04. La decisión correcta.

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Liam observó con media sonrisa como Zayn se acurrucaba en el borde del sofá cercano a la cama, su cabeza vacilaba de vez en cuando como si no quisiese dormirse pero su cuerpo le diera batalla contra ello. El chico más pequeño se habia preocupado porque Liam tuviese el estomago lleno y estuviese comodo en la cama. Sino fuese por las corbatas que mantenian sus muñecas sobre su cabeza, hubiese pensado que estaba en un hotel con servicio exclusivo o algo así.

Habia intentado zafarse de sus ataduras varias veces pero Zayn habia visto las marcas en su piel y le habia pedido, o más bien rogado, que dejase de hacerlo ya que solo estaba lastimandose. Liam habia cedido, más por el hecho de que ya se habia dado cuenta de que no se soltaria a que tuviese miedo de lastimarse. Queria salir de allí de una vez. Jack no habia vuelto a visitarlos, segun Zayn tampoco habia vuelto a la casa lo que hubiese facilitado su escape si solo lograse liberarse de las malditas ataduras.

Habian estado viendo televisión por un par de horas pero la vejiga de Liam estaba comenzando a darle problemas, lo cual le dio un plan para poder escapar de allí. Miró a Zayn por un segundo, tal vez luego podria enviar a alguien a ayudar al chico pero ahora se conformaria con escapar él.

—¿Zayn? —musitó, logrando que el moreno alzara la cabeza de golpe y parpadeara hacia él.

—¿Mhm?

—Neceisto ir al baño —le informó—. Es urgente.

Esto tuvo al más pequeño frotandose los ojos con brusquedad antes de quitar la manta que tenia sobre sus piernas y bajar los pies descalzos al frio suelo de madera. Una vez que parecio poder orientarse sin esfuerzos, miró a Liam con el ceño fruncido y sacudio la cabeza—. No puedo desatarte.

—Es eso o voy a tener que orinarme encima, tu eliges.

Zayn se pusó de pie con suavidad, aun haciendo algunas muecas de dolor y se acercó a Liam con lentitud. Miró las cuerdas y de nuevo a su rostro—. ¿No puedes aguantar hasta que Jack regresé?

—¿Crees que vuelva pronto?

Negó, logrando que el cabello flotara hacia su rostro—. Por lo general siempre llega en la madrugada y siempre borracho.

—No creo soportar mucho, Zayn —aseguró—. Realmente necesito ir.

—Tal vez podemos hacer como en los hospitales —propuso—. Como cuando los pacientes no se pueden levantar de la camilla.

Liam elevó una ceja hacia él—. ¿Estas dispuesto a tocarme ahí abajo para que pueda orinar en un recipiente?

El moreno arrojó una breve mirada en dirección a la entrepierna de Liam y se volvio de diez tonos diferentes de rojo antes de negar con la cabeza—. No creo poder hacer eso.

—Entonces no nos quedan muchas opciones. —Liam simulo pensarlo un segundo, sabia que el padre de Zayn habia salido en un viaje de negocios porque el chico se lo habia dicho antes así que tenia el camino libre para poder huir sin contratiempos—. No encuentro otra opción, o me sueltas o tendré que orinar sobre tus lindas sabanas.

Zayn frunció el ceño hacia él, como si estuviese meditando sus opciones antes de que elevara sus pequeñas manos y llegara las cuerdas que mantenian a Liam en la cama—. Solo... no intentes escapar, ¿si?

El castaño respondió con un breve gesto que podia interpretarse como si o no, ya que era eso justamente lo que iba a hacer. Una vez que Zayn terminó de liberarlo, automaticamente se frotó las rojas muñecas por culpa de las cuerdas y miró al chico—. ¿Donde esta el baño?

—Allí —apunto a la puerta contigua a la habitación.

—Bien —Liam se puso de pie y se dirigia a ella, ya que realmente necesitaba ir al baño.

Stockholm Syndrome |Ziam|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora