Capitulo 26: la cita

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Doppler le habia contado todo a su esposa. El tiempo corría, así que habia que poner el plan en acción.

Amelia fue a la habitación de Ariel dónde la había dejado cambiandose de ropa.

Amelia: Ariel ¿Ya estás lista?

Entonces la puerta se abrió y ahí estaba ella con su ropa nueva.

Amelia: te ves increíble, espero que no te moleste, pero era lo único que había

Ariel nego con la cabeza, como diciendo: "no pasa nada

Amelia: vamos, alguien te espera abajo

Fueron al comedor, dónde ahí estaba sentado en una de las mesas donde habia unas velas encima, dos vasos con jugo, dos platos y dos tenedores para cada uno.

Jim quedo maravillado por su apariencia, parecía completamente una pirata.

Jim: luces muy linda

Ariel solo sonrió.

Amelia: los dejo solo muchachos (Guiñándole el ojo a Jim)

Amelia se dirigió a su oficina, dónde estaban Scuttle y Sebastián.

Amelia: okey, ya me contaron lo que pasa ¿Es verdad que Ariel debe matar a Jim?

Sebastián: no debe matarlo, besarlo

Amelia: oh, entiendo

(Nota: en el cuento de la Sirenita de Hans Christian Andersen, ella debe matar al príncipe para volverse Sirena de nuevo, pero ella no es capaz de hacerlo porque su amor por el lo impide)

Scuttle: ojalá esto resulte

Devuelta con los protagonistas...

Ariel se sentó al frente de Jim, había un silencio muy incómodo entre ellos. Así que Jim intento iniciar una conversión...

Jim: y... ¿Cómo estás?

Ariel escribió en su libreta:

"Bien"

Jim: que bien, y... ¿Algún pasatiempo favorito?

Ariel volvió a escribir:

"No recuerdo nada ¿Lo olvidas?"

Jim: oh, lo siento

Permanecieron en silencio, esto era muy incómodo para ellos.

Jim: ¿Porque el cocinero se demora tanto? Espérame aquí, vuelvo enseguida

Ariel asintió.

Y Jim fue donde estaba el cocinero. Espero un rato, hasta que quedo hipnotizada por la luz del fuego de la vela.

La quería tocar.

No sé percató que Jim estaba de vuelta.

Jim: Ariel, no!

Pero ya era tarde, Ariel lo toco y se quemó, apartando la mano rápidamente.

Rapidamente fue donde ella y tomo su mano y la puso en el vaso.

Jim: deja tu mano un poco en el jugo

Estuvo así un corto rato, hasta que ya se sintió mejor.

Jim: ¿Nunca has visto el fuego?

El Grumete y la Sirena (Jim & Ariel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora