Capítulo 9

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Capítulo sin editar

Capítulo 9. El estrés causa vómitos

NARRA SOFÍA

Llevo tres días sin poder pegar ojo. Ver a tu hermana besándose con tu primer novio no es algo agradable. De Susan me lo esperaba pero, ¿de Dylan? Ha sido un golpe bastante bajo. No se sale con la hermana de tu ex a pocos meses de dejarlo y menos la besas después de dedicarme un gol.

—Hoy estás como distraída, ¿qué te pasa? —La voz de Charly me trae de vuelta.

Le miro de reojo y trago saliva. Estoy muy nerviosa. Hoy nos toca exponer el trabajo y siento que no recuerdo nada.

—Nada Charly, son los nervios.

Él asiente no muy convencido. Cada paso que doy más cerca de la clase, más nerviosa me pongo. Estoy temblando de los nervios y tengo unas ganas de vomitar enorme.

—¿Estás bien? —Charly agarra mis manos intentando tranquilizarme pero no lo consigue y mucho menos cuando veo como Brent y Hunter pasan por nuestro lado. Eso me hace recordar que por algún extraño motivo que aún no entiendo están en esta clase con nosotros.

—No puedo Charly, no puedo —suelto una vez siento como las nauseas se apoderan de mi. Hunter y Brent también se percatan y me miran extrañados. Yo me doy al vuelta y me voy corriendo a mi cuarto, donde llego justo a tiempo para vomitar en el retrete.

Charly me sigue y toca la puerta del baño. Menos mal que la tranqué, de lo contrario ahora se estaría gozando mis vomitos en primer plano.

—Dile a la profesora que estoy enferma del estómago y no puedo exponer hoy —grito para que me escuche al otro lado.

—¿Pero y esto de repente? ¿Qué ha pasado? —Él sigue con sus preguntas y eso me pone más nerviosa aún. En este preciso instante lo único que necesito es estar sola.

—Charly no busques más motivos, estoy enferma y ya.

Él no responde más y asumo que se da por vencido. Yo me quedo un tiempo más en el baño asimilando la situación. Como si no hubiese estado ya tres días haciéndolo.

Me miro en el espejo y comienzo a preguntarme si tal vez el problema soy yo. Si yo soy la que no encaja con el resto. Eleonora tiene a veinte mil tíos detrás, Susan está con Dylan, Flora con idas y venidas con Hunter pero yo... últimamente parezco un cero a la izquierda. Con todo chico que me gusta termino teniendo problemas, así que a lo mejor el problema sí que soy yo.

Al final termino tumbada en la cama hasta que se hace la hora de almorzar. En estos momentos son en los que echo de menos a Anastasia. Si estuviera aquí podría quedarme con ella comiendo en el cuarto.

—Te traje pescado con arroz para que no te siente mal en el estómago —Charly aparece como si hubiese estado oyendo mis plegarias. Me destapo un poco y le miro confusa—, venga anda, come que te va a venir bien.

Él se acerca a mi y me trae la comida en una bandeja hasta mi cama.

—Gracias — Con cuidado me abalanzo sobre él y lo envuelvo entre mis brazos—. Necesitaba esto —confieso entre lágrimas.

Él me corresponde el abrazo y nos quedamos varios segundos así.

—¿Y ahora me vas a contar que te pasa?

Dudo si hacerlo o si empezar a contarle el trauma que ha supuesto para mi haber visto que mi hermana sale con mi ex novio.

—Vi como Dylan se besaba con Susan —confieso.

Cumpliendo los quinceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora