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Una vez de vuelta en el castillo, la reina pudo verse relaja. Ciertamente le ponía los pelos de punta el salir a pasear por los alrededores del pueblo, ya que se veía expuesta a un gran peligro al ser la esposa, omega y reina del Rey alfa de la familia real Lee, aunque estuviera acompañada las veinticuatro horas del día con al menos, por lo mínimo, tres guardias altas de gran porte y fuerza, cierto miedo se albergaba en su interior de ser emboscada.

Tenía fé de que su pueblo no era malo, o al menos no del todo, tenía la esperanza de que los habitantes del Reino les vieran con respeto y compañerismo y se sintieran como bien mandados con su alfa al mando de la jerarquía del Reino, el cual se des vivía día tras día, cada día desde si coronación por el bienestar del pueblo, que si bien, al inicio no tuvo el mejor comienzo, se esforzó por mejorar y aún pasados los años, admitía que a veces se veían terribles desbalances tanto como económicos como suplementarios, habían días donde debía estar mucho más al pendiente de su esposo todo el día en su Oficina, tratando de dar basta fragancia de si misma para así poder tranquilizar a su alfa mediante su aroma a omega, o darle apoyo moral, un masaje de hombros o simplemente su compañia oara hacerle saber al Rey que le apoyaba siempre, desde que le conoció hasta en ese instante de su vida, luego de veinte años de matrimonio.

Y es que Soumin podía recordarlo y relatarlo con bastante  claridad tu convivencia con el que era ahora uno de los amores de su vida y alfa.

Los padres Soumin y Miyeon eran buenos amigos, siendo los padres de la omega también los Reyes de la princesa menor del Reino Ágata.
Al sus padres ser amigos, fué inevitable para Soumin y Miyeon conocerse, que desde siempre se reconocían como buenos amigos incluso como hermanos.

No fué luego de los diecisiete años de Miyeon y los dieciséis años de edad de Soumin que el alfa despertó sentimientos más allá por la omega que en su niñez vió como su hermana.

No pudiendo soportarlo más, en el cumpleaños número dieciocho de Soumin, Miyeon de ahora diecinueve años decidió confesar sus sentimientos y deseos por cortejarla.
Soumin recuerda con claridad el sentimiento de plenitud que invadió su ser al escuchar la confesión de su alfa adolescente, sintiendo su alegría desbordar al saber que sus sentimientos eran realmente correspondidos.

Decidiéndose por así dejar el cortejo de lado y pasar a un noviazgo directo, y no arrepintiendose de ello, ya que supieron aprovechar cada segundo de su naciente relación.

Luego de un año, recordaba que en una cena entre ambas familias reales, Miyeon pidió la atención de las familias presentes y así dar el siguiente gran paso. Pedir su mano.

Asombrada por el hecho, recuerda que lloró lloró tanto de felicidad y luego se avergonzó terriblemente, para luego de limpiar sus lágrimas, dar el tan ansiado sí.

Y así fué como a los veinte años de Soumin y veintiuno de Miyeon dieron paso al matrimonio y coronación de ambos, donde luego de seis meses de las ceremonias, se dió a conocer la maravillosa noticia de que estaban a la espera de un cachorro.

Invadidos por las emociones, hicieron una fiesta entre algunos de los tantos reinos para que así todos supieran que la omega del Rey Lee estaba en cinta a la espera de su primer cachorro.

Los meses pasaron y pasaron hasta que el día llegó antes de lo esperado, se preveía que el heredero de los Reyes Lee nacería a mediados de noviembre según los bastos estudios que le hicieron a la jóven omega, pero no fué así, y así fué como el primogénito de los Lee, Lee Minho nació el veinticinco de octubre en la noche.

El parto había sido laborioso, trabajoso y realmente duro, había dejado a la omega notoriamente débil y desvanecida, pero nadie le había dicho cuan doloroso era dar a luz a un cachorro que al futuro sería uno de los excepcionales alfas puros.

Soumin y Miyeon estaban bañados en abundante felicidad, atendiendo a los antojos y caprichos de su hermoso bebé, y no sólo ellos, sinó también los viejos abuelos y Reyes extranjeros los cuales enviaban constantemente presentes al cachorro.

Luego de 10 años, exactamente cuando Minho se presentó como alfa puro, cayó en una gran depresión tanto ella como su omega, puesto que al recibir la noticia, todos los cabos sueltos fueron juntado de golpe. Sabía que los omeyas que concebían alfas puros, a dar a luz, además de su energía en el parto, daban su fertilidad a su cachorro, sabía que dar vida a un alfa de sangre pura niñera tarea fácil, o cosa de cualquier omega ya que la mayoría no resistía los fuertes partos y perdían la vida junto al cachorro. Ese hecho ayudó a Soumin a levantarse de ese deplorable agujero y seguir amando desenfrendamente a su cachorro, a su bebé alfa de sangre pura.

Y luego de varios años, ahí estaba Soumin, siendo la reina del Castillo y pueblo, con un gran alfa y un hermoso cachorro de diecinueve años el cual presentía sería el mejor Rey que la historia de los Lee llegará a tener.

Soumin era feliz, y aunque a veces tenía miedo, era sumamente feliz.

Es un poquitito más corto, pero no tenía tanta imaginación así que decidí hacer un capítulo dedicado a los padres de Minho

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Es un poquitito más corto, pero no tenía tanta imaginación así que decidí hacer un capítulo dedicado a los padres de Minho.

Lamentablemente aún no podré hacer el maratón por motivos de que ahora estoy pasando por varios problemas personales, pero primero hacer lo mejor que pueda. 💗

¿Intocable?  | MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora