El obsequio de Stiles |Sterek|

Capitulo Diecinueve.

-Stiles-

—¿Como es posible esto, Stiles?

Melissa siguio pasando el pequeño aparatito por mi abdomen, girando la pantalla hacia mi. Observando la misma, intente encontrarle forma a las manchas que se movian en la imagen. Miré a la mujer con confusión, pidiendole sin palabras que me guiara.

Ella medio sonrio, moviendo el aparato nuevamente antes de apuntar un punto—. ¿Ves esto? —pregunto, asenti suavemente—. Es la cabecita. Aquí estan sus manitos y cuerpo.

—¿Como es posible que esten tan formados? —fruncí el ceño haciendo cuentas con mis dedos.

—No puedo creer lo que estoy viendo —nego, mirandome—. Tendras gemelos, Stiles. Eres un hombre, ¿como un hombre puede estar embarazado?

La miré un segundo, dejando que sus palabras penetraran en mi mente para poder procesarlas. ¿Cual era la única posibilidad para que algo como eso ocurriera?

—Gea —susurré—, te voy a matar cuando te agarre.

—¿Quien es Gea? —Melissa pregunto.

—Una amiga —explique antes de volver a mirar la pantalla—. ¿Donde esta el otro?

Ella me miró un segundo con confusión antes de suspirar—. Voy a hacer de cuenta que esto no es raro —cedio finalmente antes volver a la pantalla—. Allí —apunto—. Ese es el otro.

—Cool. —musite.

Melissa me miró sonriendo, sus ojos inundados en lagrimas—. Oh dios, esto es muy raro pero vas a ser padre, Stiles —se acerco a abrazarme—. Felicidades.

—Gracias creo —le devolvi el abrazo incomodamente—. Creo que deberiamos despertar a Derek, él tambien es parte de esto despues de todo.

—Oh si, Scott me lo contó —acepto antes de mirar a Derek aún en el suelo—. ¿Quieres intentar despertarlo tu o traigo alcohol?

—La última vez que perdio el conocimiento cerca de mi, le di un puñetazo y se enojo —recorde antes de encogerme de hombros—. Pero si quieres lo intento.

—No estoy segura si arriesgarme. —acepto.

No necesitamos ninguna de las dos cosas ya que Derek comenzo a moverse lentamente hasta que desperto, mirando hacia nosotros con el ceño fruncido—. ¿Que...?

—Te desmayaste, Machomen —me burle—. Y yo que pensaba que los hombres lobo tenian más resistencia que eso.

—Ella dijo que tu... —apunto de uno a otro—. Que tu...

—Estoy embarazado —dije, frunciendo el ceño por lo extraño que eso se había escuchado—. Creo que es el regalo de Gea.

—¿Ella te embarazo? —se sentó en el suelo, frotandose la cabeza mientras me miraba con una cara de confusion digna de enmarcar.

—No quiero apresurar conclusiones pero estoy muy seguro de que fuiste tu quien me embarazo —me mordí el labio—. Cuanto más lo digo, más extraño suena.

—¿Como es posible? —susurró.

—¿Y yo como voy a saber? Solo sé que aquí estan —miré hacia la pantalla y de nuevo a él, encogiendome de hombros—. En este momento estoy contento, seguramente enloquezca un poco luego pero ahora no —le dedique una media sonrisa—. Ahora, levanta el culo hasta aquí y ven a ver, no vas a querer perderte esto.

Derek se levanto del suelo con un poco de trabajo y automaticamente tomo mi mano. Melissa nos miró con una sonrisita antes de comenzar a mover nuevamente el aparato, no necesite su guia esta vez ya que podia identificar a los bebes sin problemas. ¡Joder, estaba embarazado! Tenia dos vidas dentro de mi, era totalmente irreal.