Cumpliendo los quince

Capítulo 4.

Capítulo sin editar

Capítulo 4. Dos intrusos en clase.

NARRA SOFÍA

Termino de vestirme en el baño que tenemos en el cuarto puesto que me niego a cambiarme delante de mi nuevo compañero, Charly.

Llevo solo un día conviviendo con él y ya ha conseguido sacarme de mis casillas unas cuarenta veces. Es insoportable, ayer apenas me dejó dormir con sus constantes preguntas bastante estúpidas y sin sentido. ¿Lo peor? La cantidad de sustos que intentó darme.

—¿Qué te queda rubia? —grita desde fuera.

Encima ahora cada vez que me habla me llama rubia. Así de la nada. ¿Cómo vas a ponerle un mote a alguien a quién acabas de conocer?

—Pero si acabo de entrar, déjame tranquila.

Me tardo lo mío para molestarle más aún. Cuando abro la puerta me encuentro con Charly ahí parado esperando con cara de pocos amigos.

—Gracias por darte prisa, muy amable por tu parte —ironiza.

Yo me encojo de hombros y me dispongo a salir del baño. Si no fuese porque Charly me lo prohíbe con su brazo.

—¿Y ahora que quieres? —pregunto intentando quitar su brazo del medio.

—Espérame para ir a clase, que es el primer día y no quiero perderme.

—Ya veremos.

Charly suspira y yo me río. Estaría bien gastarle la broma de que no le he esperado, sobre todo, para devolverle lo mal que se portó ayer conmigo.

De hecho eso hago, me escondo detrás de la puerta para darle un susto cuando salga. ¿El problema? Mientras espero visualizo a Brent por el pasillo, así que rápidamente entro de nuevo al cuarto sin pensármelo dos veces.

—¿Qué pasó rubia? —Charly está secándose el pelo con la toalla. Para colmo en este preciso momento solo lleva sus pantalones puestos.

Al ver el panorama me tapo los ojos rápidamente.

—Tápate —grito molesta.

Charly simplemente se limita a reírse de mi. Hecho que hace que me de más coraje.

—Como si no hubieses visto a un tío así antes.

—¡Claro que no! —vuelvo a gritarle pero sin mirarle. ¿Quién se cree?

—Claro porque cuando vas a la playa o a la piscina no te encuentras a los tíos así.

Esa respuesta provoca que vuelva a mirarle para fulminarle con mi mirada. Por suerte ya está completamente vestido.

—¿Te crees gracioso? —Charly se ríe mientras termina de coger sus cosas.

Una vez lo hace se dirige a la puerta.

—Vamos —Tras abrir la puerta justo vemos a Brent enfrente de ella. Es como si hubiese estado esperando para llamar. ¿Querría hablar conmigo? Seguro que sí, después de todo lo de estos últimos días nos queda una charla pendiente.

Su cara es un cuadro al ver a Charly y a mi tras él. Brent aún no sabe que comparto cuarto con un chico. Por lo que seguro se estará pensando cosas raras.

—Lo siento no quería molestar.

Brent se rasca la nuca y sin saber cómo reaccionar se marcha rápidamente. Me cuestiono si seguirle o no pero opto por dejarlo así. Este año quiero estar fuera de estos rollos amorosos que no van a ningún lado y centrarme más en mis amistades y estudios. Quiero ver que me gusta y que no, conocerme más, ver hasta dónde soy capaz de llegar, etc. No estar llorando por un niño al que un día parece que le gusto y al siguiente no.