DEIMOS - Eddie Munson +18

XX. Quiero todo contigo. 🎀

⟪ Gill ⟫

Eddie está en el escenario, no puedo dejar de detallarlo es demasiado atractivo para mí, su cabello, su piel tatuada, sus ojos que me buscan de vez en cuando, su sonrisa maliciosa. Su camiseta es un poco corta y en medio de sus movimientos puedo ver su abdomen, aprecio sus brazos y sus manos sobre la guitarra, la devoción en que la toca, mi mente me lleva a escenarios extraños, pienso en que con la misma entrega que toca su guitarra toca mi cuerpo, aprieto mis piernas porque las cosas que pienso reaccionan en medio de ellas.

Eddie está lejos de ser un santo, sin embargo lo adoraría como uno.

Estoy tan concentrada viéndolo que no me doy cuenta de que hay una chica con Elliot a mi lado en la mesa, veo claramente su lengua desaparecer en la garganta de ella, guio de nuevo la mirada al escenario, ahora tocan Master of Puppets y Eddie se desliza en los sonidos con total propiedad, pienso que él puede interpretar esta canción en cualquier mundo o inframundo si existiera, creo que podría salvar a un pueblo entero solo con la música.

Finaliza la presentación Elliot me presenta a su acompañante de esta noche, su nombre es Rachel, se ve amable. Veo a Eddie hablando con Adam, le da dinero y se dan un apretón de manos, muerdo el borde del vaso de cerveza que estoy tomando, lo observo todo el trayecto hasta que se acerca a nuestra mesa, sin intención se ve hermoso, el cabello que cae en su frente se combina con el sudor, no pararon un segundo en el escenario, le hace una cara graciosa a Elliot, creo que nunca ha visto a la chica con la que él está.

—Te presento a Eddie, es guitarrista de aquí y novio de Gill, ella es Rachel — Elliot los presenta. Me quedo sorprendida, nunca hemos hablado de ser novios, ni siquiera sé si Eddie quiere eso conmigo, veo que él también se pone nervioso, solo agita su mano en el aire saludando y se sienta a mi lado.

—Hola preciosa — tomo una cerveza del balde con hielos, la destapo para él, intencionalmente roza sus dedos con los míos, el frio de la botella es un calmante para el calor que se desprende de mi cada que Eddie me toca.

—Eddie, estuviste genial hoy — realmente lo estuvo, es muy talentoso, toma de su cerveza como si fuera agua, veo algunas gotas de sudor caer por su sien, veo su garganta y el movimiento de ella cuando pasa el líquido, no entiendo porque cada cosa que hace su cuerpo es un espectáculo para mí.

—Te vi saltando muy animada, esperaba que me lanzaras tu sostén — soltamos una carcajada.

—Es que no traigo puesto, Eddie — comento en medio de la risa mientras paso mis dedos por su frente y su sien limpiando el sudor, moviendo un poco los mechones que se pegaron allí por el mismo.

—No seas así conmigo — pasa un brazo por el espaldar de la silla acercando su rostro al mío, observo como se muerde el labio, sigo apretando mis piernas, no entiendo porque me pone así.

—¿Así como? — ahora juego, le quito la botella de su mano y doy un sorbo, lo hago sugerente, observa el movimiento de mis labios al beber, su mirada va de mi boca a mis ojos, está llena de picardía.

—¿Vamos a bailar? — asiento varias veces, me da su mano para guiarme, todos se ven bastante borrachos en la pista de baile, ya es casi la una de la madrugada, pongo mis manos en su nuca, acaricio su pelo y su piel, él se agacha un poco, a pesar de que mis botas tienen plataforma aún tengo que verlo hacia arriba, pone sus manos en mi cintura acariciando por encima de la blusa.

Me besa mientras bailamos lento, nuestros cuerpos están muy juntos, puedo sentir la hebilla de su cinturón rozar en mi abdomen y mis pechos presionados en su cuerpo, sus manos se mueven; bajan peligrosamente al inicio de mi trasero, siento sus dedos apretar, parece que controla sus impulsos, la música que está sonando ahora es un poco más animada, es de esas que te invitan a mover todo, hemos tomado bastante cerveza y el alcohol hace un poco de efecto en mí, muevo mi cuerpo al ritmo de la música, el me sigue, reímos de algunas estupideces que decimos.