TRANSMIGRAR A UN VILLANO

CAPÍTULOS DEL 31 AL 35

CAPÍTULO 31. NO ENMARQUES
AL PROTAGONISTA MASCULINO.

Xiao YuAn, regresando al Palacio Imperial desde el Palacio Jing Yang, se sentía ansioso por todas partes. Le preocupaba que un villano carne de cañón hiciera un movimiento, y por eso, quería cuidar de Yan HeQing. Por ello, pidió al Guardia Yang, un excelente y eficiente guardaespaldas, que vigilara todos los días el Palacio Jing Yang, temiendo que pudieran ocurrir accidentes.

Menos de una semana después, algo ocurrió realmente.

Xiao YuAn estaba comiendo en ese momento, pero al escuchar el informe de Yang LiuAn, corrió instantáneamente al Palacio Jing Yang tan pronto como dejó el tazón.

Este asunto no era grande, pero tampoco era un asunto pequeño.

Un concubino dijo que vio a Yan HeQing practicando con la espada en el patio, y luego fue a informar al director del Palacio Jing Yang, Hong Xiu.

El palacio Jing Yang tenía muchas normas y reglamentos, y la práctica de la espada y las artes marciales siempre ha sido un tema tabú. En primer lugar, al Emperador le gustan las concubinas masculinas suaves y hermosas que conocen su lugar, que es servirle en la cama. Practicando la espada, siendo su identidad el Príncipe del Reino Yan del Sur, Xiao YuAn tiene miedo de que parezca que quiere apuñalarle hasta la muerte.

En ese momento, Yan HeQing y la concubina masculina que lo denunció estaban en el patio, arrodillados frente al director del Palacio Jing Yang. Hong Xiu los miraba con ojos complicados y expresión vacilante.

Varios esclavos intercambiaban miradas en secreto, todos deseando ver el drama que se iba a desarrollar.

De acuerdo con el temperamento pasado de Hong Xiu, si este asunto resultaba ser cierto, entonces lo que le esperaba a Yang HeQing no era sólo dolor físico, sino una mano rota o un pie incapacitado.

Sin embargo, hace unos días, Xiao YuAn le contó repetidamente su plan sobre cómo ganar el corazón de Yan HeQing era mejor que recurrir a la violencia. De hecho, Hong Xiu no quería ser dura con Yan HeQing, incluso si planeaba castigarlo con un latigazo.

Pero las cosas se complicaron porque el concubino varón que hizo el informe era conocido por tener la lengua suelta, ¡ya que era extremadamente aficionado a los cotilleos!

Antes de que Hong Xiu se enterara de la situación, la noticia de que Yan HeQing practicaba en secreto con la espada se había extendido por todo el Palacio Jing Yang. Si el castigo consistía en un solo latigazo, la autoridad de Hong Xiu sería cuestionada: parecería que estaba protegiendo a Yan HeQing para que pueda matar al Emperador en un futuro cercano.

Los ojos de Hong Xiu iban y venían entre los dos hombres arrodillados en el suelo. Finalmente, miró fijamente a la concubina masculina: "Dijiste que Yan HeQing estaba practicando la espada en secreto, pero, ¿tienes alguna prueba?"

El concubino levantó la cabeza con impaciencia y dijo sin vacilar: "Este esclavo no pudo dormir por la noche aquel día, así que me levanté temprano por la mañana para disfrutar de la nieve. Inesperadamente le vi practicando técnicas con la espada. Soy consciente de que no debo hablar sin pruebas, así que al día siguiente llamé a Qin Yu y a los demás para que me acompañaran en secreto. Como era de esperar, ¡estaba practicando de nuevo con la espada!"

A Hong Xiu le dolía la cabeza y se llamaba Qin Yu. En ese momento, Qin Yu se arrodilló en el suelo, suavizó su voz y sonrió con picardía: "Hong Xiu-jiejie, puedo atestiguar que todo lo que se dijo ocurrió de verdad. Además, ¿cuál es su propósito de practicar la espada estos días, si no es para dañar a Su Majestad?"