Capitulo seis. 🌱

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¡Esto era malo! ¡Esto era jodidamente malo!

Cuando se inclinó intentando encontrarla con la mirada, la muchacha salió del agua sosteniendo un pescado y con este mismo lo abofeteó, sacándole un grito al pez gato.

—¡NO MALTRATEN A LA FAUNA! —Gritó el encargado, Michikatsu desde lo lejos al ver la escena. Corrió rápidamente hasta donde se encontraban los muchachos.

—¡MIERDA! —Tengen se levantó rápido descolocado por el golpe, caminando hacia atrás limpiándose la cara. Terminando por tropezar con Kyojuro quien seguía entretenido en lo suyo. Por consecuencia, ambos terminaron cayendo al agua.

El sonido del chapuzón resonó por todo el lugar.

T/n se aferró a la madera y subió de nuevo al muelle sacudiendose para secarse.

—Jodido idiota... —Murmuró. Al mirar se percató de lo que había conseguido.

¡Su amigo no estaba por ninguna parte!

El pobre Kyojuro había caído al lago también.

Se alarmó y fue rápidamente otra vez hasta la orilla del muelle asomándose para encontrarle.

—¡Kyojuro! ¡Lo lamento tanto! —Pidió disculpas, alarmada. el varón salió del agua para tomar aire escupiendo un chorrito del líquido para acabar tosiendo.

—¡Ustedes tres! ¡Hoy no es día de nado! —Regañó el mayor posicionandose detrás de la muchacha. Siendo ignorado completamente.

—¡Te ayudo! —Habló nuevamente T/n ofreciéndole su mano al varón. El rubio se dirigió a ella y tomó sus manos para volver a subir al muelle.

Pero ninguno contó con el peso del otro. A penas el varón ejerció presión en las manos de la femina terminó por arrastarla consigo. Los dos igual de idiotas, una por creer que podría y el otro por pensar que lo aguantaría. En un intento vano por no caer la peliT/c se aferró a la camisa del hombre detrás suyo.

—¡¿Eh?! —Fue lo único que pudo articular el hombre pues, estrepitosamente los tres cayeron al agua.

—¡CARAJO! —Gritó Tengen, le cayeron todos encima.

Los responsables salieron nuevamente en busca de aire. Todo esto era un desastre.

La habían regado en cantidades extremas y eso lo sabían.

Michikatsu se levantó frente a los tres jóvenes lentamente, completamente empapado, observandoles con furia evidente. Tomó su gorra y al ponérsela un buen chorro de agua cayó sobre el nuevamente.

Apretó los dientes y tembló de rabia.

—¡ESTAN CASTIGADOS! —Gritó histérico.

Los saco del agua llevándolos a rastras con él.

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Best Day | Sanemi ShinazugawaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora