El Otro Stilinski

V.- Enseñando a Cazadores

Stiles suspiró por décima vez en una hora, había estado enseñándoles a los humanos como luchar pero se negaban, hacían lo que les decía pero no se esforzaban, no querían entender. El único que se esforzaba era Mason, era quien parecía entender todo.

— Basta. Mason no quiero que te separes de mi, ahora serás mi sombra en los entrenamientos. — miró a lo Argent — Ustedes no quieren entender nada de lo que les he dicho, hasta que cambien de actitud no los entrenaré. No soy su payaso para soportarlos, solo hago esto por los demás no por ustedes. — dijo Stiles molesto mientras se alejaba de ahí junto con Mason.

— Wow, creo que se enojó. — comentó Stuart con humor.

— Eres un poco cínico Stuart, por eso eres nuestro emisario. — dijo Derek saliendo de entre los árboles.

— Es verdad y tu pareces un acosador, pobre de mi hermano. — se quejó Stuart de manera dramática.

— Ahora puedo asegurarme de que Stiles es el más normal de ustedes dos. — le dijo Derek mientras acariciaba el cabello del castaño y después mirar a los dos humanos.

— No hicimos nada Derek, si estuviste viendo lo aves. — le dijo Chris. La verdad no tenía ni idea de que había pasado, pensaban que había seguido bien las instrucciones del castaño.

— Es por eso, ustedes no entendieron nada de lo que les dijo Stiles, él les explicó que les enseñaría a luchar con demonios que dejarían atrás su manera cobarde de pelear. Lo que no entendieron es que tienen que dejar de pensar como cazadores, él les dijo que serían diferentes, no pueden seguir actuando y moviéndose como cazadores, tienen que dejar el molde atrás pero ni siquiera se tomaron el tiempo de pensar en eso.

— Nos equivocamos, por eso se enojó. — dijo Allyson entendiendo todo, tenía que dejar de lado todo lo que le habían enseñado y comenzar a pensar como Stiles.

— Es verdad, es mejor que empiecen a pensar en como olvidar esas cosas y luego hablen con él. — miró al castaño — Vamos a comer algo Stu.

— ¿Cómo les fue en el entrenamiento? Los príncipes son fuertes pero tiene lógica han vivido por mucho tiempo y han aprendido muchas cosas, también son ángeles caídos así que sus poderes deben de enseñarles algunas cosas, ¿no lo crees?

Derek sonrió con dulzura, Stuart era su hermanito y siempre sabía como ser más tierno. Podía ver que en los ojos de Stiles también se veía demasiado tierno.

— Puede ser, pero según lo que nos han dicho han aprendido cosas por todo lo que han pasado. Ahora que lo veo de esa manera odio un poco más a esos demonios porque hicieron que esos hermanos salieran de su vida tranquila.

— Yo los odio pero al mismo tiempo agradezco que estén aquí porque trajeron de regreso a Mica, no creo que él hubiera vuelto si no estuviéramos en peligro. Ahora que esta aquí me siento tranquilo y completo, aunque no pueda recordarlo.

— Lo recordaremos. ¿Él se quedará cuando todo esto termine? Quiero pensar que si pero no sabemos bien por qué se fue, quizás hay más de lo que nos contó.

— Quien sabe, yo solo estoy feliz de tenerlo aquí. — dijo Stuart con una gran sonrisa.

*

— ¿Cuánto tiempo crees que nos quede? — preguntó Lucifer.

Los príncipes y Stiles se encontraban fuera de la mansión, específicamente sobre el techo.

— No mucho, tendremos una semana quizás. No sé que están esperando, en cualquier momento podrían atacar, son mucho más poderosos que esta manada.

— Quien sea que esta detrás de esto obviamente sintió nuestra presencia. No han de atacar por eso, somos más poderosos, no hay nadie que iguale nuestro poder así que deben de estar pensando en una estrategia. — comentó Belfegor.

— Eso tiene bastante lógica, te has ocultado tan bien que nadie debe de saber que estar relacionado con los Hale así que jamás pensaron que te involucrarías en este momento. — dijo Belial.

Stiles asintió, todo lo que decían era un posibilidad.

— Nadie conoce quien eres, te has ocultado muy bien estos años además de que eres conocido por todo el mundo, no solo el sobrenatural.

— Para los humanos son un asesino buscado. — dijo Stiles mientras negaba con la cabeza.

— Es verdad pero no conocen tu rostro así que estas a salvo y para nuestro mundo eres un protector y vigilante, cuidas y proteges a los que no pueden, siempre estas para ayudar. Aunque para nuestros enemigos eres su peor amenaza. — dijo Mammon de manera tranquila.

— Ustedes no se quedan atrás.

— Hemos hecho esto por muchos años, hasta milenios así que estamos acostumbrados, es por eso también que siempre tomamos la forma que los humanos piensan que tenemos solo tú y esta manada conoce nuestros rostros.

— No te olvides de esos hermanos.

— Tus hermanos son una excepción. — dijo Belcebú poniendo los ojos en blanco.

— Tienes que darles crédito han acabado con muchas amenazas. — comentó Stiles con cierta diversión.

— Siguen sin agradarme.

Los demás rieron junto con el castaño.

— Deberías decirle eso a Stuart, también tiene derecho a saberlo. Debió de decírselo Noah pero sabemos que no lo hará y no es porque odie a esos dos sino porque no lo cree necesario. — le dijo Lucifer.

— Se lo diré pero no es el momento.

— Tiene que ser el momento, es mejor que llames a tus hermanos, ellos son los expertos en demonios además tienen dos ángeles bueno un arcángel y un ángel. Podríamos, incluso, necesitar la ayuda del nuevo rey de los demonios.

— Tienes razón, puede que esto vaya mucho más allá de nuestras habilidades, no solo tenemos que proteger a la manada sino que también a este pueblo. Estos demonios no van a ser pocos y tampoco débiles, me encargaré de todo.

— Deberías dejar que te ayudáramos un poco más. — le dijo Belcebú abrazando al castaño.

Stiles solo asintió levemente para después mirar su celular y abrir los contactos.

— Es necesario. — susurró para sí mismo.

— No te gusta poner en peligro a los demás pero tampoco cuidas de ti mismo. — dijo Lucifer mientras negaba con la cabeza. Su hermanito humano podía llega a ser un dolor de culo.