengo un hijo contigo y ni siquiera me lo ibas a decir?!— Me pregunto alterado.
—–Calmate un poco Griezmann.— Hable.—Cuando te vi en aquel derbi me replantee la idea de decírtelo, pero me dio miedo, después de dos años aún tengo miedo. Te lo iba a decir, pero cuando llegara el momento.
—–¿Y cuándo llegaría el momento según tú?— Me pregunto frunciendo el ceño.
—–No lo sé, cuando te viera más cercano a mi y a Ezra supongo.— Hable moviendo mis manos nerviosa.
—–¿Por qué tenías miedo de decírmelo?— Suavizo su tono de voz.
—–Porque se que tienes una familia con Erika y Mia, no quiero romper esa familia Griezmann, creí que sí te enterabas no te harías cargo de Ezra.— Trate de explicarme sin mirarle.