Capítulo 11
Heather
En el instante que Lucas enfermó y me entregué a sus cuidados, mis emociones se revolucionaron y desde que me presenté en su habitación esta mañana, no deja de darme sorpresas. Promete no molestarme, amenaza a Alex con darle una paliza si me pone un dedo encima y ahora le ofrece refugio a Stella y Valerie en su casa. Es demasiado para procesarlo. ¿Quién es ese hombre que tengo enfrente? Ante la propuesta que le ha hecho a Stella, de repente siento que estoy de más en esa cocina y me asalta la idea de que Lucas esté interesado en ella, me parece imposible. Aun así, no soy ciega ante el afecto que tiene hacia Valerie. Quizás solo fue una estrategia para acercarse a su madre y ahora que tiene el camino libre con la partida de Alex, piensa atacar. No, solo me estoy dejando llevar por la mala imagen que tengo sobre él. Ni siquiera Lucas podría ser tan cruel como para fingir afecto por una niña. Los he visto juntos y su cariño es sincero.
Cansada de ser una simple espectadora en esa conversación, abandono la cocina. Encuentro a Valerie en el salón, tiene las manos debajo de la mejilla y duerme profundamente. Me siento en la esquina del sofá y le acaricio el pelo. Al ver en las circunstancias en que se encuentra esa niña y su madre, veo lo afortunada que he sido de tener unos padres amorosos y un hogar medianamente estable. No es que mis padres fueran una pareja feliz todo el tiempo, a veces se enfrascaban en una que otra pelea, todas provocadas porque mi padre se negaba a seguir el tratamiento que indicaba el doctor para su problema con el corazón, aparte de eso, mi padre nunca le tocó ni un solo pelo a mi madre y lo agradezco. Mi vida hubiera sido muy diferente hoy en día. Un trozo de papel que hay encima de la mesa me llama la atención. Tuerzo el labio al leer el nombre de Ashley. La única respuesta posible es que se lo haya dejado a Lucas.
Con la partida de Alex y de Ashley, en el hotel se respira otro aire. Janice y Cameron se marchan al día siguiente y han estado todo el día en la estación, aprovechando las últimas horas. Desde que Valerie ha despertado, se abrazó a su madre y no ha habido poder humano que la desprenda de ella, es como si pensara que Stella desaparecerá de su vida en cualquier momento. A la hora de la cena intento distraerla cuando sus ojos miran la silla vacía que solía ocupar Alex, la tristeza que transforma su rostro me encoge el corazón.
—Valerie, tenemos pendiente una partida de parchís —le dice Lucas y logra que sus labios se curven en una ligera sonrisa.
Es increíble que un niño tan travieso y malvado como Lucas, de adulto sea tan considerado con los niños. Desprende encanto y ternura por cada poro de su cuerpo. Valerie se termina el último bocado y lo sigue al salón. Más tarde yo también me uno, después que Lucas ha dejado a la niña ganar.
La manera educada en la que se ha comportado Lucas desde la mañana, me asusta. Solo ha tenido palabras amables hacia mí y en sus ojos hay un extraño brillo burlón. Me recuerda cuando éramos pequeños y me lo cruzaba en el jardín, tengo miedo de lo que se esconde debajo de esa mirada y simpatía. No me fío y me mantengo en guardia.
—Han sido siete casillas, no ocho —le reclamo a Lucas.
Me mira sorprendido y luego me regala una sonrisa que me alborota todo el cuerpo. Prefiero al Lucas que me molesta hasta sacarme de mis casillas. Este me provoca querer saltarle encima y besarlo. Todavía no he logrado borrarme de la cabeza la imagen de su cuerpo casi desnudo y como mi garganta se secó.
—He preparado ponche —anuncia Abigail entrando en salón con una bandeja.
Stella deja a un lado lo que está tejiendo y coge la bandeja.
—El vaso rosado es de Valerie, no tiene alcohol.
—Abigail, ¿puedes tirar esto a la basura?
Lucas toma el trozo de papel que tiene el teléfono de Ashley y un ligero peso del que no soy consciente abandona mis hombros.
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̶U̶n̶a̶ ̶b̶o̶d̶a̶ y un billete de avión
RomanceHeather tiene todo lo que una mujer puede desear y para cerrar con broche de oro, está a punto de casarse. ¿Qué puede salir mal? -¿Me quieres? -Pregunto y suelto una risa histérica- ¿Crees que lo que acabas de hacer, lo haría alguien que me quiere...