Abby
Han pasado 4 días desde la videollamada y la visita de Pablo a mi casa invitándome a la gala del Golden Boy y yo como podéis imaginar no tengo el vestido acorde con la situación, en mi vestidor abundan los vestidos pero ninguno de ellos está al altura de gala tan importante.
Sira, la novia de Ferran, con la cual he entablado una relación bastante buena, es muy buena chica, te ayuda en todo y siempre te da consejos que te hacen seguir adelante y no quedarte entascada en tus pensamientos, es hija de Luis Enrique, actual entrenador de la Selección Española.
El mes de julio ha llegado con bastante calor casi tanto que he tenido que limpiar e instalar la piscina para el comienzo del verano de verdad, estos días me he pasado de ir a la piscina de mi mejor amiga para después dar una vuelta y tomar helado en Barcelona, me encantaría decir que el verano es mi estación favorita pero lo cierto es que la primavera le gana de pasada. Lo único destacable del verano es mi cumpleaños a comienzos del y vacaciones durante 3 meses sin necesidad de agobiarse por si hay examen al siguiente lunes.
En este momento el reloj marca las 14:00, preparo una ensalada con productos frescos que compré ayer a la vez que escucho música que transmite el pequeño altavoz de la cocina.
Un sonido proveniente de la puerta hace que aparezca en mi cabeza la pregunta ¿He invitado a alguien hoy a comer? No recuerdo haberlo hecho pero aún así me acerco lentamente a la puerta para descubrir quién toca a mi puerta.Al encender la cámara me quedo sin respiración al ver la persona que espera tranquilamente en la puerta de mi casa es Gavi. ¿Qué hará este hombre aquí si no lo he invitado?, ni siquiera recuerdo haber hablado con el estos días. Con todo el nerviosismo del mundo, abro la puerta lentamente para encontrarme a Pablo apoyado en el marco de la puerta con una sonrisa burlona en la cara.
—¿Qué haces aquí?
—Hola a ti también amor -fruncí el ceño
Inconscientemente me eche para un lado para que pudiera pasar aunque siguiera confundida por su estelar aparición en mi casa a la hora de comer. ,
—Me puedes ya decir que haces aquí?
—Solo quería verte, llevamos días sin hablar
Cruzé mis brazos en busca de una respuesta que no sonara a excusa pura y dura pero no hubo éxito ya que el sevillano solo sonreía y posaba una mano en mi hombro.
—Puedes decirme algo que ni suene a excusa eh?
—No es ninguna excusa, de verdad he venido porque quería verte
—Seguro. Gavi de verdad tengo cosas que hacer y no estoy para tus tonterías
—Te dije que me llamaras Pablo, Gavi me llama todo el mundo
—¿Y? Que tiene que ver eso además te dije que me dejarás en paz
—Porque tu no eres una cualquiera y no te voy a dejar en paz porque me importas y se que me odias pero no voy a dejar que te alejes de mi para siempre.
–Pablo...de verdad estaba muy tranquila sabes? ¿Porque tienes que hacer esto tan difícil? No entiendes que no quiero estar contigo
—No quieres o tu orgullo no te deja admitir que puedo llegar a ser buena persona aunque sea un futbolista
Me quedé callada. Tenía una pizca de razón pero ya me habían roto el corazón una vez y me prometí que nadie más me volvería a hacer nada fuera quien fuera pero él no me había hecho nada además de ayudarme en mi ataque de ansiedad yo se lo pagaba borde y distante.
—Porque creo que te he dejado bastante claro que soy una persona en la que puedas confiar y que no voy a hacerte daño pero ya piensas lo que quieras.
Yo no supe que decir así que no hable hasta que vi que se acercaba hasta la puerta dispuesto a irse. No pude dejar que se fuese así que fui hasta la puerta llamándolo.
—Pablo espera
Se giró al escuchar que lo llamaba y una cara de confusión apareció apareció su rostro dejándome saber que tenía que hacer ahora o nunca.
—¿Qué pasa? Ya me lo has dejado claro
Llegué hasta él y sin pensar nada junté nuestros labios en un beso lento y suave a lo que se le fue formando una sonrisa ladeada. Parecía una locura extrema lo que acababa de hacer pero no sabía otra forma con la que agradecerle todo a pesar de ser una inmadura y idiota con el además de tragarme el orgullo de no querer hablarle bien.
—Lo siento por ser una gilipollas, me ayudaste cuando nadie se había dado cuenta de eso, me has invitado a una gala donde van solo las personas importantes y a mi me conoces de 1 mes, me dijiste que era importante para ti y yo te lo he pagado hablándote borde y queriendo alejarme de ti lo más lejos posible. Lo siento de verdad Pablo...
Alcé mi mirada a sus ojos marrones que me miraban con tristeza a la vez que mostraban un atisbo de felicidad y brillo en sus ojos color miel.
—No te preocupes Abby, entiendo que no te quieras juntar conmigo a veces, ser famoso es difícil ¿Sabes? La gente quiere verte todo el rato y saben dónde estás a que hora y eso te agobia. Por eso quise juntarme contigo porque eres de las únicas chicas de Barcelona diría yo que no salta y se emociona cada vez que me ve por la calle y se abalanza hacia mi para una foto o una firma. Por eso pienso que eres diferente a las demás, a demás nunca fui con intención de molestarte, bueno, al principio un poco si pero vacilar es parte de mi personalidad —no es que este vacilando siempre— pero ya sabes. Quiero invitarte a la gala del Golden Boy por ser tú y si no quieres hablar más conmigo lo entenderé, de verdad por mucho que yo quiera acercarme a ti
—Estaré totalmente agradecida de ser tu pareja en el evento Pablo —aunque a veces no lo soporte—¿A qué hora vendrás a recogerme?
—Puedo quedarme la noche anterior si quieres, con tal de que estés conmigo
Sonreí y rodee mis brazos en su cintura aferrandome a él después de intentar alejarlo de mi aunque ya me di cuenta que es imposible por más que haga. Pablo me agarró de la cintura dejando un beso en mi cabeza a la vez que dejaba ver la sonrisa que me daba la vida.
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1° de todo quería informaros de mi inactividad estos días porque me dieron las vacaciones hace poco y estoy disfrutandolas después de un curso de tensión y agobio. A parte a finales de junio realicé un viaje a Inglaterra con mi clase de 1 semana y no pude coger mucho el móvil.
2° gracias por todo el apoyo que estáis dando a mis historias, os quiero muchísimo 💕
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Strange Love - Gavi
Fiksi PenggemarAbby Ruiz, cumple 16 años y lo celebra con su mejor amiga en la comunidad catalana. Al dirigirse para una cafetería cercana, divisan una figura de alguien bastante reconocido que hará que la relación de estos se vuelva de odio al amor .