Autismo Jenlisa

Capitulo 7

Lisa acomodaba a la pequeña Kim en su asiento junto a jennie que la miraba con reproche por cambiarla de lugar, La alfa quería ver a su omega, y ahora no podía por su cachorra.

-Lisa~, No te veo-Jennie repentinamente se estaba sintiendo desesperada-Lisa, no me gusta no verte

-Cariño, solo será hasta que lleguemos a la ciudad

Lisa estaba nerviosa, estaba más que asustada. La pequeña Ella Kim manobal, cumplía una semana de haber nacido. Nadie más que ellas y la partera sabían qué existencia, el parto había sido en casa, atendido por una Omega que atendía partos desde muy joven, todo había salido bien, la cachorra había nacido con algo de sobrepeso pero estaba bien.

La decisión de ocultarlo había salido de la propia jennie, y Lisa estaba feliz de aceptarlo, la mayor parte del embarazo se la había pasado en casa, habían contratado alguien para que trajera todo lo necesario, así que todo había salido de maravilla.

Durante el embarazo, Lisa se encargó de informarle todo lo que cambiaría cuando Ella viniera al mundo y jennie lo había entendido muy bien. Pero lo que no le dijeron era que tendría que cambiar lugar con su hija.

La bebé no entendía así que no había problema, el asunto era jennie, quien no quería aceptar que la habían cambiado de sitio.

La omega estaba encargada de manejar por falta de personal, tendría que llegar hasta la ciudad donde el chófer las recogería si bien les iba.

-Esto no me gusta-Jennie gruñó bajito para no despertar a la cachorra, era una de las cosas que si entendía a la perfección-Quiero ir adelante.

-Bebé, sabes que no puedes.

-Prometo no salirme, esta vez si cumpliré con mi promesa.

Jennie hizo un gran puchero que terminó por convencer a la omega, la Alfa festejo sentándose donde siempre había anhelado, puso su cinturón y un par de audífonos que aislaban el ruido del exterior.

Lisa de todos modos puso los seguros y reviso por última vez a su cachorra antes de emprender viaje.

A la mitad del camino Lisa tuvo que parar para alimentar a la pequeña Ella, sin embargo, jennie no paraba de verla con algo de recelo, había descubierto que la Alfa le tenía un pequeño odio a su hija por quitarle la atención de su omega. Pero sabía lo que se sentía querer ser atendida y comprendió que la bebé se sentía de ese modo, el depender de otra persona, jennie finalmente entendió que Lisa podía estar para las dos.

Aunque le estaba costando un poco, principalmente porque su apego a su "bubu" era muy grande, con tan solo mirarle supo lo que la alfa quería y estaba dispuesta a dárselo

Para la buena suerte de Lisa, producía una gran cantidad de leche, y estaba orgullosa de tener ese beneficio que otros no tenían, hasta tenía su propio banco de leche el cual estaba en una hielera en la cajuela.

jennie miró a la omega con ojos de cachorrito regañado y Lisa trató de ignorarla lo más que pudo, La alfa tuvo que usar una de sus tácticas más eficientes si quería obtener lo que deseaba.

Con su pie tocaba continuamente la pierna de Lisa para que esta le pusiera atención, Lisa jadeo por controlar a su omega que le gritaba atender a su Alfa, simplemente su lado maternal no la dejaba.

Sin embargo, Lisa espero hasta que la bebé estuviera satisfecha para atender a jennie, esta ya comenzaba a desesperarse.

-No desesperes Jennie, recuerda que la bebé tienes que llenarse porque no come como nosotras.

-Lisa~

-Tranquilo cariño, ya casi se duerme ¿Sí?

-Sí, omega

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Jennie finalmente había dormido después de dejar literalmente vacía a la omega, de algún modo lo agradecía, ya que sus senos estaban comenzando a doler de una manera que no se lo deseaba a ningún omega, de esto hablaba cuando decía que tenía una excelente producción de leche.

La había puesto en su sillita junto a Ella, también dejó una manta con su olor para convencerlas de que estaba ahí mismo.

Sentía su cuerpo adolorido después de haber pasado muchas horas manejando, aunque claro, hace una semana estaba maldiciendo por las doloridas contracciones. Pero todo valía al tener a sus lindas bebes junto a ella.